El Senado francés impide acceder a los tratamientos de reproducción asistida a las mujeres lesbianas
La mayoría conservadora de la UMP (Unión por un Movimiento Popular), el partido de Nicolas Sarkozy, ha forzado la votación en el Senado francés de una enmienda que impide a las mujeres solas o a las parejas de lesbianas el acceso a los tratamientos de reproducción asistida. Las mujeres que lo deseen deberán, por tanto, seguir recurriendo a clínicas especializadas de países vecinos, como Bélgica, Holanda o España.
Hace poco más un mes el Senado francés aprobaba una enmienda conjunta de socialistas y verdes que permitía el acceso a estos tratamientos «a todas las parejas», sin indicación alguna sobre si estas debían ser del mismo o de distinto sexo. La enmienda abría, de facto, la posibilidad de que las parejas de lesbianas pudieran hacer uso de estos tratamientos, algo prohibido en Francia. Su aprobación causó cierta sorpresa entre los colectivos LGTB, hechos a la idea de que mientras se mantenga la actual mayoría conservadora, contraria a conceder más derechos a las parejas LGTB, esta reclamación era misión imposible.
Inmediatamente después el Gobierno francés confirmaba las sospechas y expresaba claramente que solo permitiría el acceso a estas técnicas a parejas que tuvieran un problema de esterilidad «de causa médica» y no «social», lo que implicítamente supone la exclusión de las mujeres solas o de las parejas de lesbianas. Un mes después la mayoría conservadora ha aprobado una nueva enmienda en este sentido, que revierte la situación a como estaba antes de la enmienda aprobada en abril.
Un caso distinto al español
Aunque el acceso de las mujeres lesbianas a las técnicas de reproducción asistida es en estos momentos un tema de actualidad en España, conviene aclarar que nos encontramos ante dos problemáticas distintas. La legislación española sí permite a las mujeres solas o a las parejas de lesbianas acceder a este tipo de tratamientos. Lo que se discute en España es la cobertura de dicha prestación por el Sistema Nacional de Salud en igualdad de condiciones a la que disfrutan las parejas heterosexuales.
No deja de resultar curioso, sin embargo, que los argumentos utilizados, ya sea para prohibir el acceso, ya sea para denegar su cobertura por la sanidad pública, sean muy parecidos y claramente discriminatorios. Una mujer cuya pareja sea un hombre y que no pueda quedar embarazada por la causa que sea (que el hombre sea estéril, por ejemplo) sí tiene derecho a disfrutar de dicha posibilidad. Una mujer cuya pareja sea una mujer (y que, por tanto, tampoco puede quedar embarazada) o que quiera formar una familia monoparental, no…
¿Libertad, igualdad y fraternidad? jajajaja ¡Cuánto cinismo!
Es que Francia es un pais lleno de la derecha extremayfranquistadebushyaznar, mari. El fascismo nos invade y solo zparo nos puede salvar 😀