La adopción por padres y madres homosexuales sigue sin resolverse en Colombia
Como informamos en dosmanzanas, en estos momentos tiene lugar en Colombia una batalla jurídica por la adopción por parte de una lesbiana de la hija de su pareja. Ante la negativa del ICBF (Instituto Colombiano de Bienestar Familiar) la pareja entabló una acción de tutela, la cual ganó, pero que el ICBF decidió impugnar. En medio de la polémica, la revista Semana decidió consultar a un experto en derecho y publicó un artículo de interés sobre esta nueva batalla legal.
Según cuenta Semana, Juan Enrique Medina, abogado del Observatorio Jurídico de la Universidad del Rosario, no hay impedimento legal para que parejas del mismo sexo puedan adoptar. «Técnicamente hablando no existe en nuestro derecho ninguna limitante jurídica directa para que no puedan adoptar. Si esas personas son compañeras permanentes, a la luz del derecho pueden hacerlo», afirma el abogado especialista en derecho civil. Esto se debe a que el Código de Infancia y adolescencia dice respecto a las adopciones que estas pueden ser gestionadas por matrimonios, personas solteras y por los compañeros permanentes, pero en ningún momento advierte sobre cómo debe estar conformada esa pareja ni de su orientación sexual.
Juan Medina considera que si los homosexuales no tienen ningún impedimento para ser padres o madres biológicos, no tienen porqué tener impedimentos para ser adoptantes. «Decir que la orientación sexual impide ser padre biológico o adoptivo llevaría a un error lógico. Si existe una norma que lo prohíba es la misma Constitución que dice que la familia se constituye por un hombre y por una mujer. Lo que está mal es la Constitución entonces y es un problema de marca mayor. Ese es un lío en que se metió la Corte y no hay forma jurídica sino política de salir».
Todo este revuelo legal hará que tarde o temprano la Corte Constitucional se tenga que pronunciar al respecto, y según Medina ésta tendrá que reconocer que los homosexuales tienen exactamente los mismos derechos que los heterosexuales y tendrá que decir de frente que son familia. De igual forma, el especialista en derecho civil, afirma que la palabra homosexual es una forma de discriminar sujetos.
Uno de los argumentos esgrimidos por el ICBF, y los conservadores colombianos en general, es que el Código de Infancia y Adolescencia exige «idoneidad física, mental, moral y social suficiente» para adoptar un menor. Frente a esto, la revista Semana dice: “En este sentido ¿qué hace que una pareja homosexual no sea idónea para adoptar? y por otra parte, ¿seguimos pensando en un concepto de familia restringido?”
Mientras se desarrolla este debate más de 8500 niños permanecen en el ICBF esperando un hogar que los adopte, y a medida que se hacen mayores tienen menos opciones de ser adoptados.
Yesyd Rodríguez