Decepción total de los colectivos franceses ante el proyecto para dar derechos de parentalidad a las parejas del mismo sexo con hijos
Los temores de los colectivos LGTB franceses, ya adelantados en abril, parecen confirmarse. El proyecto de ley para conceder derechos parentales limitados a las personas sobre los hijos de sus parejas estables, incluyendo a las del mismo sexo, ha quedado finalmente desprovisto, en la última versión que se presentará a discusión parlamentaria, de cualquier referencia a las personas homosexuales.
El «cepillado» del proyecto es obra del diputado de la mayoría presidencial Jean Leonetti, que hace unos meses tranquilizó a los sectores más conservadores al aclarar que se suprimiría la mención explícita a las familias homoparentales, algo “inútilmente polémico”. “Es un error crear derechos específicos para un grupo de población”, afirmó entonces Leonetti, que también aseguró que la ley no sería una puerta falsa para introducir la adopción conjunta en Francia.
La ley podrá ser aplicada a personas que, siendo ya padres, hayan rehecho sus vidas en compañía de otras personas. Las parejas del mismo sexo no serán explícitamente excluidas, aunque será un juez el que decida “en función de los lazos afectivos existentes en cada caso”. Según informa Têtu, el proyecto de ley insiste, en su última versión, en la figura de la mediación familiar y blinda los términos «padre y madre» en lugar del genérico «padres» que figuraba en las primeras versiones.
Los cambios introducidos en un proyecto que ya de partida apenas les satisfacía ha recibido las críticas de los principales colectivos LGTB franceses, como la Inter-LGTB y la APGL (Asociación de Padres y Madres Gays y Lesbianas). Incluso GayLib, colectivo cercano a la derecha gobernante, que en su momento defendió esta ley como “prueba” de la preocupación de Sarkozy por los derechos de gays y lesbianas, ha mostrado en esta ocasión su decepción. ¿Para cuando la concreción de los compromisos presidenciales?, se pregunta.
Los de GayLib deben ser los COLEGAS franceses, me parece a mi.
Si Sarkozy se preocupara realmente, extenderia todos los derechos.
En fin, mas «transversalidad» de la buena.
Total, para qué andar creando polemicas.
esto le pasa a los gays franceses por defender al pederasta Mitterrand, claro, luego no se fian :DDD
Como decía mi admirada Gracita Morales:
Libertén, calamitén y que te den.
Ea.
Pues, allí se ve que el PACS era un error. Ahora es mucho más complicado conseguir la igualdad real y plena para todos ya que la gente se moviliza menos.