El movimiento LGTB extremeño cumple 15 años trabajando por la igualdad

Son ya quince años de activismo LGTB en Extremadura, desde que viera la luz la primera asociación LGTB extremeña: De par en par (1995). Con motivo de este aniversario, el Presidente de la Asamblea de Extremadura, Juan Ramón Ferreira, recibió ayer en Mérida (Badajoz) al Presidente de Fundación Triángulo Extremadura, José María Núñez. Durante esta reunión Ferreira ofreció de nuevo el compromiso y el apoyo institucional del parlamento extremeño a las organizaciones que trabajan por los derechos de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales en la región.

Este encuentro ha contado con un alto contenido político. José María Núñez aprovechó la oportunidad para trasladar al Presidente de la Asamblea la posición de Fundación Triángulo sobre dos de los documentos que centran actualmente el debate político extremeño: la Ley de Educación y la de Igualdad. FTEx solicita que estas dos normas sean elaboradas incluyendo el enfoque LGTB para terminar con las situaciones de desigualdad que lesbianas, gais, transexuales y bisexuales sufren todavía hoy en distintos ámbitos sociales como el escolar.

El movimiento LGTB extremeño celebrará este aniversario con un programa “austero”, debido a la actual coyuntura económica, pero a la vez ambicioso. El centro de esta agenda conmemorativa será una conferencia política en el parlamento regional para el próximo otoño con el objetivo de “evaluar la trayectoria de estos años del movimiento LGTB en Extremadura, la realidad de lo que significa ser gay, lesbiana o transexual en una comunidad como la nuestra, y debatir cuáles son los posibles retos de cara al futuro» en palabras del Presidente de Fundación Triángulo. Sin embargo, no será éste el único evento. FTEx trabaja ya en un la organización para 2011 de un foro estatal hispanoluso e iberomericano de familias de gais y lesbianas a celebrar en la provincia de Cáceres.

“Estos quince años han servido para la consolidación del movimiento LGTB”. Según declaraciones de Núñez para dosmanzanas, “podemos afirmar sin temor a equivocarnos que Extremadura está entre las comunidades en las que más se ha avanzado en nuestros campos de trabajo, en algunos casos siendo avanzadilla, como ocurrió con el Congreso sobre Homoparentalidad de Cáceres”. Para el Presidente de FTEx el balance de estos años de activismo LGTB en la región es “positivo”, aunque aún queda mucho por hacer: “la homofobia existe y sigue siendo una realidad evidente y vergonzante”. Nuevos retos se abren ahora para el movimiento LGTB extremeño, entre ellos el activismo en el ámbito rural y la cooperación internacional.