Polémica en torno a una supuesta relación homosexual entre dos líderes históricos de la extrema derecha británica
British National Party (BNP) y National Front (NF) son los dos principales partidos de la extrema derecha británica, caracterizados por su xenofobia y por una no menos intensa aunque más disimulada homofobia. Resulta por eso chocante conocer que dos de sus líderes podrían haber mantenido una relación homosexual, según la versión de uno de ellos, Martin Webster. Nick Griffin, el otro implicado, afirma que es mentira, aunque admite que Webster le ofreció tener sexo en el pasado.
Webster, de 66 años, fue líder del National Front durante los años setenta, partido del que acabó siendo expulsado tras extenderse en los círculos de la extrema derecha el conocimiento de su homosexualidad. En 1999 contó que en esa época había mantenido una relación de cuatro años con Nick Griffin, actual líder del BNP y antiguo militante del NF, y que estos días ocupa las páginas de los periódicos debido a la decisión de la BBC de invitarle hace unos días a un programa de televisión.
Ahora Griffin, que cuenta en la actualidad con 50 años, niega que dicha relación existiera en una entrevista con The Times, aunque sí reconoce que en aquella época frecuentaba la casa de Webster. Según Griffin, no sabía que Webster fuera homosexual hasta que una noche le ofreció mantener relaciones. Griffin ha añadido que él todavía no había cumplido los 18, por lo que Griffin debería ser considerado un pederasta dado que en aquella época esa era la edad de consentimiento legal para las relaciones homosexuales en Reino Unido.
En el programa de televisión citado, Griffin mostró su oposición a que se hablara de homosexualidad a los menores, expresó su desagrado ante la imagen de dos hombres besándose en público y atacó a los que denominó «militantes homosexuales». Beth Mellington-Pritchard, una lesbiana que se encontraba entre el público invitado al programa, le respondió que el sentimiento de repugnancia era mutuo.
Bueno, ninguna sorpresa, la homosexualidad de armario y la homofobia siempre han ido de la mano en las formaciones de extrema derecha, no es ninguna novedad.
Supongo que la hipocresía es el elemento más relevante del pensamiento conservador más radical.
Un amigo cercano de la república checa tambien me ha comentado en varias ocasiones que es conocido allí que el lider checo paga por prostitución masculina, luego estos especímenes son activistas homófobos, aquí en España tenemos algunos casos muy llamativos. Estos tipos tienen una vida oscena, basada en la mentira, la pariencia y la hipocresía lo triste es que creen que los demás somos iguales a ellos y se resarcen condenando a otros en vez de cambiar ellos mismos.
Muchos de los homófobos más salvajes que existen lo son por una lucha interna contra sus sentimientos no aceptados en el ambiente en que crecieron o viven.
En definitiva, cuando salen de ese entorno, pueden elegir, muchos eligen el camino fácil, patear «maricones» por el día, tirarse a un chapero en cualquier descampado cuando nadie les ve y luego irse a rezar a la iglesia jurando ante Dios que la culpa fue de la coca, el alcohol…. la culpa de follar con un tío claro, no la de reventarle la cabeza a un homosexual con un bate.
¡Qué asco de gente!
Por supuesto que nunca admitirá ese hecho, siendo uno de los bastiones de la homofobia extrema, del racismo, xenofobia, misoginia y otras cosas, no lo admitirá.
No voy a defender al racista y socialista de Griffin pero esta historia es MUY antigua, no probada, y la sacan después de ser invitado a la BBC y repuntar en las encuestas
Porque cuando se quiere desprestigiar a uno de estos mamones de extrema derecha uno de los primeros rumores que se lanza es «que es un gay armarizado» o sea «que es maricón» vamos que una de las formulas para desprestigiarlo es comentar una supuesta orientación sexual, no sus políticas ni leches noooo lo importante es dejar claro a la población media que el tío «ES MARICÓN» y ami sinceramente estas campañas de desprestigio de claro signo homofobo ya me tocan los huevos porque podrían decir que va de putas o que se los pone a su mujer pero no lo que se dice es que le van los tíos.
Xavi, que sensible sois siempre los anti-laicos a los asuntos de la extrema derecha…
A mí el palurdo de Griffin me la suda. Han dado tanta publicidad a su aparición en la BBC y le pusieron en frente de un público tan hostil, que según una encuesta de ayer el 22% de los británicos consideraría seriamente votarle. Una vez más, los fascistas y antifascistas se retroalimentan.
Pako: no necesariamente es homofobia.
Se desprestigia a alguien que siendo gay ataca salvajemente a los gays.
El desprestigio no viene pq sea gay sino pq siéndolo nos ataca.
Tal vez el problema que tenemos en España es que aquí se calla y nadie quita la cara a los políticos homosexuales que van contra los gays.
*- Perdón: quería decir «quita la careta».