La mayoría conservadora en el Supremo de Estados Unidos impide que el juicio contra la Proposición 8 se difunda a través de internet
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha dado finalmente la razón a los opositores al matrimonio entre personas del mismo sexo y ha prohibido, de modo definitivo, la grabación y difusión pública a través de Youtube del proceso en el que se solicita que la Proposición 8 -la enmienda a la Constitución de California que prohíbe a gays y lesbianas contraer matrimonio- sea considerada contraria a la Constitución de Estados Unidos.
Como informábamos el martes, el juez que preside el caso, que ha comenzado esta semana ante una corte federal de San Francisco, había autorizado la semana pasada la grabación del juicio (ocultando los rostros de aquellos intervinientes que lo solicitaran) y su visualización pública con un día de demora. Los defensores de la Proposición 8 argumentaban que la grabación podía “cohibir” a las personas que testifiquen en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo. El Supremo finalmente les ha dado la razón, al considerar que la visualización de sus testimonios a través de internet podía someter a los defensores de la Proposición 8 a «intimidación» y afectar a sus testimonios.
La decisión ha sido tomada por cinco votos contra cuatro, mostrando muy claramente la separación del Tribunal Supremo en dos sectores: el conservador, mayoritario, y el liberal, minoritario. Un antecedente poco tranquilizador ante la posibilidad de que, sea cual sea la decisión de la corte federal respecto al caso, éste acabe llegando finalmente al alto tribunal.