El Orgullo Báltico se celebra bajo una fuerte protección policial debido a las protestas homófobas
Alrededor de 500 valientes se manifestaron ayer sábado por las calles de Vilna (Lituania) para celebrar, por primera vez en esa ciudad, el Orgullo Báltico, que reúne a activistas LGTB de Estonia, Letonia y Lituania. La marcha había sido autorizada el viernes tras la suspensión cautelar ordenada el pasado miércoles, que desencadenó una fuerte protesta por parte de grupos de defensa de los derechos humanos y en circulos políticos de la Unión Europea.
Los manifestantes tuvieron que ser protegidos por un fuerte dispositivo policial (unos 800 policias, muchos de ellos equipados con perros y otros a caballo) de la ira de la multitud homófoba que se había congregado con intención de boicotear el acto. La masiva presencia de fuerzas del orden y el cordón policial establecido alrededor de la marcha impidió que lo consiguieran. En algún momento tuvieron que emplear incluso gas lacrimógeno para disuadir a los homófobos, 19 de los cuales fueron detenidos. Entre los contramanifestantes, muchos de los cuales llevaban cruces y pancartas homófobas, se encontraban dos miembros del Parlamento lituano. Al parecer en la catedral se llegó a celebrar una misa de desagravio «para rezar por los homosexuales».
Además de numerosos activistas tanto de las tres repúblicas bálticas como de otros lugares de Europa, la marcha contó con la presencia de Birgitta Ohlsson, ministra sueca de Asuntos Europeos, así como de varios embajadores extranjeros y cinco europarlamentarios.
Hemos enlazado dos vídeos que muestran la cara y la cruz de lo sucedido. Arriba, la marcha, pacífica, colorida y respetuosamente reivindicativa. Abajo, parte de la multitud homófoba congregada gritando y amenazando a las fuerzas del orden que, en esta ocasión, cumplieron dignamente con su trabajo.
Qué bien está puesto lo de «500 valientes». Un abrazo a todas las personas LGTB que lo hicieron posible.
Nos vemos en Tallin el año que viene. 😀
Bravo por los valientes, y toda la fuerza y la solidaridad que se les pueda transmitir.
Por cierto, ya hubo por aquí quien confundiendo churras con merinas seguía proclamando que los carnavales con tíos en pelotas no ayudaban nada a normalizar los derechos lgtb en Lituania … ¿por dónde andaban esos presuntos chulazos?¿se darán por enterados algunos de que en el Orgullo se reivindica y en países como éste se arriesga?
Enhorabuena por los 500 valientes que han decidido dar la cara por sus derechos y una vida digna 😀
Si, es un acto de valentía, especialmente observando la cantidad de homófobos cruzados (tenía que haber cruces cristianas) congregados dispuestos a arruinar el día. Afortunadamente no lo consiguieron gracias al buen trabajo de las fuerzas del orden.
Por más misas que hagan para rezar por los homosexuales seguiremos acá y más vale que se vayan acostumbrando a nuestra presencia.
Se me olvidaba, muchos del clero son también homosexuales, quizás lo ignoran…
Bravo por los valientes bálticos.
Es la primera vez que veo imágenes de la tierra de mi padre (lituano) y la sincronicidad o la coincidencia quiso que fuera en la Marcha del Orgullo.
Lo que sentí, es ternura al ver marchar a los que podrían ser mis hermanos y compatriotas.
Allí son 500, en Buenos Aires, 70.000.
Lo serán, algún día.
Lo dicho en la noticia. Bravo por los 500 valientes, sí, señor (no lo que tenemos aquí)sabiendo de la multitud homófoba que se había congregado con intención de boicotear el acto y también por los 800 agentes de seguridad que cumplieron dignamente con su trabajo aguantando las amenazas de los homófobos.
A mí me gustaría saber si a los bocazas que no hacen más que criticar «lo que tenemos aquí» se manifestaron alguna vez en España, cuando manifestarse en España era hacerlo en un ambiente como el que tienen ahora en los países de la noticia.
O simplemente es hablar por no callar, que es lo que tiene ir de «contradictorio» por la vida.
Precisamente a los que siempre he alabado y lo sigo haciendo son a los que realmente han tenido los cojones de manifestarse en la España donde por ser lo que éramos íbamos a la cárcel. Esos sí que eran valientes. Y sé de buena tinta que ni hacían carreras de tacones ni se subían en tanga a las carrozas.
Pero claro, debe de ser eso que dices, hablar por no callar. Que de eso sabemos todos. Ni me he manifestado nunca ni lo voy a hacer (siempre lo he dicho). Yo no celebro ni quiero hacer mi homosexualidad ‘visible’ corriendo con tacones por el centro de Madrid.
Claro, el problema son los tacones. Ya veo.
#10-…por supuesto.
Siempre es preferible que sean otros los que se curren los derechos mientras uno los disfruta sin pegar palo al agua…»contradictoriamente»…
El caso es que yo sí he visto montones de veces a Armand de Fluvià, Jordi Petit y las trans que «han tenido los cojones de manifestarse en la España donde por ser lo que éramos íbamos a la cárcel», «celebrando y haciendo su homosexualidad visible» en carrozas donde comparten espacio con gente con tanga y tacones…
Queda mes y medio y…
¡¡¡Empieza la fiesta chicas!!!
Como cada año a dejar claro lo mismo de cada año.
Yo no voy a tener más remedio que pedirle perdón diez millones de veces a contradictorio por tener sólo diez añitos cuando murió el dictador y no haber podido manifestarme cuando de verdad se corrían riesgos para la salud física, moral, mental y democrática. Y asumir en mis disculpas públicas y arrebatadas que nada de lo que hayamos podido hacer luego para conseguir la dignidad de las personas lgtb de nuestro país ha tenido valor alguno porque no lo hicimos corriendo, con o sin tacones, delante de los grises.
Por lo demás, dentro del reconocimiento debido a quienes lucharon en los años más difíciles, a los que se dejaron allí su vida y sus esfuerzos, a los que aprendieron a vivir en la exclusión sin bajar nunca la cabeza, creo que contradictorio está mal informado: Fueron precisamente los que hoy volvemos a menospreciar, las locas, las plumeras, las mariquitas, las de los taconazos, las que más sufrieron la represión por la evidencia de su vida, y fueron también los primeros y las primeras en salir a la calle para decir que ya bastaba. Y nunca desde entonces han dejado de estar, primero para pedir la derogación de la Ley de Peligrosidad Social, luego en el activismo en favor de las personas con vih+, luego para el matrimonio y las familias, luego para la identidad de género, la lucha contra la homofobia. Y es que aunque nos empeñemos en apartar la pluma de nuestras vidas para ser «normales» (lo que sea que quiera que sea eso de la normalidad) tengo claro que ayer, hoy y mañana si contamos con alguien seguro para continuar adelante, es con las plumas y los tacones. Los «normales» suelen quedarse en sus casas esperando a que otros les solucionen la papeleta. O en los foros de internet.
Así que olé por las plumas, olé por los tacones y olé por toda la gente que lucha, cada cual a su manera.
¡Chapeau, Rukaegos!
((Impecable tu comentario))
El Evangelio, Rukaegos, el Evangelio, como decimos por aquí.
Al parecer en la catedral se llegó a celebrar una misa de desagravio “para rezar por los homosexuales”.
Aquí tenemos el epicentro de la homofobia, los que proporcionan argumentos y odio a los homófobos, los que jamás admitirán un debate dentro de su seno. Como indica Lobogrino, las y los valientes que se manifestaban en los años setenta y ochenta lo siguen haciendo junto a las «locas» y a las «camioneras» y lo hacen encantados porque ellos fueron los primeros en dar la cara.
Emocionante lo de estos 500. Merecen una película 🙂
En otro orden de cosas, qué novedad comprobar que el plumerío y la visibilidad siguen molestando. Ajo y agua. Desde luego, muchos jamás olvidaremos quiénes salieron a la calle a mediados de los 70. Porque les debemos mucho de lo que hemos conseguido.
Yo al menos tengo claro que a los que no debo nada es a aquella gente «de bien» que aprovechaba y aprovecha lo que otros han conseguido para todos, incluso para aquellos que les ponían y les ponen a caldo.
Saludos
Sí, será eso, los tacones…. En fin…
Bellgai, Gaimon (pseudónimos) y muchos más de la época. Me alegra saber que tú si los conociste, pero yo me refiero precisamente a los ‘menos visibles’. Siempre lo he dicho, la mayoría de los que escribís aquí sois de grandes ciudades. Es mucho más difícil es pueblos o ciudades pequeñas. Y si ahora es difícil, ni te cuento en los 70. Héroes de verdad, no nosotros. Que nos refugiamos en la red para hacer y decir muchas cosas porque nos sabemos ‘invisibles’, pero mucho cambiaría a la hora de hacerlo en realidad (sobre todo, repito, en lugares pequeños).
Todos (bueno, una gran parte) sabéis de mi animadversión por el orgullo. Y sabéis perfectamente que no soy el único. Eso es lo bueno, que somos diferentes.
En cuanto al comentario de Ruk, es muy fácil hacerse la víctima para hacer un comentario tan demagógico y de aplauso fácil. Tranquilo, hombre, a mi no me tienes que pedir perdón. En todo caso, da gracias por no haber vivido aquella época. Suele pasar, cuando uno no es consciente de lo que han pasado otros, sencillamente no lo siente. Nos pasa a todos.
De lo que dices que las locas, mariquitas, … que fueron las »que más sufrieron la represión por la evidencia de su vida», tampoco estoy de acuerdo. De nuevo lo digo: muchos homosexuales de la ‘España profunda’ fueron los que más sufrieron la represión por su homosexualidad.
Que yo sepa, hubo y hay, afortunadamente, muchas gente, no sólo locas y mariquitas en tacones, que luchaban y luchan por las personas con vih+, sobre todo mucha gente anónima que no busca la foto ni el reconocimiento.
Y no, no lo siento, pero yo no cuento con las plumas y los tacones para continuar adelante por mis derechos. Ni creo que vayamos a conseguir esa ‘normalidad visible’ que tanto está de moda. Quizás en tu entorno sí, pero no en el mío.
En cuanto a »los “normales», no todos se quedan en casa para que otros le solucionen la papeleta. Los hay también que somos conscientes de las limitaciones de la demarcación territorial y de la edad (por separado y/o conjuntamente) de las personas lgtb y nos centramos más en luchas de otro tipo y no con una boa o un tanga por bandera. Tenemos que ser más realistas.
Asi que lo vuelvo a decir: a mi no me representa las fiestas del orgullo de hoy en día como colectivo homosexual al que pertenezco. Sé que está muy visto pero yo también ‘huyo del orgullo’.
«Todos (bueno, una gran parte) sabéis de mi animadversión por el orgullo. Y sabéis perfectamente que no soy el único. Eso es lo bueno, que somos diferentes.»
Dices que lo bueno es que somos diferentes pero sin embargo estás en contra de la fiesta de lo diferente, porque según tu lo reduce todo a pluma, etc.
Haces honor a tu nick, francamente.
A mi no me representan quienes tienen pluma porque yo no la tengo.
Pero no me verás pedir que no salgan a la calle, ni me verás pedir el fin de la fiesta en donde sean mas notorias.
Y eso sí es aceptar la diferencia, no lo otro.
»No me verás pedir que no salgan a la calle, ni me verás pedir el fin de la fiesta en donde sean mas notorias».
Ni he pedido nunca que no salgan a la calle, ni he pedido nunca el fin de esa fiesta. Sólo he dicho que ni me gusta, ni la apoyo, ni siento que me represente como homosexual.
Que cada uno haga lo que quiera. ‘Es lo bueno de la diversidad’. Pero mi opinión particular sobre eso la tengo clara.
Rukaegos: permíteme que te felicite yo también por tu comentario.
Contradictorio…. ¿los normales? Ojiplático me quedo…. con eso ya lo dices todo compañero.
¡¡¡Ay!!! y luego voy de víctima. En fin, será eso que alguien apostilló alguien de hablar por no callar, aunque en este caso sea por no leer. Mantis, compañero (que mal me suena esta palabra), que lo de ‘normales’ no lo inicié yo. Fue respuesta al comentario de Rukaegos (12): quinta línea empezando por el final (por si te pierdes).
Pero tranquilo, cari, no pasa nada. Todos nos equivocamos alguna vez.
Eso sí, es curioso ver que no soy al único, como decís alguno, que se le ve el plumero con según qué palabras se utlicen y según qué personas lo haga. Me encanta que, en mi teclado, esas palabras os produzcan este tipo de reacciones.
A ver, Cont, lo mismo es bueno puntualizar algunos extremos. Por ejemplo, no todos vivimos en una de esas grandes ciudades tan gayfriendlies que te obsesionan. Salvo que la localidad en la que crecí (10.000 habitantes) y la que ocupo ahora (180.000) te parezcan asimilables a la Gran Manzana. Y creo que son mayoría los foreros de Dos Manzanas que viven en ciudades medias y pequeñas. Otra cosa es que no las hayan querido hacer todavía más pequeñas limitándolas a sus casas.
Claro que sufrió mucha gente en los pueblos. Pero basta ver los estudios y estadísticas acerca de cuáles fueron los grupos con los que se cebó la represión homófoba del franquismo. En primer lugar actuó poco en los pueblos y mucho en las ciudades grandes. En segundo, atacaba a las clases populares más que a las medias y las altas. En tercero, sus víctimas predilectas eran jóvenes de vida dudosa (chaperos, vamos, o los que eran acusados de tales) y a los invertidos y afeminados. Una vez más, travestis, transexuales, amanerados y locas. Los tacones, para aclararnos. Claro que el silencio es demoledor, pero más aún las palizas de los grises y todavía peores las estancias en los campos de concentración.
Claro que doy gracias por no haber vivido aquella época. Pero una vez más te adelantas demasiado a juzgar según tu particular miopía a los demás. Qué sabrás tú de lo que han sido mi vida y las de otros foreros, qué sabrás tú de cuántas renuncias o cuántos problemas hemos tenido por encarar nuestra orientación sexual. Pero un saco uniforme y cómodo para todos te viene muy bien para tu autojustificación permanente.
Pues bien, sigue justificando tu miedo propio en lo que percibes como vergüenzas universales y ajenas. Y sigue practicando el cómodo «asimilacionismo». Pero que no se te olvide que así lo hicieron muchas familias judías en Centroeuropa hasta olvidar que lo eran, olvidarlo tanto que sólo lo recordaron cuando vino la Gestapo a por ellos. Su olvido no fue el olvido de los otros, y sufrieron la misma suerte que los demás. Por si no me crees, busca las memorias de Jean Amery (antes Hans Mayer) que lo mismo te enseñan un par de cosas.
Por último, en toda demarcación territorial y toda edad hay tacones y boas, en todas hay luchadores con ellas y sin ellas, y también hay quienes se mantienen al margen. No lo uses como justificación, que está demasiado vista.
Y a mí no me representan los cachas en tanga, ni las reinas de la noche, ni los armarios, ni los gays llenos de prejuicios, ni los tacones, ni los zapatos castellanos: me represento yo, y no tengo una identidad tan feble como para que se diluya por un par de imágenes en la tele. Sé cuáles son mis valores y sé cuáles son los compromisos con los que lucho. Y por supuesto, entre ellos están una vida más digna, más visible, más igual para gays, lesbianas, bisexuales y transexuales, para todas y todos, dejando por supuesto que vivan su vida como mejor les parezca.
Como tú, alguna puntualización: dices que juzgo a los demás con mi particular miopía. En ningún momento he juzgado tu vida. Sin embargo tú te tiras sin paracaídas a juzgarme a mí y aquí no pasa nada.
No me vengas con el victimismo de que qué sabre yo de la vida de los otros ni de sus renuncias, ni me vengas con clases doctorales o lecciones magistrales con los datos y estadísticas sobre la mesa. No me vengas con lo de las familias judías centroeuropeas, Gestapo…. Gracias, pero va a ser que no.
Sólo he dicho lo que pienso: que la mayoría que escribe aquí vive en ciudades y se ve de otra manera la homosexualidad en pueblos y ciudades pequeñas. En mi caso un pueblo de 1950 habitantes cuando era pequeño, en Galicia, y después de varias ciudades ahora estoy en una ciudad de 150000 habitantes, pero con mentalidad de pueblo.
Eso, seguiré justificando mis miedos, esos que no veo por ningún lado, la verdad.
En cuanto a la justificación de la demarcación territorial y la edad. ¿He dicho yo que no haya tacones en cualquiera de las dos? No manipules mis palabras para argumentar las tuyas.
Eso sí, qué bonito te ha quedado eso de »[…]están una vida más digna, más visible, más igual para gays, lesbianas, bisexuales y transexuales, para todas y todos, dejando por supuesto que vivan su vida como mejor les parezca.». Si esto no es demagogia….. Pero vamos, gracias por dejarnos que vivamos nuestra vida como mejor nos parezca.
felicito a los que participaron en la marcha en lituania,no solo por ser valientes ,sino por que estoy seguro que han abierto el camino a mucha gente no solo en paises del este ,por que por desgracia se sigue necesitando ser un heroe en muchos casos para poder amar libremente a quien uno quiera,creo que con marchas como esta todos somos un poco mas libres hoy,por cierto cualquiera que salga a la calle a reivindicar el orgullo de cualquier forma me representa ,independientemente de si viste de calle en tanga o cono quiera,,no me molestan las plumas ni los osos,creo que cabemos todos
A ver, claro, primero estás en un pueblo que es un pueblo, y luego estás en una ciudad que no lo es pero a ti te lo parece. Seguramente porque como tantas otras personas prefieres no correr riesgos y prefieres pensar que te odiarán si sabes que eres gay. Siempre es más cómodo no darles oportunidad ¿verdad?
En general aquí los únicos discursos victimistas son los tuyos, que eres el que permanentemente se autojustifica y se autoprotege. Los demás vivimos en ciudades como la tuya, de ese tamaño y probablemente de esa mentalidad. Lo que no hacemos es vivir como tú. Y desde hace mucho tiempo.
Por cierto, lo que a ti te parece demagogia a muchos otros nos parecen valores importantes y positivos por los que luchar. Y causas a las que dedicamos el día a día. Lo que si es hueco y demagógico es seguir pretendiendo que el Orgullo es una mera exhibición de cuerpos y nada más que eso, es pretender que las locas te dan a ti mala imagen, quejarte a todas horas de que lo que hagamos los demás o dejemos de hacer afecta a tu vida personal. Pero vamos, que lo mismo un día maduras y te das cuenta de que a ti ya tu vida se les juzgará en tu entorno por lo que tú seas y tú hagas.
Por cierto, me encanta lo que te molestan las «clases magistrales y los datos». ¿Será que demuestran que no tienes razón?
En fin. Que sigo recomendándote la lectura de Jean Amery. Porque por mucho que quieras jugar al camaleón entre los heterosexuales (vamos, como que no hay frikis y plumas de todo tipo entre ellos), esos que tanto te asustan y que según tú te juzgarán por las plumíferas de la boa y las musculocas del Orgullo no tienen diferencias tan sutiles: Te odian a ti lo mismo que odian al resto. Que te diviertas entre ellos.
No se trata de dar oportunidad o no.
No se trata de discursos victimistas y autojustificaciones.
No se trata de madurar o no.
No se trata de si las clases magistrales y los datos demuestren la razón a quién los expone.
No se trata de jugar a ser camaleón ni de odios.
Así que, por mi parte, creo que he dejado bastante clara mi postura sobre el orgullo. Y no lo voy a cambiar.
Tamara: tampoco nadie te pide que cambies. Tienes todo el derecho del mundo de pensar como quieras.
Simplemente se trata de poner en evidencia a quien quiere jugar a la demagogia y a la mentira más burdas haciéndole el juego a la homofobia desde «supuestas normalidades gays».
Pero tú a lo tuyo sigue sin cambiar, Tamara, cari.
Que sí, que me gusta ponerme en evidencia jugando a la demagogia y a la mentira más burda y le hago el juego a la homofobia desde supuestas normalidades gays.
Que tienes razón, cari.
Jo, ya me has pillado. Qué inteligente…
Esto es un orgullo, y no lo que hacemos aquí, que más que para defendernos, sirve para que deseemos no haber salido del armario con tanta payasada de disfraces, y para que se metan con nosotros.
Snex: pues si quieres volver al armario nadie te lo impide. Siempre puedes llevarte un libro de Álvaro Pombo para pasar el rato allí dentro.
Eso sí, si vuelves a salir déjate los prejuicios guardaditos en un cajón, anda rey.
Snex, totalmente de acuerdo contigo. Los valientes han sido los que se manifestaron en Lituania, sabiendo lo que se les podía venir encima.
Los que se manifiestan aquí (por ejemplo orgullo de Madrid) dejan, sólo a mi entender, mucho que desear en el colectivo gay, aunque ellos no lo quieran ver o se escuden en páginas como ésta para ir contra nosotros.
Pero es lo bueno de la diversidad de opiniones. Que cabemos todos.
Con negativos incluidos, eso sí.
Precisamente opino que lo que más daño hace al colectivo es precisamente convertir una reivindicación en un carnaval (véase lo que sale por la televisión todos los años, precisamente la imagen de lo que NO somos). Eso, a pesar de que cuando estuve el año pasado por primera vez me sorprendió ver que NO era como se pinta, sino que la mayoría de personas no hacen tonterías, pero los que salen en TV son precisamente los que sí.
Me parece genial salir a hacer la manifestación en el Orgullo, a diferencia de contradictorio, pero para reclamar visibilidad y normalización. Salir y dar mala imagen sólo provoca que los adolescentes que estén a punto de salir del armario se lo piensen aún más.
El comentario de La Maledón es ridículo. No se trata de que me meta en el armario, sino que quiero vivir mi vida como cualquier otra persona, y celebrar un Orgullo muy extravagante lo dificulta, porque no es la imagen que se debe dar. Cuando era más pequeño, lloraba porque yo no quería ser como los que salían por la tele, yo sólo quería estar con un chico, ir de la mano por la calle y demás…
Y no puedo entender que eso moleste a algunos, pero en ese caso apoyo que el Orgullo se convierta en una fiesta (si no lo es ya) y el 17 de mayo sea el día reivindicativo. Quizás es que mientras a unos nos importa defender los derechos, a otros sólo les importa la fiesta…
Bueno, por si no me he explicado bien, estoy de acuerdo con hacer fiestas, y con que en ellas cad uno haga lo que quiera (catrrera de tacones y demás, me pareció supergracioso), pero creo que la manifestación debería ser estrictamente formal.
Pero claro, si sólo lo vemos desde el punto de vista de Lobogrino (con perdón por nombrarte, es para argumentar)…
«Queda mes y medio y…
¡¡¡Empieza la fiesta chicas!!!
Como cada año a dejar claro lo mismo de cada año.»
entonces sí que entiendo que os molestemos los que nos quejamos de dar mala imagen. También habría que preguntarse si es lo mismo vivir en Madrid que en el resto de España… pero ya lo hablaremos en los comentarios previos al orgullo.
snex:
Es difícil, aún para muchos homosexuales y lesbianas, admitir la DIVERSIDAD, la pluralidad y lo «diferente».
Transexuales, travestis y gays con pluma, tienen el mismo DERECHO a exhibirse y festejar conforma cada uno, realmente, ES.
¿Quiénes somos nosotr@s, gays y lesbianas «políticamente correctos», decorosos, recatados y sin pluma, para desacreditar a los «extravagantes»?.
Cuando tú eras muy niño (o tal vez no habías nacido) los primeros asesinados y encarcelados fueron los travestis y los gays enjoyados y con tacones. Ellos sembraron los campos de lucha con su propia sangre.
Hay lugar para todos, snex, para todos.