Barcelona por fin tiene lo que merece
«Barcelona por fin tiene lo que merece». Esa ha sido la frase más repetida y más escuchada la tarde del 28 de junio en el centro de la vieja ciudad.
¿El motivo?
Algo llamado “Diversidad”. Eso es lo que ha ocurrido hace un rato aquí.
Ni sé ni me importa la cifra exacta de participantes, asistentes, mirones o gente varia. Puedo asegurar, no obstante, que estaba entre “cinco o seis” y cinco o seis millones.
Ah, y como no me gusta el fútbol y afortunadamente esto no es una competición, decir ya desde el principio que había muchísima menos gente de la que hubo y habrá en Madrid. ¡Pues claro!
En cualquier caso el dato numérico no importa porque cuando hay calidad la cantidad es lo de menos. Y si algo (además de muchísima gente) había esta tarde en la “Manifestación Festiva del Orgullo GLTB de Barcelona” era precisamente “calidad” de la mejor.
Había militantes históricos: esos que nos han llevado a lo que tenemos ahora mismo. A saber: Armand de Fluvià y Jordi Petit como siempre en primera línea de fuego dando la cara por los derechos de todos. Junto a ellos “sangre nueva” aprendiendo la lucha como Miquel Iceta: totalmente necesarios.
Detrás de ellos íbamos bastantes miles de personas disfrutando de la compañía, de la tarde veraniega, de la alegría más sana y sobre todo de un bien tan preciado como es la “Libertad”. Gritándole con nuestra presencia a nuestra ciudad y al mundo entero: – “Sí, somos maricones ¿y? Baja de tu balcón y ven a bailar y a reírte con nosotros. Aquí cabemos todos”.
Tras los militantes una Asociación de Policías Gays, detrás de ellos el grupo de gays deportistas “Panteres Grogues”, y la Coordinadora Gai-Lesbiana, y el Bearcelona, y… …y todos los grupos que trabajan y luchan desde los diferentes ámbitos de nuestra vida y nuestra lucha: desde “STOP SIDA”, hasta un grupo de apoyo a gays inmigrantes, desde grupos de lesbianas hasta asociaciones de padres y madres de gays o una de gays cristianos…
Ciertamente también había carrozas de…”temidas empresas”: una de saunas, alguna discoteca o un bar, tal vez el Hotel Axel…
Esas eran las divertidas y las intranscendentes. Las que te reías de los disfraces y al momento las olvidabas. Total: en la mani nadie va a comprar nada (no entiendo pq se critica como “consumista”) y uno por ver una carroza hoy no empieza a frecuentar locales: vas a los que conoces y te gustan.
Sobre la “calidad humana” que es lo que ha hecho posible esto: básicamente de 10. Allí estábamos todos porque allí cabíamos todos.
¿Una transexual desnuda?: evidentemente. ¿Un señor con bermudas de tergal y camisa?: por supuesto. Y montones de familias con sus hijos (que es absolutamente necesario e imprescindible que acudan a este tipo de eventos ¡pues claro!).
Y el de la corona de plumas y plataformas, y la pareja de chicas cogidas de la mano durante toda la manifestación, y el osazo con arnés, y los polis gays con su camiseta negra, y los abuelos con los nietos, y un hombre con su perro, y el inmigrante, y hasta el que llevaba el cuerpo lleno de tatuajes, la cabeza de rastas e iba fumando maría…
Nadie sobraba. Ninguno sobrábamos. Bueno sí: sobraban la intolerancia, el cinismo, la mentira, la manipulación pacata y burda…la homofobia en definitiva.
Pero como no estaban invitadas no asistieron y todo salió perfecto.
En la Avenida María Cristina, a los pies de la mítica fuente de Montjuic se preparó una fiesta fantástica. Allí no cabía una aguja y no sobraba nadie. La música era una excusa para estar allí, para bailar, para reír, para hablar, para estar con buena gente. El marco incomparable. Y en ese ambiente una sensación de respeto, de alegría sana, de educación, de civismo. Sobre todo de “educación”. Se entablaba una conversación con un@ desconocid@ al que se había empujado sin querer, o a partir de pedirle a alguien que te dejase hacerle una foto: una mujer joven envuelta en una bandera arco iris con su hija de nueve o diez años sólo te pedía una cosa a cambio de dejarse fotografiar: un abrazo “porque si todos nos abrazásemos más el mundo iría mucho mejor”. Inteligentes palabras.
No vi a nadie parodiando a la Iglesia. Pero sí vi una monja que iba con un grupo de chavales. Nadie los increpó ni se metió con ellos (“Alaskita”: trágate tus palabras): aquel también era su sitio si querían estar allí con respeto. Como tampoco nadie increpó a las mujeres musulmanas con velo que pululaban por la fiesta.
La gente normal estaba allí riendo, bailando, charlando, disfrutando de la vida (que sólo tenemos una) pasando de miserables políticos capullos, de manipulantes cibertrolls descerebrados, de colgaos raros de todo tipo y de gilipolleces varias que sólo hacen que complicar lo sencillo: Vivir y ser libre está muy por encima de todo eso.
Me quedo con la frase que me dijo Jordi Petit cuando nos despedíamos: “Ha salido todo mucho mejor que bien. Barcelona por fin tiene lo que merece. El año que viene más y mejor”.
Pues eso.
Ahora a seguir disfrutando la de la semana que viene en Madrid.
Lobogrino.
Fotografías tomadas por Lobogrino. Podéis verlas con más detalle y comentarlas en nuestro Flickr.
Gracias por la carta y gracias por las fotos, Lobogrino. ¡Son fantásticas!
Jordi tiene razón: Barcelona ya tiene por fin lo que se merece. Era una situación atípica la de Barcelona, no era normal que una ciudad de ese tamaño, liberal, abierta, con tantísimo «ambiente» y con tantísimos gais y lesbianas en su seno no tuviera un orgullo de esa envergadura.
Enhorabuena a todos los que lo han hecho posibles.
Me ha gustado cómo lo has contado, muy vivo. Las señoras mayores en los balcones hablaban con los osos cuando se quedaba parado el desfile. Una maravilla.
Los disturbios de hace 40 años no son los disturbios de Nueva York, ni los disturbios de Greenwich Village. Son los disturbios de Stonewall, por el local Stonewall Inn. Hasta tal punto son centrales los locales en la historia glbt. ¡Quién puede quejarse de que ahora formen parte de la manifestación! En serio, quizá en pocos movimientos como éste pueda afirmarse que la iniciativa privada de algunos empresarios, con sus locales, sus librerías, sus tiendas de fotos (!!), ha sido tan importante y beneficiosa. Gente que se ha arriesgado y ha protegido. Ayer, viendo las carrozas de Arena, Madbear, Axel y otros locales de Barcelona vi reivindicada y presente también esa parte del Orgulo GLBT.
Felicidades por la crónica, Lobogrino. Está muy bien.
Un saludo afectuoso.
Gracias a los tres. Muchísimas gracias.
Y gracias a DM por publicar la crónica y las fotos.
Zar: pese a que, como puede verse en una foto, yo iba muy en el papel de «maryosa» fui con unos amigos del grupo de policías gays. También era curioso ver como había gente que se extrañaba que hubiese policías gays que lo dijesen abiertamente en la mani.
Esta parte de tu comentario:
» Los disturbios de hace 40 años no son los disturbios de Nueva York, ni los disturbios de Greenwich Village. Son los disturbios de Stonewall, por el local Stonewall Inn. Hasta tal punto son centrales los locales en la historia glbt. ¡Quién puede quejarse de que ahora formen parte de la manifestación! En serio, quizá en pocos movimientos como éste pueda afirmarse que la iniciativa privada de algunos empresarios, con sus locales, sus librerías, sus tiendas de fotos (!!), ha sido tan importante y beneficiosa. Gente que se ha arriesgado y ha protegido. Ayer, viendo las carrozas de Arena, Madbear, Axel y otros locales de Barcelona vi reivindicada y presente también esa parte del Orgulo GLBT».
me parece que es fundamental y nos empeñamos en negarla o incluso en satanizarla. Como si tener una empresa (que da trabajo a gente) fuese un delito y como si el empresario (los empresarios del Eixample gay suelen ser gente de lo más común que monta un bar o una tienda y si tiene suerte y le va bien tira adelante) fuese una especie de mafioso despiadado.
El sábado por la mañana me encontré con gente del Col.lectiu que preparaba la mani del FAGC de la tarde. Uno me dijo: «tienes que ir a la mani de hoy que es la reivindicativa, lo de mañana es otra cosa, algo vendido al capital».
Ese es un discurso cutre, pacato, carca y totalmente fuera de lugar a estas alturas. Parte del FAGC evolucionó (Jordi Petit y demás) pero otros han quedado anclados en un discurso que hace veintipico o treinta años era lo más necesario pero que en la actualidad es algo caduco que no corresponde a nuestra realidad ni a nuestro momento histórico.
Lo curioso es que ese discurso sale de gente que «parece olvidar» que su manifestación y su chiringuito también recibe subvenciones, que tienen un bar en pleno Gayxample donde venden copas como cualquier otro bar (vale, cobran algo menos por ellas. También el servicio es peor y todo es bastante cutre), que en la «fiesta» que hacen después de la manifestación en Pl. Universidad ponen una barra de bar para servir alcohol que no regalan…
No veo la diferencia entre su negocio y el de los empresarios gays…
Bueno, tal vez sí que lo hay: la gente de la manifestación del domingo no iba del palo: «nosotros somos los auténticos luchadores de la causa gay» en plan «la vida de Brian.
Cuando en la crónica de arriba digo que no sobraba nadie si en cambio pienso que faltaba alguien: todos los de la mani del sábado. Esto lo comenté con Jordi y con otros amigos: hubiera estado bien que asistiesen: había sitio para ellos como lo había para cualquiera.
Pero supongo que pertenece a la libertad de cada cual seguir metiendo la cabeza por un agujero una y otra vez para no ver más allá de las propias narices…
En fin…
Que muchas gracias por los comentarios. Me alegra que os haya gustado mi particular crónica del Orgullo de Barcelona.
Un abrazote a los tres.
Zar:
Por ahí hablas que no se leyó manifiesto.
Bueno más o menos sí que se hizo…
Me explico:
Fue como a las 10 y pico cuando mucha gente ya se había ido. La carroza de Arena se había quedado en medio de la Avenida y seguía con su música a tope (y Aladino encantaíto de estar en medio claro…) con lo cual el ruido de esa carroza hizo que no se pudiese escuchar el manifiesto en toda la avenida.
Hubo fallos gordos como ese: deberían haber leído el manifiesto nada más llegar y hacer que todas las carrozas, aunque se quedasen en el medio, parasen la música.
Supongo que tomarán nota de los errores.
De entrada Jordi Petit me comentó como de pasada que el año que viene será en sábado para que la gente no se tenga que ir en seguida. La Avenida María Cristina es ideal para tener una fiesta hasta altas horas pq no se molesta a nadie.
*- Nota: casi que me das envidia: yo al ir delante con los polis gays y los «panteres grogues» dejé de ver mucha cosa durante la marcha.
Gracias por la crónica, tanto escrita como gráfica. Tu entusiasmo es contagioso…
El año que viene a por otra!!
besos.
Lobogrino escribió:
«pese a que, como puede verse en una foto, yo iba muy en el papel de “maryosa»
Ya te digo, inconfundible con la camisa a cuadros. 😀
Gracias amigo Lobo por compartir con todos nosotros tu experiencia. Buen trabajo y enhorabuena.
Gracias Lobo por la crónica. Emociona.
Aquí también se dio una mezcla fantástica, las señoras de 70 del brazo de drags con pelucones rosa y las carrozas muy mezcladas, sobretodo muchas mujeres (aunque sigo quejándome de que ninguna «CON LOS pechos al aire»). También muchos abrazos y hasta algunas lágrimas de aquellos que han visto irse a más de uno de los suyos sin poder vivir algo así en Andalucía. Creo que de verlos llorar hasta yo solté la mía. Y en fin, ver a alguien que ha pasado de largo los 60 que a leguas se nota que no ha tenido demasiadas oportunidades de salir al orgullo de Madrid, ir feliz por la vida con sus piernas flacas, sus arrugas y su pelucón, fue para mi tan reivindicativo como cualquier pancarta.
Yo que siempre he defendido la pluma y los culos al aire, este vez creo que terminé dando una vuelta de tuerca más a mis convicciones. Cuando alguien me dijo, hoy puedo estar con las plataformas y el maquillaje sin que me machaquen en la calle que bastante que me han pegado… Pues eso…
Gracias a ti rafa por el post.
La crónica la escribí del tirón a las tantas cuando llegué a casa. Sin ni siquiera quitarme la camisa de cuadros sudada y con todos los sonidos de la marcha en la mente.
La escribí del tirón y se la mandé a DM sin ni siquiera revisarla.
Es lo que dice Zar en un post por ahí: había alegría sana. Y la sensación de que los GLTB que vivimos en esta ciudad por fin tenemos algo sin sólo mirar hacia otras ciudades.
Es que era muy triste que la ciudad de España donde se inició la lucha por nuestros derechos y de la que han salido activistas importantes que con su ingente esfuerzo nos han llevado a los derechos que tenemos, no hubiese sabido evolucionar adaptándose al momento en el que estamos.
Era muy triste ver como, por luchas intestinas, afanes de protagonismo varios, y conceptos trasnochados con no sé que fines los GLTB de aquí sólo pensásemos en Madrid cuando llegaba el mes de junio.
Ayer mucha gente decía: «La semana próxima iré a Madrid, pero más relajado pq aquí ya tengo algo». Los gays de aquí seguiremos asistiendo al Orgullo de Madrid. Pero también sintiéndonos orgullosos del Orgullo de Barcelona.
Un abrazote agradecido rafa.
Gracias: Frantic, Despot, Mercedes.
Un placer que os haya gustado.
Frantic: pero en la foto de marras el guapo (y yo estoy más bueno que un queso, ea) con avaricia es mi amigo Ángel, lector de DM aunque no escribe.
Despot: me acordé de ti con la gente bailando a los pies de la fuente encendida…
Gracias a los tres: vosotros sí que me emocionáis.
Lobo: sí, ya he visto que tú anduviste más adelante. Yo estuve mirando en la plaza hasta que pasaron los osos con música de Karina, que ejerció sobre mí la atracción de la flauta de Hamelín. Pero no salté a la calle hasta que llegaron los de los tambores. 🙂 Iba vestido con camiseta naranja, pantalones blancos anchos y sandalias, mi santo dice que en plan hippie. 😀
Lobogrino escribió:
«Frantic: pero en la foto de marras el guapo (y yo estoy más bueno que un queso, ea) con avaricia es mi amigo Ángel, lector de DM aunque no escribe».
Ah, no sé. Si tu lo dices, así será. Yo es que no entiendo, ¿sabes? 😆
¡Haberme saludao, coñe!
Karina…esa gran intérprete. También en eso tienes razón: es oirla y meterte en harina.
No te vi pero sigo pensando que tenemos que quedar una tarde. Además tú juegas con ventaja: ya conoces mi cara…
Un abrazote.
Ya te digo, me di cuenta allí mismo, que teníamos que haber hecho un encuentro dosmanzanas. 😀
Me alegro de que se leyera un manifiesto, aunque fuera tan tarde. El año que viene, más y mejor.
Por cierto, otra cosa que me llamó la atención fue lo difícil que es, no ya organizar un evento de estas dimensiones, sino siquiera controlar que el desfile avanzara acompasadamente. Un montón de personal de la organización, imagino que voluntarios, trabajando mucho y disfrutando un poco. Ya pueden estar orgullosos de lo que consiguieron.
no sobraba nadie
Me ha encantado esta frase tuya, Lobo.
A mí me desagrada la enorme mercantilización del orgullo. Sin embargo no todo es blanco o negro. En los años en los que la policía hacía redadas en bares de ambiente tener un negocio orientado a lesbianas, transexuales y gais era un valiente acto de militancia. Sobre todo si lo comparamos con ciertos partidos más-rojos-que-nadie que hablaban de «vicio burgués» o de «antes hay cosas más importantes» y cuyos militantes acabaron en el PP como Pilar del Castillo o Josep Piqué. Ahora que la cosa ha cambiado, en parte gracias a ellos, me parece estupendo que recojan lo sembrado. Otros que no vivieron aquella época y que no se mojan ni a la hora de colocar prensa LGBT en sus locales ya no tanto.
De todas formas es compatible mercado con crítica social o reivindicación. En otros países las carrozas reparten preservativos o folletos sobre salud sexual o hacen caricaturas de políticos.
Zar: pues sí: el año que viene «más y mejor».
Lo que dices de la organización es cierto. Los pobres iban de cabeza pq la cabecera iba muy deprisa y había que ir parando.
Es complicado: pero el próximo año ya habrá más experiencia y podrá ir mejor.
Sobre la quedada manzanera en BCN: avisa y nos vamos a tomar unas cervezas. Seguro que se animará más gente.
Muchas gracias, Turbio.
Es que es como dices: «no todo es blanco o negro».
Vamos que si después de currar toda la semana para poder vivir no voy a poder ir a un bar de ambiente a tomar una cerveza y petardear con mis amigos mal andamos. Y salir por el ambiente «de marcha» no quita que pueda estar comprometido con la lucha GLTB.
Como me decía hoy una amiga lesbiana: «si es que a veces algunos tan radicales son unos amargados que terminan no haciendo nada más que amargarse y amargar a todo dios».
Jordi Petit suele frecuentar bares de ambiente y no creo que pueda cuestionarse su compromiso…
De igual forma no me molestaban las carrozas de Arena, del Hotel Axel, de las Saunas del Grupo Pases (repartiendo preservativos, como debe ser) o de algún otro local: daban la nota divertida y festiva. Para seriedad, compromiso e información teníamos las de la Cordinadora, Gais Positius…
Por sobrar sobraban…»ciertos elementos» (homófobos y gays homófobos basicamente) ; pero como no estaban «no sobraba nadie».
Un abrazote.
Realmente me encanto la marcha Barcelonesa tanto la del sabado como la del domingo que si fue espectacular y supero mil veces la del sabado.Ahora viene la de Madrid.Valio la pena el viaje desde caracas.carlos
Bueno Zare, respecto a tu comentario #2, nada que decir: Los locales son importantes, yo creo que imprescindibles. Para muchos, durante años, nuestra primera manera de conocer a gente, nuestro lugar de relacionarnos y de pasar una buena farra.
Por otro lado, si dejamos la manifestación tal cual, es decir, el aspecto externo de la misma tal y como la cuenta Lobo, me hace hasta llorar de la emoción. La crónica es excelente. Yo que también estuve, la viví también con esa pasión aunque con sentimientos encontrados. Creo además que es la más multitudinaria que recuerdo en BCN (en todos los años de mi conciencia LGBT, es decir, 17, -empecé muy pronto- 😉
Sin embargo, mi postura al respecto de lo que se ha vivido este fin de semana en BCN es extraña. Os cuelgo el comentario que puse en otra entrada de Dosmanzanas sobre esto: Ante los 2 orgullos LGBT vividos este fin de semana en BCN tengo una sensación extraña. ¿Eso es todo? Me da pena que la comunidad LGBT catalana esté dividida y que nadie busque lo contrario. Están todos bien como están, gestionando las migajas: sus locales de ocio, sus idearios excluyentes y sus subvenciones. Mientras tanto, un año más, 475.000 LGBT catalanes, se quedaron en sus casas . El comentario forma parte de esta entrada.
Lobo, sé que en parte no estarás de acuerdo (en otra parte sí) pero la realidad es que este fin de semana se ha vivido división, intereses económicos, comerciales y politiqueos varios de distinta índole. Unos más grandes (los de la ACEGAL y Turisme –Ajuntament i Generalitat-) que otros. También entiendo tu postura que ya la he leído en otras entradas, respecto a la manifestación de la Unitaria (me suelo releer tus comentarios y en general coincido contigo en casi todo, como también en este comentario al que me refiero, en el que hablabas de la cutrez y las pintadas y todo eso…). Sin embargo, en lo de este fin de semana hubiera preferido que todos hubieran ido a una. Cuando veo lo de Madrid, me da envidia. Todos los locales de Chueca colaboran en el Orgullo y las asociaciones se vuelcan. Y todos juntos suman miles. Aquí no movilizaremos a más gente de seguir por este camino, por lo que Jordi se equivoca si dice: “Ha salido todo mucho mejor que bien. Barcelona por fin tiene lo que merece. El año que viene más y mejor”.
Pues yo digo que Barcelona no ha logrado lo que merecía y se ha quedado lejos de conseguirlo. Para ser la cuna del movimiento LGBT en España, celebrarse el 40 aniversario de Stonewall, tener la administración en pleno a favor (y hasta CDC) y unas 40 de asociaciones LGBT en una ciudad de 1.600.000 habitantes, lo de este fin de semana ha sabido a poco. Y hurgando, hurgando, parte de la culpa es de algunas pocas personas que no les ha interesado entenderse. Más y mejor será que se arremanguen y se entiendan de una puñetera vez, para que el año que viene sumemos todos en un único Orgullo.
Coincido bastante con lo que dices, Nivorg.
Vamos a ver: esa crónica «como medio pasional happy» que he escrito más arriba salió de los dedos nada más llegar a casa y aún con los oídos llenos de ruido.
Ahora toca hacer autocrítica. En parte es lo que dices y en parte es mucho más de lo que dices y no puede expresarse aquí dado que hay…digamos…»demasiados oídos que no deben oír según qué» (vamos que los trapos mejor se lavan en la intimidad…)
Sería un placer hablarlo contigo fuera de la realidad virtual.
Como he dicho más arriba en esa manifestación faltó la gente del sábado (y lo que ello supone de reivindicación) y faltó la gente que tú dices que pasó del tema.
¿Preguntémonos pq hubo tanto GLTB que «pasó»?.
Se me ocurren varias posibilidades a bote pronto:
1- Miedo a que fuese algo aún más chusco que lo del sábado.
2- Hartazgo de que en Barcelona todos quieren su capillita y sus quince minutos de protagonismo y preparan las cosas «cada cual a su imagen y semejanza».
Creo que eso lo pensábamos hasta los que fuimos. Y precisamente por eso cuando acabó quedamos tan contentos todos: «Porqué salió medio bien». Pq ninguno creíamos que fuese así.
Por eso Jordi y el resto estaban tan contentos: me da que eran los primeros en dudar que las cosas podrían salir bien.
Lo siguiente no tiene nada que ver contigo Nivorg, pero si no lo digo reviento:
Sobre que la marcha del domingo era «más comercial» y la del sábado «más reivindicativa» que es lo que no se para de oír estos días. Pues como que uno que conoce las dos historias se harta.
Vamos que «los megaperfectos del movimiento auténtico y luchador» resulta que viven en un mundo «aconsumista»…desde el Bar del Col.lectiu, claro. Un bar en medio del Gaixample…Un bar gay en medio del Gaixample que resulta que no regala el alcohol sino que lo cobra. En el bar y en el chiringuito de la fiesta de después de la mani en Pl. Universitat.
¡Coñe!: los que critican los bares del Gaixample van y tienen un bar en el Gaixample.
Y las subvenciones…Claaaro: resulta que el Col.lectiu no recibe ni un céntimo de euro de nadie…¡Hostia! si ya hace años que me afeito: no cuela.
Por otro lado: ¿»reivindicación auténtica»?: desde una revista revista que se difunde por los locales del ambiente (los mismos que tanto critican) y que no es más que una especie de círculo vicioso que se autonutre con variaciones de los mismos artículos o de artículos ligeramente revisados/actualizados de hace 20 años…
¿O su revindicación en la marcha es una lesbiana con barba, arnés y botazas militares como crítica a la drag con plataformones y plumas de «la otra mani?.
Cada vez tengo más claro que la actual reivindicación del Col.lectiu y de la mani «oficialmente reivindicativa» pasa por:
1- Poner cara de mala hostia para provocar a los Mossos que vigilan.
2- Hartarse a beber y a fumar maría para pillar el puntillo macarra ya desde la salida.
3- Imprescindible llevar un grupo (o varios) de batucada. A ser posible con camisetas rotas y sucias.
4- Llevar montones de banderas independentistas, vascas, palestinas y de lo que sea al lado de la gay y el triángulo rosa.
5- Importante presencia de lesbianas con vestimenta lether y cara de mala hostia que da miedo.
6- Aparecer con más pancartas que asistentes. Y pancartas con lemas llenos de faltas de ortografía tipo «marika»: suena más a ocupa, a moderna y a…»luchador radical»…
En definitiva una puesta en escena fantástica pero tan carente de contenido (si no más) que la «manifestación oficialmente consumista».
A esta, la «comercial» resulta que la Cordinadora Gai-Lesbiana acudió con carroza propia, como STOP SIDA, el Casal Lambda llevaba a la gente de sus grupos.
Me da que actualmente (un momento de crisis general a nivel de asociacionismo) estas entidades siguen haciendo algo en favor de nuestros derechos.
Sí: Arena, el Áxel y el Grupo Pases (=saunas) llevaban carrozas «chupichulas»: fantástico que se gasten un poco de dinerillo que con lo que les dejan cada fin de semana los dueños de esas empresas van a morir ricos.
Ni que decir tiene que no se puede criticar la labor del FAGC. Gracias a este movimiento tenemos lo que tenemos. Pero también es cierto que, a mi modo de ver, su discurso ha quedado anclado en un punto de hace 30 años por lo cual resulta obsoleto hoy.
Hoy la lucha pasa por la unión y, como dice Zar más arriba, la unión con las empresas. Ahora no hace falta «correr delante de los grises» ni provocar a los Mossos para que nos hostien y luego denunciarlos y montar el cristo.
Ahora tal vez hace falta currar más durante el año, sacarles las pelas a Aladino (el dueño del Grupo Arena) y a los otros para que financien algo donde podamos trabajar en condiciones para nuestro momento actual.
Trabajar con el capital sin dejar que seal el capital el que nos guíe. Luego importa poco si pone «marcha patrocinada por Arena, Axel y no sé qué».
Nivorg: la sensación (y si estuviste allí lo viviste como lo viví yo) era de euforia pq era la primera vez en muchos años, como dices, que teníamos algo así.
Ahora tenemos que trabajar para que en próximos años «salga bien de verdad»: yo que sé: que se haga un sábado en lugar de un domingo «aún a riesgo» de que los locales del Gaixample esa noche no ganen lo que el resto de sábados… 😉 , que tenga un tinte más reivindicativo, que se escuche un manifiesto en condiciones y sin miedos, que «todos los que deben estar» estén…
Creo que hay mucho por pulir. El primer paso ya está dado: este año tenemos «algo más» de lo que habíamos tenido hasta ahora…
Muchísimas gracias por tu comentario. Me ha gustado mucho y me ha hecho mucha ilusión (yo tb suelo leerte y estar de acuerdo con lo que escribes). Igual que a Zar te emplazo para una cerveza cuando quieras (Gaixample o no…)
* Hay un bareto gallego en una callejuela detrás de Sant Felip Neri y la Generalitat que es lo mejor de lo mejor 😉
Un abrazote.
Bueno pues contad con la cerveza, que ganas no faltan. ¡¡Molaría!! Ya indagaré el bar que dices 😉
De los primeros dos puntos los suscribo 100%. En BCN hay demasiadas capillas y demasiadas marquesonas peleantes por «la diadema ducal». Durante años se ha practicado la política de las migajas: hacemos trizas el pastel de 500.000 LGBT y que cada uno coja unas cuantas migas que las defenderá en plan «mi tesoro»…
A veces creo que debería centralizarse todo un poco más, una FELGT a la barcelonesa pero seguro que acabarían con ella en múltiples reesciones de esciones, vamos que a ostias. No sé, es lo que digo, tampoco ya nadie persigue eso, la unidad (durante una época en cierto modo lo persigió la CGL) así que…
De los otros 6 puntos también suscribo parte, pero veo que lo enfocas mucho al Col·lectiu y a la mani del sábado también iban otros tantos grupos que no sé qué relación tienen actualmente con el CGB, pero al menos hace unos años no era mucha…
Del FAGC, no sé qué decir… En fin. Yo asistía a las reuniones del JALG-FAGC en Bellaterra en plan oyente-voluntario-colaborador-amigo y al mes rompieron con FAGC (el enésimo cisma de esta asociación histórica). Traducción=los idearios exclusivos y excluyentes no llevan a ningún lado.
En resumen, la gente se aburre y pasa que pasan. Con todo, sumadas ambas, fue bastante concurrido. Ahora queda que el año que viene sea el doble de gente y la mitad de escenarios=1.
PD. Y la cervecilla que no se pase de largo… 😉
Pues como que poco más que añadir…
Bueno sí: que será un placer enorme aprender te tu experiencia.
Estoy pensando que sumando lo que tú sabes, las formas de Zar y mi pluma afilada podemos hacer un buen resumen de como está el tema en Barcelona para que el personal de DM se entere del todo.
Ahora sólo se trata de quedar en persona, ya buscaremos la manera (te aseguro con conocimiento de causa que recientemente dos «pequeños encuentros en persona» en dos ciudades españolas han tenido un gran éxito).
A ver si Zar se anima. Y si no tú y yo.
Un abrazote: me voy a la sauna: basicamente la calle y el metro hasta llegar al curro.
¡Joé que caló!.
*- El bar es como entrar en una cantina de la montaña gallega a medio minuto del centro de Barcelona. ¡Genial!.