Un tribunal francés otorga derechos parentales a la pareja de una mujer lesbiana que tuvo un hijo biológico tras inseminarse en España
Un tribunal de Créteil, municipio cercano a París, ha concedido el derecho a compartir la custodia parental a la pareja de una madre lesbiana que tuvo un hijo biológico por inseminación artificial. Aunque las lesbianas no pueden recurrrir a este método en Francia, la pareja acudió a España, donde sí es legal hacerlo. Tras tener a su hijo en Francia, la madre biológica goza de plenos derechos, pero no así su pareja. La adopción le fue denegada: Francia ni siquiera permite a gays y lesbianas la adopción de los hijos biológicos de sus propias parejas. Ahora un tribunal le ha concedido por fin derechos sobre el que también es su hijo.
Pese a que la situación jurídica en Francia no contempla derecho alguno de parentalidad a las parejas de gays y lesbianas, poco a poco se van sumando pronunciamientos judiciales favorables, algo que ha sido saludado por Inter-LGBT, federación que agrupa a buena parte de los colectivos LGTB franceses. Sucedió hace poco más de un año tanto en Aix-en-Provence como en Rennes, cuando sendos tribunales concedieron derechos de parentalidad sobre los hijos en común tras la separación de dos parejas de lesbianas. Otra decisión de calado fue la que tomó el pasado noviembre, y tras diez años de pleitos, un tribunal de Besançon, que concedió a una mujer lesbiana que vive en pareja el derecho a optar a una adopción.
También han existido decisiones judiciales contrarias: hace pocas semanas informábamos como un juzgado de Avignon negaba a la madre no biológica el derecho a visitar a su hija tras la ruptura de su relación con la madre biológica.
Inter-LGBT ha aprovechado el fallo judicial de Créteil para pedir al Gobierno francés que modifique su proyecto de ley de parentalidad, que pese a las promesas electorales del presidente Sarkozy no reconoce de forma explícita derechos parentales a las parejas LGTB y continúa dejando las decisiones en manos de un juez. Un proyecto que cuenta incluso con el rechazo de GayLib, colectivo LGTB cercano al sarkozysmo.