El rey Roger
El otro día os informábamos en dosmanzanas del estreno de El Rey Roger, la exquisita ópera de Karol Szymanowksi con libreto escrito a medias con Jaroslaw Iwaszkiewicz, su primo lejano y amante. Qué fácil es épater le bourgeois, sobre todo cuando el bourgeois es medio lelo. Sorprendido por el supuestamente escandaloso montaje, leo los comentarios en twitter del excelso periodista Pedro J. Ramírez: «Innecesarias imágenes n el límite d la pedofilia«. De nuevo el viejo truco de asociar homosexualidad con pedofilia. Y es que hay que estar muy loca o muy enferma o ser muy inculta o haber esnifado mucho titadine para ver pedofilia en los escasos minutos en los que se proyectan imágenes de Flesh (¡del año 1968!, de Morrissey o de Warhol, o de los dos), que son, por cierto, algunas de las más bellas escenas jamás rodadas por una cámara de cine. Dicen que también había imágenes de Teorema de Pasolini (yo no las vi). Pero en vez de mirar el lunar en la mejilla, las delicadísimas pestañas, el tono de piel casi lunar o el delicioso perfil griego de Joe Dallesandro jugueteando a desmigar una magdalena con su hijo, un encantador bebé, algunas solo ven polla. Es lo malo que tenemos los hombres, que cuando nos desnudamos tenemos polla (unos más que otros). Y ver delante de mucho público lo que probablemente muchos se avergüenzan de saborear en privado suele causar incomodidad. Por lo demás, el montaje podrá gustar o no gustar (a mí me encantó), pero trece o catorce hombres en pantalón corto correteando por un escenario no tienen nada de escandaloso, lo mismo estaban haciendo en el Bernabéu a esa misma hora. Eso sí, sin sospecha alguna de mariconismo. Que en el año 2011 estemos montando la que estamos montando (en una mezcla entre homofobia y xenofobia) por una ópera de 1924 y una película de 1968 es para echar a correr. La que nos espera es buena.
El público, de lo más atento, silencioso y respetuoso, un público no habituado al Real: la devolución de abonos dado lo «rarito» de la propuesta y la coincidencia con el circo del Bernabéu dejó entrar al Real a aficionados, turistas y despistados que apreciaron mejor la obra que muchos de los abonados. Los mismos abonados que se quejan de que no entienden la trama, cuando el 80% de ellos sería incapaz de seguir La Traviata ni aunque se la explicaran Epi y Blas, máxime después de las dos o tres copas de champagne de los entreactos: a esas alturas, lo mismo les da que les canten ¡Hojotoho! ¡Hojotoho! que María de las Mercedes. Dios salve a Gerard Mortier muchos años.
A los que vayáis a verla, no olvidéis visitar en la sexta planta la (modesta, pero algo es algo) exposición: Hermoso como yo. Un recorrido por la trayectoria de El rey Roger (y lo que le queda por recorrer: es una obra maestra absoluta) con las fotos de chicos sicilianos de von Gloeden y una foto preciosa del propio Iwaszkiewicz: Los misterios de Dioniso.
Krzysztof Warlikowski, el autor del montaje, y Warhol, se deben estar muriendo de risa. Qué fácil épater le bourgeois. La próxima vez deberían emitir escenas de Blowjob (1964) o incluso de Fireworks (1947), la mítica película de Kenneth Anger. A ver si con un poco de suerte se queman a lo bonzo las pesadas de siempre. Y de paso queman unos cuantos cuadros de Murillo, por pedofilia.
se me olvidaba los más importante:
Mariusz Kwiecien, que hace de Rey Roger, está ULTRABUENORRO
y canta bien y todo, el chico
http://www.google.es/search?hl=es&q=mariusz%20kwiecien&bav=on.2,or.r_gc.r_pw.&um=1&ie=UTF-8&tbm=isch&source=og&sa=N&tab=wi&biw=1680&bih=865
grande!
lástima no poder asistir
El Sr. Pedro J. no tiene autoridad moral para escandalizarse por nada desde aquel video en que una negra le metia un Jumbo por el culo.
Puto, leyendo tu crónica parece que fueras músico profesional y que te movieras en estos ambientes cada día.
Yo, que lo hago, no puedo más que aplaudir tu retrato totalmente acertado de una faceta de mi profesión que está copada en gran medida por gente clasista, apolillada y pacata, a la que, sin embargo y debido a su mediocridad, es tan sencillo pillarles en renuncio…
Un abrazo
¡ Me ha encantado tu nota !
Tó: eres el puto amo.
Tío: eres el puto amo.
Me acabo de encontrar una desagradable sorpresa. Estos dias he cambiado la conexión a movistar, y parece ser que por defecto te activan una especie de filtro parental llamado canguro.net
Pues bien, ese filtro salta ante la palabra «transexual».
Probablemetne la consideren algo pornográfico por defecto. Curiosamente, ante «gay» o «lesbiana» no salta.
Siempre es un placer leer tus crónicas Puto, ésta la he disfrutado especialmente. Gracias por compartirla.
Aparte de tu magnífico artículo sobre algo que me encanta, (la ópera)y que nunca podré ver.Me refiero a esta representación en concreto e incluso, posiblemente, a contemplar cualquiera en el El Real, aclárame algo :¡¡¿qué coño te ha hecho a tí Murillo?!!
Guillermo, léela de nuevo. No es que Murillo haya hecho algo (salvo pintar con una luz increible a niños jugando en la playa) es que determinada gente, en lugar de ver los niños jugando, el increible juego de luces, la maestría del trazo, la increible fuerza del momento que fue capaz de captar el pintor, que es capaz de hacerte sentir el sol cuando miras sus cuadros, aunque sea invierno y bajo cero, etc, etc. decía que seguro que se refiere a esos que sólo ven que algunos van DESNUDOS. ¡qué impudicia! Si desde que Dios quitó la viña y montó el supermercado ahora si se puede decir que hay gente pa´to´.
David, hombre, que estaba de coña con el puto. De todas maneras eres muy amable por contestarme.
gracias a vosotros, sois muy amables.
carrington: no, no soy músico profesional, pero como si lo fuera porque estoy todo el día canturreando, jejeje. Ya me gustaría
guillermo: Murillo no solo no me ha hecho nada sino que es uno de mis pintores preferidos. No la banalizacion de Murillo ni los cuadros «amurillados» ni los almanaques kitsch ni las estampitas de los breviarios sino el verdadero Murillo.
dexter: a mí me saltaba el canguro.net hasta con la propia pagina de movistar. jurao. y encima te lo cobran
La ópera musicalmente es una maravilla (el texto no), y la puesta parece estar diseñada para epatar. Es entretenida y vistosa, lo cual se agradece ante un libreto tan pedante y con tantas ínfulas, y sobre todo ante hora y media pegado a las incómodas butacas del Real. Pero el final con los Mickey Mouse ya me pareció una gilipollez.
¡pero si los Mickey Mouse son lo mejor !!!! 🙂
yo creo que deberían haber copulado entre ellos, habría sido dificil de olvidar