El reconocimiento de las parejas homosexuales, uno de los puntos que centran el debate electoral en Hawaii

El reconocimiento de las uniones entre parejas del mismo sexo se ha convertido en uno de los temas calientes de la batalla electoral entre los candidatos republicano y demócrata a Gobernador de Hawaii. Las posiciones que defiende cada uno son, no obstante, poco sorpresivas…

El candidato republicano, James «Duke» Aiona, de convicciones católicas, ha propuesto llevar a referéndum en 2012 una propuesta de enmienda constitucional que prohíba de forma taxativa el matrimonio entre personas del mismo sexo. Aiona tampoco es partidario de que se apruebe una ley de uniones civiles, aunque se muestra abierto a algunas reformas que mejoren la vigente legislación de parejas de hecho, que concede derechos muy limitados a las parejas homosexuales.

La posición de Aiona no deja de ser una mera operación de imagen cara al electorado más conservador. La Constitución de Hawaii ya tiene una disposición, aprobada en referéndum en 1998, que establece que en ese estado, a día de hoy, el matrimonio sólo es posible entre un hombre y una mujer. Si bien es cierto que la disposición deja la puerta abierta a que las cámaras legislativas del estado puedan cambiar la ley en el futuro («The legislature shall have the power to reserve marriage to opposite-sex couples«, reza la disposición), ni siquiera los demócratas lo plantean.

Por su parte, el candidato demócrata, Neil Abercrombie, ha prometido que si es elegido Gobernador dará su apoyo a una ley de uniones civiles que equipare éstas al matrimonio. Una legislación, por cierto, que ya recibió el apoyo de las cámaras legislativas del estado, pero que la actual Gobernadora, la republicana Linda Lingle, decidió vetar hace unos meses al considerar que se trataba del «matrimonio entre personas del mismo sexo pero llamado por otro nombre«.