La conducta homosexual está extendida en el reino animal y en muchos casos proporciona ventajas evolutivas
El diario Público edita hoy un interesante artículo en su sección de ciencias, en el que se expone como la conducta homosexual es un fenómeno frecuente en el reino animal, compartida por centenares de especies de mamíferos, aves, reptiles, anfibios e incluso insectos, moluscos o nematodos. El artículo presenta además el trabajo de Nathan Bailey y Marlene Zuk, biólogos de la Universidad de California, que desmonta la concepción clásica de que la conducta homosexual tendría díficil encaje en la teoría evolutiva.
Ambos científicos han publicado un estudio en el que presentan como la conductal homosexual puede ser en sí misma un factor capaz de modificar la evolución de una especie. «Como cualquier otro comportamiento que no conduce directamente a la reproducción, como la agresividad o el altruismo, las relaciones entre animales del mismo sexo pueden tener consecuencias evolutivas que empiezan a ser consideradas», explica Bailey. El investigador pone como ejemplo al albatros de Laysan, un ave marina de Hawai: un tercio de las parejas de esta especie está compuesto solo por hembras, que se cortejan y comparten las tareas del nido. Esta tendencia es, en este caso, una ventaja evolutiva. En la colonia estudiada, la proporción de hembras era mayor que la de machos. Si no existieran las parejas homosexuales, las hembras pelearían por los machos y provocarían separaciones en las parejas heterosexuales. El número de polluelos, en ese caso hipotético, caería en picado. Esta ventaja evolutiva de las parejas femeninas es común a otras especies de aves marinas.
Este es solo un ejemplo, hay otros muchos. Y si bien Bailey y Zuk piden que no se esgriman los estudios científicos sobre el comportamiento animal como argumentos políticos aplicables a las personas, ellos mismos recuerdan en su artículo que el trabajo del biólogo canadiense Bruce Bagemihl, que documentó comportamientos homosexuales en 450 especies, fue en su momento fundamental para que el Tribunal Supremo de Estados Unidos se pronunciara en 2003 en contra de las «leyes antisodomía».
Pero, para fecundarse una de las aves femeninas con pareja femenina tiene que robarle un ratito el novio a la vecina ¿esto no despierta los celos de dicha vecina?
No sé, creo que este artículo debería ser más explícito en cuanto al caso que se nos propone como ejemplo.
Lo de la homosexualidad en el reino animal no es nada nuevo.
La naturaleza es antinatura.
Lo natural sería que esas albatros se colocasen una toca de monja y ellos se pusiesen un alzacuellos, olisquear la bragueta de los demás albatros para condenarlos si han follado sin darles ellos antes permiso y organizar manifestaciones contra los que no piensen como ellos.
Si no existieran las parejas homosexuales, las hembras pelearían por los machos y provocarían separaciones en las parejas heterosexuales. El número de polluelos, en ese caso hipotético, caería en picado.
Turbio de aquí deduzco que para fecundarse deben recurrir varias a un macho ¿no hay complicaciones? aunque luego cada una esté con su pareja para la crianza. No sé a qué viene eso de las tocas y los alza cuellos. Si era algún tipo de chiste de mi comentario no le veo ni el lustre ni el fuste.
Un saludo
No hace falta ningún albatros macho para la fecundación, con rezar a un palomo basta. La Mari lo sabía muy bien.
Gulbransson, cariño, mis comentarios son una broma y no van dirigidos a ti. Me burlo de aquellos que ponen a la naturaleza como excusa de su homofobia.
Sufrida recopilación de los «mejores» comentarios que algunos lectores de Público han dejado en la página tras leer (los que lo hayan hecho) la noticia. Algunos asustan un poco. Con otros te ríes. Pero en general dan un poco de pena:
«Las cosas claras. El «éxito» de los comportamientos homosexuales en las especies animales, conllevaría inevitablemente al final de esas especies.
La homosexualidad NO ES UNA OPCIÓN. Una opción se escoge y, la homosexualidad, viene determinada por la necesidad, ya que al homosexual le repele la sexualidad con personas del género contrario.
He comprobado que la mayoría de los españoles NO SOMOS HOMÓFOBOS, pero estamos hartos de determinados excesos y protagonismos»
«Jo, pues que bien, apologia del homosexualismo…no creo que el ser homosexual , sea un estado personal, del que haya que presumir…….pero, hay que mirar las ventajas…..cuantos mas homosexuales existan, mas mujeres nos tocaran a los demas…menuda tropa»
«Está claro que el proceso de homosexualización de la sociedad, a base de informaciones manipuladas, es descarado»
«Es el mejor camino a la extinción»
«A QUE VIENE TANTO INTERES CON LOS ANIMALES MARICONES EN EL FONDO LO QUE INTERES ES ¿ tambien se dan por el culo?»
«También en la naturaleza los hermanos tienen sexo, en cuanto llegan a la pubertad mucho mamíferos son básicamente violados, y las palomas por ejemplo suelen matar a sus «bebes». Es esto natural?»
«No critico la homosexualidad, pero tu razonamiento no es válido. También muchos animales matan a sus crías o simplemente dejan morir al débil, y es una cosa muy natural…»
«Vaya, vaya, fomentando la homosexualidad…»
Vaya nivel, Maribel.
Hay que ver la cantidad de gilipollas con conexión a Internet que tenemos en este país.
Me encantan los comentarios. Me encanta que ya no les guste tanto la «naturaleza». Cuando las informaciones sobre la «naturaleza» era ofrecida por investigadores que ocultaban convenientemente estas cosas, era esa naturaleza la que esgrimían para atacarnos. «Contranatura», «Antinaturales». Ahora le dan la vuelta al discurso, los seres humanos no PODEMOS comportarnos como animales. El asunto es que siempre «tendrán la razón» a la hora de avalar el odio, el miedo y el prejuicio.
Sí, antes no sacaban los argumentos de que si el infanticidio, que si el incesto,…
Por cierto, alguien debería enseñarles la diferencia entre «natural» en la Naturaleza y «correcto» en el mundo humano.
Y con este tipo de estudios nos estamos metiendo en un lodazal de flipar. Este tipo de temas hay que tratarlos con un cuidado extremo porque la gente siempre coge la sartén por donde quema.
No necesitamos recurrir a la Naturaleza para justificar la homosexualidad, porque la homosexualidad no es algo que necesite ser justificado. La homosexualidad es tan legítima como la heterosexualidad, y si alguien no lo entiende así, peor para él.
A mí la Naturaleza me espanta. Quiero decir: me fascina como espectador y defiendo que se preserve, pero jamás la tomaría como modelo de comportamiento. En la Naturaleza, por ejemplo, los que no son fuertes y/o hábiles no tienen nada que hacer. Conceptos como bondad, solidaridad, altruismo (y sus contrarios) no tienen sentido en el mundo natural, porque son construcciones humanas. O, lo que es lo mismo, culturales.
El ser humano, por naturaleza, es cultura. Centrémonos, pues, en dotar de contenido humanista a nuestra cultura (libertad, igualdad, solidaridad) y dejemos a la Naturaleza en paz.
hola me gusta la ciencia mucho esta vida