El Tribunal Superior de Justicia de Brasil reconoce el derecho de una pareja de lesbianas a contraer matrimonio

El reconocimiento del matrimonio entre personas del mismo sexo en Brasil parece imparable. Solo cuatro meses después de que dos tribunales brasileños, uno en São Paulo y otro en Brasilia, reconocieran los dos primeros matrimonios de este tipo (uno gay y otro lésbico), ahora es el Tribunal Superior de Justicia, una de las dos instancias judiciales más importantes del país, el que hace lo propio con otra pareja.

El fallo del Tribunal Superior de Justicia, que puede considerarse histórico, ha sido adoptado por cuatro votos contra uno, y señala que es perefectamente constitucional que dos personas del mismo sexo puedan contraer matrimonio, por lo que autoriza que dos mujeres que conviven maritalmente desde hace cinco años se conviertan en esposas. En este caso, las instancias judiciales del estado de Río Grande del Sur les habían denegado este derecho (a diferencia de lo sucedido en junio con las dos parejas antes citadas), por lo que la pareja recurrió ante el Tribunal Superior de Justicia.

El fallo se refiere solo a la pareja demandante y no es automáticamente extensivo a otros casos. Estrictamente hablando, por tanto, no puede decirse que el matrimonio entre personas del mismo sexo haya quedado legalizado en Brasil, si bien sienta un importante precedente que probablemente marcará la línea a seguir a partir de ahora por el resto de tribunales del país, como ya ha reconocido la Comisión de Derechos Humanos de la Orden de Abogados de Brasil.

Lo cierto es que los avances en la igualdad LGTB en Brasil han llegado con frecuencia gracias a decisiones judiciales. El pasado mes de marzo, sin embargo, se constituyó un frente parlamentario a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo entre otros derechos, promovida por el diputado abiertamente gay Jean Wyllys, que llegó a recibir amenazas de muerte.