Aniversario del nacimiento de Alan Turing, héroe contra el nazismo y perseguido por su homosexualidad
El Reino Unido conmemoró ayer 23 de junio el 97 aniversario del nacimiento de Alan Turing, considerado el padre de la informática moderna, y que contribuyó de forma decisiva a la derrota del nazismo gracias al descifrado de sus textos en clave. Considerado un héroe hasta que fue descubierta su homosexualidad, que se había visto obligado a mantener oculta, y el estado británico le obligó a escoger entre la cárcel o la castración química. Turing optó por la segunda. Durante un año le inyectaron estrógenos para «reducirle la líbido», sin importar que con ello se volviera impotente y le crecieran los pechos. Poco después, dos semanas antes de cumplir los 42 años, Turing se suicidó, aunque no faltan los que piensan que en realidad fue asesinado por la propia inteligencia británica.
La historia de Alan Turing, que nuestro colaborador Nemo recreó magistralmente en un artículo publicado por dos manzanas en septiembre de 2007 (ver «El caso Turing») es uno más de tantos y tantos casos de persecución, sufrimiento y humillación a las personas homosexuales que la historia ha conocido. Al Reino Unido poco le importó que Turing fuera un héroe que hubiera contribuído de forma decisiva a la victoria aliada sobre la barbarie nazi. Antes que nada era homosexual, y por eso merecía su castigo.
Cuando a lo largo de las dos próximas semanas cientos de miles de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales salgamos a las calles a manifestar orgullosamente nuestra voluntad de ejercer plenamente nuestros derechos civiles la memoria de Alan Turing, junto a la memoria de tantas y tantas personas cuyas pequeñas historias jamás conoceremos pero que conforman la gran historia del movimiento LGTB, estará sin duda junto a nosotros.
Una historia tremenda. Por cosas asi es mejor no olvidar, y es bueno salir a la calle
Muchas gracias interesantísimo artículo.
Una gran persona a la que quitaron todo mérito por ser homosexual. Por eso hay que seguir día a día al pie del cañón. Aún queda muchísimo trabajo por hacer.
Una figura imprescindible en las matemáticas, la filosofía y las ciencias de la computación. Un sabio al que debemos, en parte, esta herramienta de comunicación que es Internet.
Cuando yo estudié la carrera de Matemáticas (hace ya casi 20 años) no sabía toda la historia de Turing y me habría encantado saberla. Pero vi una foto de él en pantalón corto y el gayradar me funcionó (ya no me funciona) No había Internet y era mucho más dificil encontrar cosas sobre las biografías de matemáticos. Algo encontré de todas formas.
Imprescindible la biografía que ha escrito David Leavitt y que ya comentaremos en un Desayuno en Urano más pronto que tarde.
Y Flick, aunque no hace falta que te lo diga, ¡bravo por el texto de la noticia!
Esto demuestra a los que nos piden «discreción» y que «vistamos correctamente» que, para los homófobos, incluso un héroe de guerra homosexual merece ser condenado.
A mí sí me contaron lo de Turing (por encima, eso sí) en la asignatura de historia de la informática. Sin duda, un auténtico genio.
Fue uno de los dos únicos momentos en 6 años (vale, 7 para mí) en que un profesor hizo una referencia gay. La otra fue explicando las restricciones al diseñar bases de datos. Siempre ponían el ejemplo de los matrimonios, ya que no podías decirle al ordenador sin más que una persona se casaba con una persona, sino que había que poner la restricción de que una fuese hombre y otra mujer. Recuerdo que el profe dijo: «esto es porque actualmente (era el 99) un hombre no puede casarse con otro hombre». Me alegra que este ejemplo clásico se haya venido abajo, al menos en España 🙂
Hay una peli para TV sobre su vida, «Breaking the code». En ella le interpreta Derek Jacobi. No sé si salió en España, yo al menos no la he encontrado.
El final de Alan Turing es una historia muy triste.
Un hombre muy valioso y un héroe desechado sin mas por su homosexualidad,es terriblemente increíble.
Aunque es una frase que se suele emplear en multitud de situaciones, en nuestro caso está claro que «Nunca debemos olvidar». Saludos