Sudáfrica: el rey zulú tacha a los homosexuales de «podridos» y se escuda luego en un supuesto error de traducción

Goodwill Zwelithini kaBhekuzulu, rey de la nación zulú bajo la constitución sudafricana, realizó la semana pasada unos insultantes comentarios sobre las relaciones entre personas del mismo sexo. Ante el revuelo causado, su casa real salió al paso para desmentirlos, achacando el supuesto malentendido a una «traducción imprudente«.

Los hechos se produjeron el día en el que la organización Human Rights Watch dio a conocer su informe anual sobre los derechos LGTB en África. Zwelithini declaró entonces que, tradicionalmente, «la gente no formaba una relación con una persona de su mismo sexo«. «No había nada de eso y si lo haces, debes saber que estás podrido«, manifestó. El monarca (que tiene un papel ceremonial pero una gran capacidad de influencia social) añadió que las relaciones homosexuales no son aceptables. «No me importa lo que tú sientas al respecto«, remachó.

Tras divulgarse las declaraciones, la casa real zulú lamentó que se hubieran traducido mal las palabras de Zwelithini. Según ellos, el rey solo había expresado su preocupación por el declive moral que se refleja en el aumento de los casos de abusos sexuales, incluidas las violaciones de hombres por otros hombres. El príncipe Mbonisi Zulu afirmó que «en ningún caso condenó Su Majestad las relaciones entre personas del mismo sexo«.

La Comisión sudafricana de Derechos Humanos afirmó haber conseguido una transcripción del discurso del rey, que utilizarán para poner en marcha una investigación sobre su contenido. Según su portavoz, Vincent Moaga, le pedirán al mismo una retractación si realmente llevó a cabo dichas declaraciones, que podrían constituir un delito de incitación al odio. También se han dirigido al presidente del país, Jacob Zuma, perteneciente a la etnia zulú y que ha aparecido en numerosos actos públicos con Zwelithini. En el mismo evento en el que el rey pronunció sus insultantes comentarios, Zuma se refirió en su discurso a los retos que afronta Sudáfrica para construir «una nación que no discrimina a los demás por su color o su orientación sexual«. Se trataría de un cierto cambio en la actitud del presidente, que afirmó que el matrimonio entre personas del mismo sexo, vigente en el país desde 2006, es «una desgracia para la nación y para Dios«.

Lo cierto es que la situación de las personas LGTB en Sudáfrica, a pesar del avanzado marco legislativo, sigue siendo muy complicada. Basta recordar los casos de «violaciones correctivas» de lesbianas sobre los que hemos informado en dosmanzanas, como el de mayo del año pasado, o, más recientemente, la alarma despertada en Johannesburgo ante la muerte de cuatro hombres gays en circunstancias parecidas, que hacen temer un móvil homófobo.