El líder de los liberales australianos impondrá a sus diputados el voto contrario al matrimonio entre personas del mismo sexo
El liberal Tony Abbott, líder de la oposición australiana, no permitirá a los diputados de su partido votar en conciencia sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo, como sí harán los representantes laboristas. Según Abbott, «la posición del partido es que el matrimonio es entre un hombre y una mujer», por lo que los representantes liberales deberán acatar la disciplina de voto y oponerse cuando la propuesta sea votada en el Parlamento australiano.
El pronunciamiento de Abbott viene a «poner orden» entre los liberales, que no tienen una posición tan monolítica sobre el tema como la que Abbott preconiza. En abril de este año, por ejemplo, recogíamos como Campbell Newman, líder de los liberales en el estado de Queensland, se mostraba a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo. De hecho, tras la decisión tomada por los laboristas, no han faltado voces entre los liberales pidiendo también que se permita el voto en conciencia a sus representantes (como la del senador Simon Birmingham).
Si finalmente los representantes del Partido Liberal (que constituyen el grueso de la coalición liberal-conservadora que alterna en el poder con los laboristas) acatan la orden, la aprobación del matrimonio entre personas del mismo sexo se antoja realmente complicada, dado que los representantes laboristas, que disponen de una mayoría exigua, están divididos sobre el tema, y ello pese a que que el reciente congreso laborista se pronunció a favor del matrimonio igualitario. El congreso laborista, sin embargo, también admitió la propuesta de la primera ministra, Julia Gillard (una ferviente opositora al derecho de las parejas del mismo sexo a contraer matrimonio) de dar libertad de voto a sus representantes. Una cesión al sector más conservador del partido que amenaza con impedir la aprobación de una reforma que según las encuestas cuenta con un apoyo mayoritario de los australianos. El sector más progresista, por el contrario, defendía que el voto en conciencia debe reservarse para aspectos relacionados con la vida y la muerte, como el aborto, la eutanasia o la investigación con células madre, pero no para una cuestión de derechos civiles fundamentales.
Pese a todo, algunos miembros del sector conservador de los laboristas se muestran todavía descontentos. Es el caso de Loree Rudd, la hermana del ex primer ministro y actual ministro de Asuntos Exteriores Kevin Rudd, que ha abandonado su militancia laborista como protesta. «No puedo trabajar para un partido que apoya que los homosexuales se casen», ha declarado.
Una discusión en marcha
La discusión acerca del matrimonio igualitario en el Parlamento australiano quedó garantizada tras las últimas elecciones gracias a los Verdes, cuyo único diputado en la Cámara de Representantes resulta vital para la formación de la mayoría que sostiene al Gobierno laborista (en su momento el diputado ecologista, Adam Bandt, exigió que al menos el tema se votase).
Ahora, una vez que a nivel federal los laboristas han decidido asumir como propia esa reivindicación (si bien permitiendo libertad de voto) ya se ha anunciado la presentación de al menos tres iniciativas, que se votarán en 2012. Dos en la Cámara de Representantes (promovida por los laboristas y por el diputado verde) y otra en el Senado, promovida por los Verdes. Fue en esta última cámara en la que, en febrero de 2010, laboristas (a los que entonces no se les permitió votar en conciencia) y liberal-conservadores derrotaron otra iniciativa a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo, también presentada por los Verdes. El resultado fue de 45 a 5, si bien 26 senadores se ausentaron por no estar de acuerdo con la postura de sus partidos. Conviene tener en cuenta que la fuerza de los Verdes es ahora mucho mayor (disponen de 9 senadores, frente a 34 liberal-conservadores, 31 laboristas y 2 independientes).
Otras vías, también abiertas
El congreso laborista decidió también poner fin a los impedimentos legales que las autoridades australianas ponían a aquellos ciudadanos de su país que deseaban contraer matrimonio en el extranjero, a los que se les denegaba el correspondiente documento certificando que no estaban casados en Australia. De hecho, hace pocos días el Gobierno cumplió dicha promesa y eliminó por fin la prohibición de expedir dichos certificados. Es previsible que pronto se empiece a solicitar el reconocimiento de estos matrimonios (el político laborista gay Ian Hunter, por ejemplo, anunciaba en julio su intención de casarse en Nueva York e iniciar un proceso de este tipo).
No debemos dejar de mencionar que recientemente ha sido aprobada una ley que puede tener gran transcendencia. Por iniciativa de los Verdes, y con apoyo de los laboristas, a partir de ahora el Gobierno federal no podrá vetar la aprobación de leyes por algunos territorios australianos. Uno de esos territorios es Canberra, la capital federal, en los cuales habría mayoría más que suficiente para aprobar una ley de matrimonio entre personas del mismo sexo si se decidiera abrir esa vía.
Tengo la sensación de que Australia va a seguir el camino tomado en EEUU y México, aprobación estado por estado. En Canadá empezó siendo así, pero en el 2005 quedó generalizado para todo el país.
Madre mia….despues estos nos llaman tercermundistas a nosotros…
Si estos dignos liberales (lo de dignos con ironia) votan monoliticamente en contra no habra ninguna posibilidad….porque habra transfugas en el partido laborista que tambien votaran en contra. por tanto no matrimonio igualitario en Australia.
Pues espero que tenga muchas Celias Villalobos entre sus filas aunque aquí estuvo solita frente al voto que impuso su partido. Por dos veces.
Yo confío que haya un voto favorable en el Senado, aunque se habla de hasta 10 senadores laboristas que podrían votar en contra, pero dentro de unos meses la tendencia debe ser que su número se recorte, son elegidos en listas, no en circunscripciones uninominales y el partido tiene un papel mucho más activo en elegirlos candidatos. Al menos un senador independiente está a favor, y quedan otros 21 senadores laboristas, con los 9 verdes hacen 31 votos. Siempre puede haber una inaplazable necesidad de ir al baño a la hora de la votación entre un cierto número de senadores liberales…son humanos, esas cosas pasan 🙂
¡Coño! Este tío, por mucho que se llame Tony y se apellide Abbot, no es australiano: ¡es españistaní! ¡Es de los «libegales» de aquí!
En cualquier caso, aunque Abbott y su «Gabinete en la Sombra» se han pronunciado, el senador Birmingham ya ha manifestado que piensa volver a abogar por el voto en conciencia cuando se reuna todo el grupo de legisladores liberales a deliberar sobre la cuestión:
http://www.news.com.au/breaking-news/senator-wants-liberal-vote-on-gay-marriage/story-e6frfku0-1226221600713
Al parecer, el «voto en conciencia» responde a una larga tradición dentro del Partido Liberal:
http://www.smh.com.au/national/liberals-vow-to-fight-for-conscience-vote-20111214-1ouz1.html
Y parece que la contestación a Abbott se extiende..
http://www.theaustralian.com.au/national-affairs/liberals-defy-abbott-on-same-sex-marriage/story-fn59niix-1226222322814