El Consejo Constitucional francés deberá pronunciarse sobre el matrimonio homosexual
En septiembre nos hicimos eco del recurso presentado por una pareja de lesbianas francesas ante el Consejo Constitucional de su país por la prohibición de contraer matrimonio. Ahora, la justicia ha dado vía libre a que el Consejo Constitucional emita un veredicto, abriendo así una posible puerta al matrimonio entre personas del mismo sexo en Francia.
En efecto la Corte de Casación ha dado su visto bueno a la consulta sobre la inconstitucionalidad de los artículos 75 y 144 del Código Civil francés, que prohiben el matrimonio entre personas del mismo sexo. Dicha corte ha calificado la consulta como «novedosa» y «seria», citando la existencia de un «amplio debate social debido, especialmente, a la evolución de las costumbres y al reconocimiento del matrimonio entre personas del mismo sexo en las legislaciones de varios países extranjeros». La consulta pasa ahora a manos del Consejo Constitucional, que dispondrá de tres meses para pronunciarse.
La composición del Consejo Constitucional no invita al optimismo, ni tampoco los antecedentes (al ser consultado sobre una cuestión de homoparentalidad, el Consejo se declaró incompetente y reenvió el tema a los legisladores), pero los colectivos LGTB galos han mostrado una satisfacción con matices. Aún prefiriendo una aprobación por vía legislativa, portavoces de diversas organizaciones han saludado este paso como un signo de que las cosas se mueven, y que probablemente forzará a los legisladores a un debate serio sobre el tema. Así, los colectivos trabajan ya para que el matrimonio entre parejas del mismo sexo sea una de las cuestiones emblemáticas en la batalla presidencial de 2012.
El fallo de la Corte de Casación muestra de forma clara el efecto sobre la sociedad francesa de la aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo en un número creciente de países. Así mismo, cabe mencionar que en España también se intentó buscar la aprobación del matrimonio homosexual por vía judicial, proceso que no fue necesario llevar a término debido a su aprobación por el Parlamento en 2005. Por último, debemos recordar que en España se da una situación en cierta forma inversa al caso francés: el Tribunal Constitucional también ha de pronunciarse sobre la constitucionalidad del matrimonio entre personas del mismo sexo, debido al recurso en contra presentado por el Partido Popular.
Mejor así que a través de la bronca y la demagogia de los políticos. En Iowa fue gracias al supremo. Cuando depende de un tribunal hay menos gente que se atreve a discutirlo.
#1
¿Por parte de quién fue la demagogia en españa?.
Quiero decir, hasta donde recuerdo, unos se limitaron a extender un derecho restringido, a todo el mundo.
Y otros empezaron a gritar que se rompe españa, que se fracciona la sociedad, conflicto horrible, blablabla.
Por ese lado si que hubo demagogia. Por lo demás, los políticos que estuvieron a favor hicieron lo que tenían que hacer.
#2 Pues a eso me refiero
Y el Tribunal Constitucional español no se renueva. Nadie dice nada. Que cosas tan curiosas pasan el mi hermoso pais.
Hay momentos que creo se romperá y la culpa seré de los que dicen amarla tanto.
El juez Garzón apartado, la Memória Histórica ignorada, el Estatuto Catalán anulado. Las bodas de los gays y lesbianas que nadie sabe que pasará. Yo me espero lo peor.
Hasta que todo el pueblo no diga basta al Constitucional en España no habrá democrácia.