El Senado francés niega a las parejas del mismo sexo la posibilidad de adoptar hijos
La mayoría de derecha en el Senado francés ha rechazado una proposición de ley presentada por el grupo socialista que proponía que las parejas que hayan contraído un PACS (Pacte Civil de Solidarité) pudieran adoptar hijos tras un periodo de dos años, independientemente de si son del mismo o de diferente sexo.
«El PACS es un contrato de vocación esencialmente patrimonial, que nada tiene que ver con el destino familiar específico que tiene el matrimonio», subrayó Marie-Hélène Des Esgaulx, representante de la mayoría sarkozysta, como argumento para negar ese derecho. Se da la circunstancia de que recientemente un tribunal francés reconoció a una mujer lesbiana que vive en pareja el derecho a optar a una adopción, decisión que fue recibida por irritación por la derecha francesa.
La propuesta estaba condenada al fracaso, dada la correlación de fuerzas en el Senado, pero su impulsor, Jean-Pierre Michel, consideró necesario presentarla para que al menos se hable del tema. «El hecho mismo de discutirlo, de propomver un debate público, es una forma de avanzar. Es como antes del PACS: fue necesario poner el asunto sobre la mesa varias veces hasta que se consiguió convencer a los reticentes», ha dicho. Michel habla con conocimiento de causa, dado que como ex-ministro socialista de Justicia fue uno de los impulsores del PACS, hace ya más de diez años.
El PACS es un contrato que vincula a dos personas independientemente de la orientación sexual, y que otorga derechos muy limitados. Cuando se aprobó, en 1999, se consideró un gran avance, y de hecho la derecha se opuso con fuerza. Con el paso del tiempo, la propia derecha se ha convertido en su principal defensora, negándose a introducir mejoras significativas del mismo pese a las promesas del presidente Sarkozy (que en campaña electoral prometió transformarlo en una ley de uniones civiles que, a imitación del Partnership británico, concediera derechos similares a los del matrimonio). Un incumplimiento que hasta GayLib (grupo LGTB ligado al partido de Sarkozy) ha criticado con dureza.
Lo cierto es que el debate sobre los derechos LGTB en Francia parece despertar poco a poco. Especialmente sintomático es el hecho de que Martine Aubrey, la secretaria general socialista, se haya posicionado recientemente a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo, después de que durante años ese partido se mostrara dividido.
Bienvenida sea Aubry a estos temas, era muy difícil que el Partido Socialista pudiese convertirse en alternativa de gobierno con unas posiciones tan anticuadas como las que mantiene tradicionalmente la izquierda francesa en el ámbito de los derechos LGBT. Espero que mis temores se disipen y no veamos una evolución «a la italiana» en ese país, donde hace ahora justo 4 años, la izquierda también obtuvo un destacado triunfo en una elecciones regionales que luego se desperdició en disputas internas y concesiones a las posturas más «tradicionales».
Totalmente de acuerdo contigo: mientras las izquierdas totalmente anestesiadas de determinados países no entiendan que la igualdad lgtb es una de las banderas del futuro, para que defiendan lo mismo que sus derechas, los votantes seguirán con el original.
Por otro lado, ¿no dice la derecha que el único problema es el nombre «matrimonio»? Una muestra más, y van miles, de que el problema somos nosotros, nuestra propia existencia, nuestra visibilidad: da igual hasta dónde se rebaje nuestra dignidad, a los conservadores siempre les parecerá demasiado.
Exacto Rukaegos, da igual el nombre que utilicen siempre nos querrán recortar más, hasta enterrarnos vivos. ¡Pero que les jodan que seguiremos dando guerra!
El partido socialista francés ya hace 4 años que se presentó con la promesa del matrimonio en su programa electoral: http://www.cimacnoticias.com/noticias/06jun/06062809.html
Liberté, egalité et heterosexualité?
Qué vergüenza Francia. Fue pionera en despenalizar la homosexualidad, refugio de GLBT de toda Europa durante el siglo XIX y buena parte del XX…
…Y hoy en día es el país de Europa occidental donde gays, lesbianas, bisexuales y transexuales tienen menos derechos y garantías reconocidos, sólo por delante de la muy homófoba y catoliquísima Italia.
Es curioso que países monárquicos y no del todo laicos como Bélgica, UK o los escandinavos le hayan pasado por delante en materia GLBT. ¡Por no hablar de España y Portugal, donde aún la iglesia católica tiene gran influencia y a pesar de eso se ha conseguido aprobar el matrimonio (sin adopción en el caso Portugués todo sea dicho)!
El republicanismo y la laicidad, por desgracia, se pueden interpretar de forma discriminatoria hacia los GLBT y la prueba es strike>Rancia Francia. Por otro lado, los franceses son expertos en vender una imagen falsa o exagerada de progresismo: son el país de Europa occidental donde la extrema derecha cosecha más votos porcentuales, sólo por detrás de Austria. Por cierto lo del mayo del 68 es otro cuento que nos han vendido: el conservador De Gaulle arrasó en las elecciones que tuvieron lugar inmediatamente después de la revuelta.
Sea como sea, a día de hoy es el país más socialmente conservador de Europa occidental (quitando Italia) y con una ley de parejas, el PACS, insuficiente y discriminatoria.
No sólo rancia es homófoba, es institucionalmente machista. En Francia ¡¡¡una mujer sólo puede acceder a tratamientos de fecundación asistida si está casada con un hombre!!!! Vamos, si eso no es tratar a la mujer como a un menor de edad que me lo cuenten!
Muy de los franceses esto, tan modernos que creen que son