El Gobierno alemán acerca las uniones homosexuales a los matrimonios en materia fiscal
La coalición de gobierno en Alemania, formada por los democristianos CSD/CSU y los liberales FPD, ha decidido igualar las uniones de hecho a los matrimonios en lo que se refiere al impuesto de sucesiones y al de transferencia de bienes inmuebles. Sin embargo, se deja fuera la posibilidad de presentar declaraciones de la renta conjuntas, la parte más importante de la presión fiscal.
Dicha medida entrará en vigor para el año fiscal 2010, y pretendería cerrar el debate de los últimos años sobre la discriminación a efectos fiscales de las parejas registradas del mismo sexo, especialmente relativa al impuesto sobre donaciones y al de sucesiones. Esta decisión va en la dirección de la recomendación contenida en una sentencia del Tribunal Constitucional alemán del pasado mes de octubre.
Hasta el 2008 las parejas de hecho eran tratadas como extraños a efectos fiscales. Entonces, a insistencia de los socialistas del SPD, el importe libre de impuestos que el miembro superviviente de una pareja homosexual podía heredar fue aumentado de 5.200 a 500.000 euros, igual que para los matrimonios (heterosexuales). Aun así, el CDU insistió en que las herencias de importe por encima de dicho límite fueran gravadas con un impuesto de entre el 30 y el 50% en el caso de parejas homosexuales, comparado con una tasa de entre el 7 y el 30% para heterosexuales.
En lo referente al impuesto sobre la transferencia de bienes inmuebles, a partir de ahora el miembro superviviente de una pareja registrada del mismo sexo que herede una vivienda de su pareja se ahorrará pagar una tasa de entre el 3,5 y el 4,5%, al igual que en el caso heterosexual.
Según un portavoz del FDP, esta medida sería fruto de las presiones ejercidas por su partido, cumpliendo así «paso a paso con [su] programa electoral». Su partido, no obstante, se negó hace medio año a apoyar una propuesta de los Verdes para equiparar el impuesto de sucesión. Los Verdes, por cierto, han calificado la decisión como «cacahuetes» para los homosexuales, ya que no incluye la medida más necesaria, que sería permitir a las parejas registradas homosexuales presentar una declaración de la renta conjunta. Dicha posibilidad supone en la actualidad un ahorro anual de 20 mil millones de euros a los matrimonios, casi el doble de la suma de ingresos por el impuesto sobre la transferencia de bienes inmuebles (7 mil millones de euros) y sobre donaciones y sucesiones (4 mil millones de euros).
Solo diré que comparto la valoración que los Verdes otorgaron a la medida migaja de los democristianos.