El presidente de México impugna el amparo al matrimonio de lesbianas que les permitía derechos sanitarios y de seguridad social
Mediante orden del presidente Felipe Calderón ha sido recurrido el amparo que se le había concedido al matrimonio conformado por Lol Kin Castañeda y Judith Vázquez para que la primera pudiese registrar a su esposa dentro del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para que, entre otras cosas, pudiera recibir atención médica como sucede con cualquier otro matrimonio.
Justamente el mismo día que vencía el plazo para recurrir, de forma que surtiera efecto el amparo y el IMSS se viera obligado a inscribir a Judith Vázquez como beneficiaria de Lol Kin Castañeda, el director de lo Contencioso de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, Abraham Álvarez Ramírez, lo impugnó con el argumento deque la Constitución mexicana contempla un modelo de familia integrado por padre, madre e hijos. Curiosamente, el mismo argumento empleado cuando Calderón Hinojosa impugnó la decisión tomada en la Ciudad de México que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo en el Distrito Federal.
En el recurso de revisión interpuesto por el Gobierno Federal de México, se argumenta que si bien es cierto que en el IMSS dijeron a Lol Kin que no podían inscribir a su cónyuge como beneficiaria, eso «no es suficiente» para considerar afectados sus derechos. También se argumenta que la actual Ley Federal del IMSS no contempla el registro del o la cónyuge de un trabajador del mismo sexo (precisamente la ley está siendo revisada y ajustada en este momento), dado que en 1943, 1973 o 1995 no existían los matrimonios entre personas del mismo sexo.
“Pensamos que Calderón no iba a seguir mandatando a las instancias federales a exhibir su homofobia y su ignorancia”, declaró Lol Kin Castañeda tras serle notificado que el amparo había sido revocado y aplazado para revisión por un juez en materia laboral. Si se decide que el juicio de apelación no puede ser llevado por un juez laboral, será turnado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, institución que siempre se ha pronunciado a favor de los derechos de las personas LGTB.
Se exhiben solos, ¿para qué escribir una imprecación?
Mientras la llamada guerra contra el narco ha costado la vida de cerca de 30,000 mexicanos, miles de huérfanos, y dolor en miles de familias (se dice que en México hay más violencia y más asesinatos de periodistas que en Irak), el señor Calderón y sus panistas se rasgan las vestiduras por el legítimo derecho a seguridad social y una vida digna de una pareja lesbiana, y emplean toda la fuerza del Estado para hacerles la vida de cuadritos. Pero así piensan los conservadores…
A Calderon ¡que le den! hdp