Muere a los 86 años Frank Kameny, pionero en la lucha por los derechos civiles de gays y lesbianas
El 11 de octubre moría en Washington Frank Kameny, a los 86 años de edad, dejando atrás una larga vida de activismo y orgullo. En 1957 (todavía faltaban doce años para las revueltas de Stonewall) Kameny, doctor en Astronomía por la Universidad de Harvard, era expulsado del servicio cartográfico del Ejército de Estados Unidos por homosexual, una condición entonces considerada delictiva y vergonzante. Pero Kameny no se arredró: proclamó orgulloso su derecho a ser gay y ciudadano con plenos derechos civiles y llevó su caso hasta el Tribunal Supremo. Perdió, pero abrió el camino a muchos otros logros que llegaron después.
Frank Kameny solicitó al Supremo que se le compensara por «graves daños a la dignidad humana«. La compensación le fue denegada, pero la idea de que los derechos de gays y lesbianas debían exigirse como antes se había hecho con las mujeres o los afroamericanos, dentro del marco de las libertades civiles, había quedado sembrada. Kameny fue también confundador de la histórica Sociedad Mattachine y creador del histórico lema «Gay is good«, presente en muchas de las movilizaciones a favor de los derechos de gays y lesbianas a partir de los años sesenta.
Una de las grandes luchas de Kameny fue que la Asociación Americana de Psiquiatría dejara de definir la homosexualidad como un trastorno mental, algo que se consiguió finalmente en 1973. Kameny Llegó a irrumpir en una de las conferencias de la asociación, hacerse con el micrófono y gritar «nosotros no somos el problema. El problema sois vosotros«. La siguiente lucha fue revocar la ley que prohibía la sodomía en Washington D.C. También lo logró, en 1995. Luego llegarían más batallas. Algunas de ellas conseguidas poco antes de su muerte, como la derogación de la infame política de «Don’t ask, don’t tell», a cuya firma por el Presidente Barack Obama asistió personalmente.
«Era un pionero, alguien extremadamente honesto, inteligente, sin miedo a expresarse, a defender los derechos de los homosexuales mucho antes de que el resto de la gente se atreviera a hablar abiertamente de ellos. Frank fue uno de los primeros en hablar claramente del asunto, empleando su gran inteligencia«, ha declarado a El País Carl Schmid, expresidente de la agrupación de gays republicanos de Washington, que conoció a Kameny durante más de 20 años.
En 2009, John Berry, director de la oficina de personal del Gobierno, envió una carta a Frank Kameny en la que, en nombre del Gobierno de Estados Unidos, se le pedía perdón por el trato recibido en 1957. Se da la curiosa circunstancia de que Berry es uno de los más importantes altos cargos abiertamente gays de la administración Obama.
Su archivo personal, con más de 70.000 cartas, documentos y objetos, forma parte desde 2006 de la Biblioteca del Congreso, integrando la que es probablemente la colección más completa del movimiento por los derechos gay en Estados Unidos, según la National Gay and Lesbian Task Force, otra de las organizaciones que Kameny contribuyó a fundar.
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Flick
Flick no es más que el "nick" con el que empecé a comentar (y discutir, y razonar...) en dosmanzanas, allá por 2006. Me sabía a poco, por eso decidí colaborar y compartir mi pasión por estar informado. Y aquí sigo.
Ser pionero es cuestión de gran admiración. Más difícil fue su lucha y más grande aún su valentía. De admirar. Gracias Dos Manzanas por la información. Desconocía de su existencia.
Bien podría decirse que Kameny fu un «Luther King» para el movimiento LGBT.
Yo también me enteré de su existencia por esta noticia. Tan sólo decir gracias, gracias Sr. Kameny. Porque a través de muchas personas como usted este mundo es un poco más plural.