Extremistas católicos obligan a trasladar la besada contra la homofobia de París
Centenares de parejas de gays y lesbianas respondieron ayer domingo a la besada contra la homofobia que había sido convocada en París por Kiss In contre l’homophobie con motivo del Día de los Enamorados. Una besada que tuvo lugar a pesar de las amenazas de extremistas católicos que obligaron a trasladar el lugar donde originalmente se pensaba realizar el acto, frente a la catedral de Notre-Dame, a la Plaza Saint-Michel.
Un numeroso grupo de jovenes integristas católicos permaneció no obstante de guardia para impedir que alguno de los asistentes a la besada se atreviera a acercarse a la explanada situada frente la catedral. El siguiente vídeo muestra como las fuerzas policiales tuvieron, de hecho, que interponerse y proteger a algunos de los que no quisieron ceder al matonismo de los intolerantes e intentaron acercarse al lugar original de la concentración: