‘Luismi y Lola’, el cómic gay de El Jueves
¿Qué sería del gay sin la mariliendre? ¿Y de la mariliendre sin el gay? La ficción de temática homosexual a menudo parece olvidarse de este binomio tan habitual en la vida real, pero ‘Luismi y Lola’ lo reivindica para el cómic en clave de comedia. Esta tira cómica creada por el dibujante Juanjo Cuerda –y que desde el pasado mes de mayo se publica semanalmente en la revista de humor gráfico El Jueves–, cuenta las vicisitudes de Luismi, un joven gay con una sexualidad en plena ebullición más preocupado por su aspecto que por sacar adelante sus estudios, y Lola, su fiel e inseparable amiga heterosexual, reivindicativa y responsable, pero a la que el término ‘mariliendre’ no le termina de convencer. Luismi necesita a Lola para mantener los pies en la tierra y Lola necesita a Luismi para no dejarse arrastrar siempre al lado negativo de las cosas. Juntos comparten risas, pequeñas maldades y aventuras que en solitario serían un puro aburrimiento.
En ‘Luismi y Lola’, la relación de simbiosis de sus protagonistas, dos personajes con caracteres opuestos, le sirve a su autor para diseccionar los tópicos del ambiente gay; en ocasiones para criticarlos, otras para corroborarlos, pero siempre para reírse de ellos. Una manera de abordar con humor el universo gay y sus a veces complicadas relaciones con los heteros.
Puedes ver algunas de las historietas de ‘Luismi y Lola’ en la web de El Jueves. Y en el blog de ‘Luismi y Lola’, donde también puedes descargar más imágenes a buena resolución.
Antes de publicar en El Jueves, Juanjo Cuerda ha colaborado con revistas como Shangay, Zero y Citizen K, entre otras. Licenciado en Comunicación Audiovisual por el CEU y en Animación por la ECAM, combina su trabajo como dibujante de cómics con la ilustración de libros infantiles y su faceta como cortometrajista de animación.
A mí, que leo El Jueves cada semana, no me hacen gracia los supuestos chistes.
Me parece que este comic contribuye a perpetuar los estereotipos. El típico gay promiscuo, superficial y fríbolo que está más pendiente de cómo tiene el pelo que de otros asuntos más importantes. ¿Por qué nunca sacan un gay como activista político o como famoso escritor? ¿Por qué siempre tienen que ser unos viva la vida?
Sauna Paradise era otra serie de El Jueves que también dejaba a los homosexuales a la altura del betún. Todo el día en la sauna y pensando a quien se iban a tirar.
Cristina, sinceramente, para gay reflexivo me leo a Luis Antonio de Villena. Creo que no hay que ser muy intelectual para darse cuenta de que este cómic es una PA-RO-DIA de muchos de los tópicos del ambiente.
Por cierto, «frívolo» es con «V». Te lo digo porque eso sí que ayuda a perpetuar otros tópicos: los de la LOGSE.
Quizá los tiempos han cambiado, no lo sé porque hace ya tiempo que no leo esta revista, pero hace años los «chistecitos» sobre homosexuales en las viñetas de El Jueves eran de un gusto bastante dudoso, cuando no directamente homófobo (y de la más baja calaña, además). Recuerdo una historieta en la que salía una pareja de gays, ridiculizados al máximo, que utilizaban un ratón para sus juegos sexuales. No sé lo que pretendían con ella, pero a mí me pareció repugnantemente homófoba.
Opino lo mismo que Xano. Yo la dejé de comprar hace años precisamente por eso.
Incluso llegué a mandar una carta de protesta por una historieta de «Historias de la puta mili» que me pareció especialmente homófoba.
Bueno, esta parece una buena oportunidad para redimirse entonces…
Bueno, pero este comic parece que precisamente va en otra dirección, no? Yo le doy un voto de confianza!
Pues yo tengo un buen recuerdo de la serie «sauna paradise». Ya no compro esa revista tras hartarme de la homofobia de algunos de sus dibujantes como Pedro Vera que hacía chistes tan finos como poner a Boris Izaguirre pintando una casa de blanco con el semen que le salía del culo. Cuando tenía 15 años tenía que aguantar en clase a alguno que iba de bruto para hacerse el gracioso y llamar la atención, a mi edad, ya no pienso pagar para aguantar lo mismo.
Para eso veo Intereconomía que van de frente y no meten un personaje homosexual para ir de guays. No sé quién dibuja esta serie pero espero que tenga algo de dignidad y abandone el barco de El Jueves.
Será parodia, pero a mí me han ofendido muchas veces desde El Jueves con los chistecitos homófobos y la ridiculización que han hecho de los/las homosexuales desde sus viñetas. Creo que esta serie será más de lo mismo, topicazos.
Está claro que este tipo de viñetas y comics no buscan, a través del humor, reflejar la discriminación hacia el colectivo homosexual, solo les interesa ganar pasta utilizando a los homosexuales para perpetiuar estereotipos y buscar la complicidad de la sociedad heterosexual, comunmente homófoba.
Qué diferencia con el trato que se suele dispensar, afortunadamente, a las mujeres por parte de los dibujantes. Se publican muchos trabajos donde en sus viñetas se refleja, con humor, la discriminación laboral y familiar que sufren muchas mujeres. Es un agravio comparativo que me parece insultante.
‘Sauna Paradise’ era una maravilla: humor sexual sin culpabilidades ni sordideces y con buenos recursos (¡ese fantasma de Freddy Mercury!). No sé si Carles Ponsí, su autor, es gay, pero lo cierto es que las tiras eran carcajada segura. Lo sentí mucho cuando desapareció de El Jueves, aunque siempre sospecharé que fue un parche, a modo de disculpa, por cierto horror titulado ‘Pepe Gay’ debido a Guillermo, el muy heterosexual caricaturista de El Mundo.
Por contra, ‘Luismi y Lola’ me parece una aberrancia cuyos poros rebosan de crema hidratante y corrección política. El problema, a mi modo de ver, no es que abuse de los estereotipos del gay pequeñoburgués y la mariliendre feminazi, ni que se remita a la vieja norma de «en caso de duda, haz un chiste con porno». Se trata, simplemente, de que no hace reír ni a tiros.
Por último, señalar que Ivá (‘Makinavaja’ e ‘Historias de la puta mili’) podía permitirse todos los chascarrillos de mariquitas que quisiera hacer, porque arremeter contra todo colectivo, entidad, comunidad o grupo humano de más de una persona era indisociable de su estilo. Además, era buen amigo de Néstor Almendros, gay ilustre donde los haya, a quien dedicó un obituario descacharrante en forma de historieta.
No conviene olvidar que esto es humor satírico, y que una buena sátira no respeta a NADIE.
Ya, pero cuando el humor satírico lo hagan poniendo en sus viñetas a una familia tradicional donde a ella, por ejemplo, le caiga el semen del chocho (con perdón por la ordinariez), como hicieron con Izaguirre, empezaré a creer que su «humor» apunta en todas direcciones.
El caso es que siempre utilizan a aquellos grupos que saben que llevan tras de sí una larga historia de burlas y escarnios por que saben que van a encontrar una gran complicidad emtre muchos de sus lectores. Buscar el chiste fácil de un «mariquita» es muy sencillo y nada arriesgado, y casi siempre sale gratis.
Pues a mí me gusta…
A mí me ha pasado también lo mismo que a Crasamet y al Dr. Turbio: dejé de comprar la revista a principios de este año, harto de ver «gracietas» hechas a costa de socavar la dignidad de mujeres y personas LGTB.
Vale que es una revista satírica y todo lo que se quiera, pero la sátira tiene un límite: la humillación porque sí de determinadas personas que desde siempre han soportado circunstancias desfavorables, cuando no agresiones.
Y con todo lo satíricos que son, hay cosas que respetan siempre (v.g. víctimas del terrorismo), pues que empiecen a respetar también a LGTB y a las mujeres. Si no, que los zurzan.
Y precisamente es el tal Pedro Vera, aunque hay otros muchos más, en su tira «Ortega y Pacheco» donde se despacha a gusto.
Crasamet, por cierto, yo ni me tomé la molestia de enviarles carta de protesta. ¿Para qué? ¿Para que la saquen en el «En familia» atribuyéndose ellos la razón y la última palabra con muy poca gracia?
Lo mejor es dar donde duele: el bolsillo, y más ahora, cuando muchas publicaciones han desaparecido debido a la actual situación económica. Las «revisticas» es de lo primero que se sacrifica cuando se trata de recortar gastos no imprescindibles.
Luismi anda un pelín bajo de moral, así que Lola (una servidora) le hará de abogada en la presente misiva (para quien pueda interesar).
Resulta que a algunos lectores les ha bastado lo poco que llevamos deambulando por la red y en las páginas de la revista El Jueves para colgarle el sambenito de estereotipo negativo de los gays, típico pequeñoburgués superficial, y nosequé cuantas cosas más. Y yo que soy su amiga desde hace muchísimo tiempo os diré que puede que tengáis un pelín de razón, pero también os diré que a pesar de ello (y de que a veces me saca un pelín de quicio) le quiero muchísimo, como si se tratara de mi hermano, y voy a defenderlo a muerte. Los que le decís estas cosas le cargáis con el peso de tener que representar a todo un colectivo, y Luismi sólo puede ser Luismi. A veces es frívolo y superficial, pero otras muchas veces es justo lo contrario. Ya lo iréis descubriendo.
No puede ser el representante de cada uno de los gays que lo leen en El Jueves, en primer lugar porque esa es una tarea imposible, y en segundo lugar porque ni siquiera se lo ha propuesto. ¿Os imagináis a Tato (el personaje del gran Albert Monteys) representando a todos los heterosexuales del planeta? Supongo que muchos dirían que perpetúa la imagen sucia y vaga del varón heterosexual, poco detallista y sucio en la casa, siempre pensando en timar al prójimo,etecé, etecé… Sería una locura.
Ningún heterosexual lee a los personajes heteros como si fueran el todo de su colectivo, sólo algunos gays toman la parte por el todo… (en parte por cómo se ha tratado el tema anteriormente, cierto).
Así que os propongo que nos relajemos todos y nos leáis con la mente abierta, como si fuéramos un chico y una chica que son amigos y que sólo se representan a sí mismos. Además, ya cuesta mucho ser uno mismo.
Un beso a todos y todas.
¡Pues claro Lola! Cuando uno cuenta un chiste de mariquitas no está generalizando simplemente se ríe del protagonista por ser… esto…
No vayas a pensar que aquí somos unos sosos obsesionados con lo políticamente correcto. Venga, cuéntanos un chiste, por ejemplo uno que acabe con un maricón de rodillas mientras un machote como Ortega o Pacheco le dan una patada en la boca. Tranquila, nadie te va a llamar homófoba por eso, ¡que tú tienes un amigo gay!
Yo, lo único que noto leyendo ciertos comentarios es un desconocimiento total del cómic…. ¿Alguno de los que lo critican se ha parado a leerlo semanalmente en El Jueves? Estoy harto de los que creen que la ficción del gay tiene que bascular entre el «mira qué pinta de heterazo tengo aunque soy gay pero aparento ser lo más ‘normal’ posible» y la «locaza de turno». Me temo que hay un amplio espectro de matices que todos os estáis perdiendo (creo que por no haberle dado una oportunidad al cómic) y rajar por rajar por lo ‘garrulo’ de la audiencia de El Jueves no me parece precisamente un buen argumento…
Párense a leer el dichoso cómic y rajen después, –porque otra cosa es que no les parezca divertido y ahí no hay discusión posible–, pero hasta donde yo sé, esto no es una campaña institucional sobre la representación de un género. Es, sencillamente, un personaje de ficción que no tiene que rendir cuentas a nadie, mucho menos a ustedes, talifanes de la discriminación positiva (tan letal como la negativa, por si no lo saben).
Vaya hombre, ahora ser talibán es dar una opinión contraria a lo que les gusta a los humoristas del jueves. Pues no, no me gusta que se hagan viñetas en las que se ridiculice a los gays, no les encuentro la menor gracia, ?lo puedo decir en una página LGBT o es que soy un marinazi?.
Pero que narices os pasa! L&L no ridiculiza a los gays, todo lo contrario. Su personaje tiene mil matices en lugar de estar centrado en un único aspecto. L&L viven situaciones distintas en cada tira, a veces frívolas, pero otras criticas, eso si sutiles, porque no necesitan dar lecciones de vida a nadie, simplemente viven la suya. Quizá vuestro problema es que necesitáis salir del gueto y ver que muchos gays viven la vida sin tener que pedir perdón por serlo o dar una imagen concreta. Vivir la vida, relajaros y criticar menos! ¿No es eso lo que vosotros esperáis de los heteros?
Ahora vienen a darnos lecciones de cómo tenenos que comportarnos los gays, y a comparar una crítica a una revista al trato denigrante que los heteros nos han dado tradicionalmente.
Si les criticamos es que demostramos no ser merecedores del respeto de los heteros…¡anda e iros con viento fresco!.
Elena, chica, te diría que no te has enterado de nada, pero tengo miedo de que si te lo explico tampoco lo entiendas, así que mejor paso de ti y todos contentos.
La semana pasada compré El Jueves. El cómic de Luismi y Lola me gustó, me recordó a los dibujos de Howard Cruse y con la bazofia que tiene al lado, Moncloa Palace, mejora mucho.
Pero eso sí, en la sección de «otras portadas», nada más empezar me topé con una de Pedro Vera en la que hacía un chiste con el incidente de los que protestaban contra Gallardón. El chistecito mostraba al alcalde de Madrid rodeado de gais sin camiseta y temeroso de ser violado. Es decir lo que los homófobos llaman «pánico homosexual» y tiene estas consecuencias:
http://www.dosmanzanas.com/2010/07/en-libertad-el-autor-de-la-muerte-de-dos-muchachos-gays-a-la-espera-de-un-nuevo-juicio-en-septiembre.html
Si compro una revista de humor pretendo reírme, banalizar esta estrategia violenta no tiene gracia. El autor de Luismi y Lola ya sabe (o le harán saber) que hay temas tabú. Por ejemplo la violencia de algunos heterosexuales contra mujeres esclavas en clubes de putas. A Juanjo Cuerda jamás le permitirán hacer una portada similar criticando la permisividad de la mayoría de los heterosexuales (dibujantes de El Jueves incluídos) con esta violencia.
Su función es lavar la cara a otros dibujantes para que los que compran esa revista no tengan problemas de conciencia y piensen que se «ríen de todo». No quiero imaginar a una lesbiana o a un gay que compra la revista pensando lo mismo.
jajaja muy bueno!!!