La existencia de un vídeo porno no conocido hasta ahora frena la trayectoria de Carrie Prejean como icono de la derecha religiosa

Los lectores habituales de dosmanzanas conocen bien la historia de Carrie Prejean, la Miss California que saltó a la fama por oponerse al matrimonio entre personas del mismo sexo cuando fue preguntada sobre el tema en la gala en la que se eligió a Miss Estados Unidos. Convertida a partir de entonces en una heroína para la derecha religiosa estadounidense y un ejemplo para la juventud, incluso era invitada a participar en encuentros políticos. Pues bien, parece que su nueva carrera como líder social conservadora ha sufrido un parón al conocerse la existencia de un vídeo porno del que es protagonista.

Prejean, animada por su inesperada fama, había llegado a demandar a la propia organización de Miss California, que la había despojado del título por incumplimiento de contrato, alegando haber sido «discriminada por razones religiosas» debido a sus opiniones sobre los homosexuales. Lo cierto es que Prejean se encontró un hueso duro de roer: como respuesta, los organizadores de Miss California la demandaron a ella por no haber pagado el dinero que le prestaron para su operación de pechos, y finalmente la habrían amenazado con sacar a la luz el vídeo. Una estrategia efectiva, dado que Prejean habría retirado ya la demanda.

Por lo pronto, Prejean ya ha sufrido la primera consecuencia directa. Ayer mismo tuvo que abstenerse de aparecer en la cena «Defensores de la familia», un acto organizado a favor del «matrimonio tradicional» al que estaba invitada, siendo sustituida por el ex-candidato presidencial republicano Mike Huckabee, quizá un valor políticamente más sólido (las primeras encuestas ya lo sitúan como favorito para conseguir la nominación republicana cara a las elecciones de 2012) pero mucho menos glamouroso.