Paladino pierde el apoyo de un importante rabino ultraortodoxo por disculparse tras su discurso homófobo
Las declaraciones homófobas de Carl Paladino, el candidato republicano a Gobernador de Nueva York, siguen teniendo consecuencias. Tras el comunicado de disculpa que se vio obligado a emitir ante la avalancha de críticas (incluída la de su propio sobrino y colaborador, abiertamente gay) hoy se ha sabido que el rabino ultraortodoxo Yehuda Levin le ha retirado su apoyo. «¿De qué parte del discurso que pronunció ante la comunidad judía ortodoxa se arrepiente?», se pregunta ahora el rabino. «¿Le veremos el año próximo con su hija desfilando en el Orgullo Gay?», ironiza…
Las palabras que originaron la polémica fueron pronunciadas por Paladino hace unos días en un acto celebrado ante la comunidad judía ortodoxa de Nueva York. Al parecer, el rabino Levin había participado en la elaboración del discurso. Paladino afirmó entonces que a los niños no se les debería “lavar el cerebro” para que piensen que la homosexualidad es una “opción aceptable”. Paladino atacó además a su oponente demócrata, Andrew Cuomo, por haber acudido a la marcha del Orgullo LGTB. «No creo que sea el mejor ejemplo que podemos mostrar a nuestros hijos”, expresó. Al parecer, en el discurso se encontraba además la frase “no hay nada de lo que sentirse orgulloso por ser un homosexual disfuncional”, pero finalmente el republicano prefirió no pronunciarla.
Ahora Levin reprocha a Paladino su cobardía por retractarse. El rabino se encontraría además especialmente molesto por no haber sido avisado de que se iba a emitir el comunicado de disculpa, que fue para él toda una sorpresa. «Estaba comiéndome un bocadillo de pastrami kosher cuando vienen y me dicen: ¡Paladino se ha vuelto gay!. ¿Qué? exclamé… Y entonces me enseñaron el comunicado», cuenta Levin. «Casi me ahogo con el pastrami», añade…
Críticas de su colega californiana
Por cierto, que la candidata republicana a Gobernadora de California, Meg Whitman, que no es precisamente una adalid de los derechos LGTB, se ha unido también a la lista de críticos con las palabras de Paladino. Preguntada sobre el tema en una entrevista radiofónica, Whitman ha declarado que «fueron unos comentarios inapropiados. Creo que se trató de algo inapropiado y equivocado».
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Flick
Flick no es más que el "nick" con el que empecé a comentar (y discutir, y razonar...) en dosmanzanas, allá por 2006. Me sabía a poco, por eso decidí colaborar y compartir mi pasión por estar informado. Y aquí sigo.
Seguimos con las religiones de Abraham homófobas; el día que haga algo que sea del agrado de ese barbón, ese día rectifico seriamente mi código moral. De todos modos, ni le creo a Paladino y su disculpa estratega.
En fin, otro imbécil con túnica, de tantos como abundan.
Tiene gracia que hablara de lavado de cerebro de niños por la cosa gay.
No dejo yo a mis hipotéticos hijos en manos de estos alucinados ni muerto.
Y en un mundo lógico, nadie lo haria.
El incidente del bocadillo de pastrami kosher parece sacado de una peli de Woody Allen. Desternillante, si no fuera por lo siniestro del personaje.
Vaya, pues parece que las esposas de los candidatos republicanos han decidido convertirse en abogadas del matrimonio entre personas del mismo sexo, si antes fue la mujer de Mc Cain, ahora es la de Paladino la que sale a la palestra:
http://www.advocate.com/News/Daily_News/2010/10/17/Mrs_Paladino_Open_to_Marriage_Equality/
Aunque la noticia pueda parecer frívola, a mi me parece que tiene más miga de lo que parece que las esposas de líderes republicanos opuestos al matrimonio igualitario (me gusta esta expresión creada en los medios argentinos) salgan a enmendar la plana a sus maridos. ¿Puede haber algo más tradicional que una esposa de político republicano?. Y parece por lo que declara que ésta señora si tiene de verdad amigos gays…aunque su marido parece que ni siquiera se ha enterado.