Representantes del clero católico de México se niegan a abrir un proceso de conciliación tras sus declaraciones homofóbas
Hace unos meses hacíamos referencia a las declaraciones homófobas de los cardenales Norberto Rivera y Juan Sandoval (arzobispo de Guadalajara), así como del portavoz de la archidiócesis de México Hugo Valdemar, en relación a la reforma que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo en la capital mexicana. Unas palabras que todavía colean…
Diversos grupos LGTB denunciaron estas palabras ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED), que hace unos días determinó que el cardenal Sandoval pudo incurrir en un delito al referirse de forma despectiva y ofensiva a las personas homosexuales, menoscabando la dignidad y respeto debido hacia ellas y promoviendo la homofobia y discriminación. Sandoval no respondió a las diversas notificaciones que el CONAPRED le envió para solicitarle información e invitarle a un proceso de conciliación. De hecho Sandoval parece haber ignorado por completo al CONAPRED y ha continuado haciendo declaraciones desafiantes contra el Gobierno del Distrito Federal, al que ha equiparado con una dictadura por tomar «decisiones sin el consenso de las mayorías y contra la ley natural». Hay que recordar que el propio jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, ha demandado en los tribunales a Sandoval.
Por lo que se refiere al cardenal Norberto Rivera y al portavoz Hugo Valdemar, ambos rechazaron también la posibilidad de abrir un proceso de conciliación pero sí acordaron con el CONAPRED emitir un comunicado en el que expresar públicamente sus puntos de vista pero con un límite legal, el establecido sobre el ejercicio de la libertad de expresión con respecto de los derechos de terceros.“No se pueden justificar expresiones que atenten contra la dignidad de las personas”, según el CONAPRED.
«Nuestras posturas respecto al tema del matrimonio y adopción entre personas del mismo sexo no son conciliables mediante una audiencia de conciliación, en razón de que nuestra postura emana de nuestro credo religioso, es decir de nuestra conciencia», expresaron finalmente los religiosos. Ambos insistieron además en que «la homosexualidad es uno de los pecados gravemente contrarios a la castidad y, por ende, violatorio del sexto mandamiento que impide la comisión de actos impuros (…) No estimamos aceptable el matrimonio entre personas del mismo sexo en razón de que el Magisterio de la Iglesia Católica nos enseña que el matrimonio es un sacramento elevado como tal por el mismo Jesucristo».
Añadieron que la iglesia católica solo admite el matrimonio entre un hombre y una mujer porque una de las características de esta unión es «la apertura a la fecundidad, misma que no puede darse entre dos personas del mismo sexo».
Entrada compuesta con informaciones de Lio y Yesyd Rodríguez
Por supuesto que no iban a conciliar ni abrirse al diálogo. La Iglesia Carcatólica de hecho siempre se ha caracterizado por «o te metes mi fascismo por las malas, o te metes mi fascismo por las peores»; no hay discusiones con ellos, ya que creen tener la «preciada verdad». Ni siquiera se plantean debatir ni nada por el estilo… es lo que caracteriza a la gente más insegura de lo que hace o dice (porque, si realmente estuvieran seguros de sus barrabasadas, entonces no les importaría contrastarlas ante otras posturas; pero claro, es comprensible, mientras nosotros hablamos desde los hechos, ellos hablan desde la superstición – o fe, que es la misma cosa).
Los activistas ya sabían eso, pero también sabían que no obstante sienta un precedente importante el hecho de que se llame al carcatolicismo desde una postura perfectamente legal (por primeras veces)… y ellos renieguen, como siempre, de la legalidad. Un machón negro, de miles de tantos, a la historia del carcatolicismo.
Ellos son las manzanas podridas que hay que arrojar al la basura.
Neurófilo, me encanta tu comentario (como siempre): «o te metes mi fascismo por las malas, o te metes mi fascismo por las peores”…
Con estos neuróticos supersticiosos no se puede hablar.
El diálogo que la Iglesia rechaza con los laicistas intolerantes es el que ellos mismos provocan, ya que quieren a fuerza ellos tener la verdad, rechazando lo que la Palabra de Dios dice, ahí esta la causa de esta situación, son ellos mismos los que comienzan por rechazar a la Palabra de Dios, cuando la verdad aútentica está contenida en la misma en la Biblia, la misma Palabra de Dios; y esa es la clave los mismos que dicen que la Iglesia es supersticiosa son los perdidos, pues la verdadera superstición viene del diablo y no de Dios. Que de bueno se puede sacar de un diálogo en el que los laicistas intolerantes o ateos se cierran en sus propias ideas sin estudiar la ciencia verdadera, pues la auténtica realidad está en que la inmensa mayoría de los científicos han sido cristianos y muchos de ellos han sido católicos, como son Galileo, Copérnico, Mendel, Etc.; el ateísmo y el laicismo intolerante valiéndose de que algunos cristianos e inclusive católicos de ese tiempo no aceptaban sus descubrimientos, se los han querido robar, pero la verdad es que estos y muchos otros científicos no fueron ateos ni laicistas intolerantes. Para los verdaderos científicos Dios ha sido el autor de toda la creación evolutiva y el que nos da las normas verdaderas para un auténtico progreso humano, solo en él han descubierto a la Verdad y a la Luz, en él es en quien han descubierto su avance, tanto en sus estudios como en sus conocimientos. Viva por siempre Jesús, el Maestro de maestros, el Sacerdote de sacerdotes, el Médico de médicos, el Arquitecto de arquitectos, el Abogado de abogados, el Patrón de patrones, el Político de políticos, el Rey de reyes, el Científico de científicos, el Siervo de siervos, el Jefe de jefes, Etc., y con él también María reúne estos requisitos. “Amor y Paz a los Hombres de Buena Voluntad y a toda la Humanidad.”.
Antonio sanchez. Lo que tu y todos vosotros os mereceis, es ir a vivir a un país como Arabia Saudita.
Seguro que ahí no hay malvadoslaicistasateoscomeniños, ¿eh?.
Oh, pero claro, igual va a resultar que tampoco estareis a gusto, porque al no haber malvados laicistas, no hay separacion de iglesia y estado, y al no haber separacion de iglesia y estado, no hay libertad de culto. Y al no haber libertad de culto, no podéis practicar vuestra religion
No decías mas que chorradas y tonterias. El laicismo intolerante no existe, ni existirá por mas que manipuleis, mintais, y retorzais el lenguaje.
Todos esos científicos tan religiosos, eran precisamente buenos cientificos porque en el laboratorio dejaban fueran los rezos y se centraban en los hechos.
Que una persona del S XVI y posteriores fuera creyente no tiene absolutamente nada de sorprendente.
El 95% de científicos que ha habido en el mundo, existen ahora.
Y que casualidad, la inmensa mayoría resulta que no tienen creencias religiosas.
Asi que seguid en vuestra dimension, mintiendo, engañando, manipulando la historia como os de la gana.
Os merecéis una teocracia que prohiba vuestro culto religioso.
Entonces seriais los primeros en pedir una separacion de la iglesia y el estado.
Mentirosos.