Los contrarios al matrimonio homosexual denuncian que el juez que preside el juicio contra la Proposición 8 es parcial por ser gay
National Organization for Marriage, una de las organizaciones opuestas al matrimonio entre personas del mismo sexo en Estados Unidos, ha puesto el grito en el cielo por el hecho de que Vaughn Walker, el juez federal que preside el juicio sobre la constitucionalidad de la Proposición 8 que está teniendo lugar en California, sea gay. Un hecho desvelado hace unos días por el diario San Francisco Chronicle. El director ejecutivo de la organización «antigay», Brian Brown, ha acusado a Walker de estar siendo parcial durante el desarrollo del juicio.
Curiosamente, el artículo de San Francisco Chronicle alababa el hecho de que la orientación sexual de Walker no fuera un elemento de discusión. Y es que Walker -nombrado juez federal a propuesta del Presidente Bush padre en 1989- si de algo tiene fama es precisamente de conservador. Walker, aunque al parecer no hace esfuerzo alguno por ocultar que es gay, tampoco lo ha expresado de forma manifesta en público ni se le conoce gesto alguno de activismo LGTB.
Aunque nada hace pensar que Walker esté desempeñando su tarea de forma parcial, la estrategia de National Organization for Marriage pasa por poner la venda antes que la herida y desacreditar de antemano el fallo del tribunal por si éste fuera contrario a sus intereses. Un caso que no fue adjudicado a Walker de modo intencional, sino que simplemente le correspondía por turno.
En cualquier caso, aunque el tribunal federal de San Francisco determine que la Proposición 8 supone una violación de los derechos fundamentales contemplados por la Constitución estadounidense, se da por seguro que los contrarios a los derechos de gays y lesbianas apelarán al Tribunal Supremo de Estados Unidos. Y a día de hoy existe un convencimiento muy mayoritario de que el Tribunal Supremo se opondría a considerar que la prohibición a gays y lesbianas de contraer matrimonio es inconstitucional por 5 a 4 (en el mejor de los casos), dada su composición actual, escorada hacia posiciones conservadoras.
Claro, como ya huelen que les están ganando a puño limpio, los carcas sacan sus irracionalidades de siempre, que en este caso es el no-argumento ad hominem o «contra el hombre», en este caso en su forma llamada «envenenar el pozo»: como no pueden ganarle a los argumentos pulcros de los defensores del matrimonio gay comienzan a crear desconfianza en los oponentes o en la autoridad que dará su veredicto.
Los cristianos fundamentalistas jamás juegan limpio, y no porque no quieran, sino porque son una bola de analfabetos que solo pueden ganar apelando al emocionalismo.
Si seguimos ese razonamiento (razonamiento quizás sea una palabra excesiva) tampoco sería imparcial un juez heterosexual, puesto que creen que la orientación sexual determina la opinión a favor o en contra del matrimonio gay.
¿Cuantos jueces de marcado caracter cristiano tiene USA?.
Si están dispuestos a destapar esa caja de los truenos, que lo hagan.
Será muy interesante ver como su mismo argumento se vuelve contra ellos.
efectivamente de nuevo vemos el doble rasero de los crápulas que abanderan esa extraña «moralidad». Cuando violen a mujeres supongo que no podrá hacerlo un juez hombre o mujer heterosexual por que lo es el acusado. De nuevo pervierten la orientción sexual a su antojo para convertirla en su objetivo de odio, desprecio y descrédito.
Me parto con la gente «de bien». Si no se hacen las cosas a su modo berran cual ciervos en celo.