Homofobia y transfobia serán agravantes en el Código Penal de la República de Georgia
El Presidente de la República de Georgia, Mikheil Saakashvili, ha sancionado la enmienda al Código Penal aprobada por el Parlamento de ese país que considera agravante que un crimen se cometa por razones de odio hómofobo o tránsfobo. Sin duda, un soplo de aire fresco desde un área, la exsoviética, de la que últimamente no nos llegan buenas noticias.
El Código Penal de Georgia incluirá explícitamente la orientación sexual y la identidad de género en la lista de circunstancias merecedoras de esta protección, al igual que la raza, el color de la piel, la lengua o la religión, entre otras. El Parlamento del país caucásico ha admitido, en este caso, la propuesta conjunta que hicieron LGBT Georgia y la Asociación de Abogados Jóvenes de Georgia, después de que el primer borrador del proyecto, elaborado como respuesta a las recomendaciones de la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI, un organismo dependiente del Consejo de Europa) no las incluyera.
«LGBT Georgia saluda la decisión del Presidente Mikheil Saakashvili y expresa su esperanza de que se acometa la implementación práctica de la enmienda», han expresado desde dicha organización.
Sin duda, un importante avance legislativo en un país en el que la homofobia social, azuzada además por la iglesia ortodoxa georgiana, es por desgracia intensa. Hechos como el sucedido hace varios meses, cuando tres turistas alemanes fueron agredidos por besarse en público, ponen de manifiesto que la situación no es precisamente fácil para las personas LGTB, y ello a pesar de que Georgia es a día de hoy el país del Cáucaso cuya legislación más claramente protege contra su discriminación.