Reino Unido tratará a reclusos y reclusas transexuales según su identidad de género
El Ministerio británico de Justicia ha hecho públicas las que a partir del 14 de marzo serán las nuevas directrices que regularan los derechos de las personas transexuales encarceladas en prisiones del Reino Unido. Las nuevas normas permitirán a los reclusos y reclusar transexuales que se encuentren en proceso de reasignación vestirse, maquillarse y mantener una apariencia física acorde con su identidad de género.
A partir de ahora, solo como ejemplo, se deberá permitir a las reclusas transexuales utilizar prótesis externas para aumentar el volumen de sus pechos, independientemente de su grado de sofisticación, con la única limitación de que no supongan un riesgo para la seguridad que no pueda ser solventado de forma razonable. Los funcionarios de prisiones, por su parte, deberán dirigirse y tratar a las personas transexuales que se encuentren en proceso de reasignación en función de su identidad de género, aunque esta no se corresponda todavía con la que figura en sus documentos legales.
Las nuevas directrices estipulan que el traslado de prisión (mujeres transexuales a cárceles femeninas, hombres transexuales a cárceles masculinas) se producirá una vez que su identidad haya sido legamente reconocida, salvo que razones de seguridad no lo aconsejen. Mientras tanto, cada caso será valorado individualmente para determinar qué establecimiento penitenciario es el más adecuado, evitando someter a la persona a examenes anatómicos.
En España, la Dirección General de Instituciones Penitenciarias ya modificó en marzo de 2006 sus directrices, que deben tener en cuenta la «identidad psicosocial» de la persona reclusa. La activista transexual Carla Antonelli (actual candidata a diputada en la Asamblea de Madrid) jugó entonces un papel determinante para que dicha norma saliera adelante. Entre otras cosas, permite el traslado de prisión sin necesidad de que se haya producido la modificación de los datos registrales, si bien exige contar con informes favorables que tenga en cuenta «la trayectoria vital y social de la persona y su situación psicológica, médica y fisiológica» (puedes consultarla pinchando aquí).