India prohibirá a las parejas del mismo sexo el acceso a la gestación subrogada
La India es uno de los países preferidos por las parejas de medio mundo para recurrir al procedimiento de gestación subrrogada. A partir de ahora, sin embargo, solo será posible para las parejas heterosexuales. La nueva legislación sobre reproducción asistida que está a punto de aprobar el Gobierno de ese país prohibirá su uso a las parejas del mismo sexo.
En varias ocasiones nos hemos referido, precisamente, a los impedimentos legales que parejas gays de varios lugares (Francia, Israel o la propia España) que habían recurrido a la gestación subrogada en India encontraban después para regularizar la situación de sus hijos en sus respectivos países.
La nueva ley india regulará un sector que se ha convertido en todo un negocio en ese país, considerado uno de los paraísos del «turismo reproductor» desde que en 2002 la Corte Suprema del país considerara legal la gestación subrogada remunerada. Ello atraía a parejas de países en los que, como sucede en buena parte de Europa, dicho procedimiento no está permitido -o lo está solo si es altruista y no remunerado- sobre todo debido al bajo coste del procedimiento en comparación con otros lugares (unos doce mil dólares, aproximadamente, frente a los setenta mil que puede costar, por ejemplo, en California).
Sea como sea, y más allá del debate que rodea a la gestación subrogada (cuyas implicaciones éticas generan opiniones encontradas incluso entre el propio movimiento LGTB) resulta curioso que el Gobierno indio se preocupe, exclusivamente, de prohibirla a las parejas del mismo sexo, mientras que seguirá siendo legal para las parejas de distinto sexo (casadas o no) o para las personas solteras. La discriminación homófoba, en ese caso, es indiscutible.
Incluso si cambiara mi opinión sobre la gestación subrogada, seguramente la India sería el último lugar del mundo donde iría para conseguirla. Y ahora con más motivo.