El terrible asesinato de un joven gay reaviva el temor a la violencia homófoba en Puerto Rico

Jorge Steven López, un joven gay de 19 años, fue asesinado la pasada semana en Puerto Rico. El cuerpo del muchacho fue encontrado el viernes en una zona boscosa de Cayey, parcialmente calcinado, desmembrado y decapitado. Las primeras hipótesis policiales apuntaban hacia una posible motivación homófoba. Informaciones de última hora señalan que hay un sospechoso detenido, que al parecer pudo contactar con el joven y prometerle dinero a cambio de relaciones.

Jorge Steven, que en enero tenía previsto comenzar estudios relacionados con el mundo de la moda, su gran pasión, era un joven alegre y desenfadado. «Jamás merecía morir de esta forma, ni siquiera puedo creer lo que le pasó y que alguien haya sido capaz de cometer una atrocidad como ésa con él”, ha manifestado su amigo Luis Rivera, que tras echarlo de menos el pasado jueves, y al enterarse de la aparición del cuerpo de un muchacho con sus características, no dudó en presentarse ante la policía con la foto de su amigo. Desgraciadamente, sus peores temores se confirmaron.

Pedro Julio Serrano, portavoz del colectivo LGTB Puerto Rico Para Tod@s,  ha declarado que «es un momento para reflexionar y detenernos como sociedad… podemos oponernos a la orientación sexual de otras personas, pero no se puede incitar un clima de intolerancia y violencia, al extremo de asesinar a otras personas”. Serrano ha recordado otro posible crimen de odio ocurrido hace pocas semanas, cuando un joven gay murió acuchillado en circunstancias no esclarecidas. “Ojalá que se trate de casos aislados y no estén vinculados uno con el otro”, ha expresado. Y es que en la memoria del colectivo LGTB puertorriqueño sigue vivo el recuerdo del «Ángel de los solteros», un asesino en serie que en la década de los ochenta acabó con la vida de decenas de gays.

Piden una investigación libre de prejuicios

Puerto Rico Para Tod@s y la Fundación de Derechos Humanos han exigido en un comunicado una investigación libre de prejuicios después de que uno de los agentes del caso, Ángel Rodríguez, manifestara en televisión que «este tipo de personas cuando se meten a ésto y salen a la calle saben que esto les puede pasar». Serrano ha pedido además el relevo de este agente. «Es inconcebible, inmoral y antiético que el agente investigador aduzca que la víctima se buscó ser asesinado. Es como el absurdo y falaz argumento de que una mujer se buscó ser violada por llevar falda corta. Exijimos la renuncia al caso de este agente investigador y que el Superintendente Figueroa Sancha ponga en su lugar a alguien capacitado que investigue este vil asesinato, sin prejuicios de clase alguna», ha expresado Serrano.