Medios afines al PP dan por hecho que la cirugía de reasignación de las personas transexuales será victima de los recortes
El pasado lunes, tras la mala acogida de los mercados al proyecto de Presupuestos Generales de Estado, que disparaba las alarmas sobre una posible intervención europea, el Gobierno español improvisaba un recorte de 10.000 millones de euros adicionales en materia de Sanidad y Educación. Un recorte adicional anunciado a través de una nota de prensa y sobre el cual a día de hoy siguen sin conocerse los detalles. Mientras tanto, medios de comunicación conservadores calientan el ambiente «anunciando» que entre los posibles recortes se encuentra la cirugía de reasignación de las personas transexuales.
Especialmente batallador se muestra el grupo Intereconomía, propiedad de Julio Ariza, exdiputado del PP en el Parlamento catalán. El martes el diario La Gaceta lo daba por hecho al anunciar el recorte en portada utilizando precisamente el titular «Cambios de sexo, fecundaciones in vitro y vasectomías no serán gratuitas». La letra pequeña del artículo se limitaba a asegurar que «en la cuerda floja» estaban «desde operaciones de cambio de sexo (con un coste por intervención valorado en 30.000 euros) a tratamientos de inseminación artificial (900 euros) o cirugías estéticas (como la de varices, 3.000 euros). Algunos de estos procedimientos son costeados a nivel nacional y otros sólo en determinadas autonomías».
Este jueves La Gaceta continuaba con su campaña, recurriendo ahora a las opiniones del presidente de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE), Jaume Masià, y del presidente de su fundación docente, Ezequiel Rodríguez. «En opinión de estos expertos, dado el elevado precio de las intervenciones de cambio de sexo -valorado en cerca de 30.000 euros- y el escaso número de población a quien afecta es ‘normal’ que salgan de la cartera gratuita de servicios. Hasta ahora, Andalucía, Madrid, País Vasco, Asturias, Extremadura y Cataluña financian la totalidad de este tipo de operaciones», argumenta el artículo. «Ahora que hay poco dinero, los cirujanos tenemos que estar para toda la población y no para un grupo concreto», habría llegado a declarar Ezequiel Rodríguez.
El diario del Grupo Intereconomía (al que esta semana un alcalde «popular» de un pueblo de Ávila ha decidido honrar otorgándole el nombre de una calle) no es sin embargo el único que ha planteado esta posibilidad. Otros diarios conservadores, también muy próximos al PP, lo han hecho también. Es el caso de ABC, aunque de forma más matizada. «Operaciones de cambio de sexo, vasectomías y tratamientos de fertilidad. Estos tratamientos, considerados no esenciales, se seguirán financiando, al menos en la propuesta del Ministerio de Sanidad, pero se vigilarán con lupa», afirma. El País, sin embargo, cree que los recortes no irán por esa línea. «Se podría pensar en suprimir algunos tratamientos que dentro del PP están muy cuestionados, como la interrupción del embarazo o, como ya sugirió el PP en la campaña catalana, la cirugía de adecuación de los transexuales. Lo malo, desde un punto de vista financiero, es que estas intervenciones no son muy caras. Y, por lo tanto, ahorrarían poco. Con los 100.000 abortos se podría dejar de gastar unos 50 millones. Con el tratamiento de la transexualidad, menos aún, porque son muy pocos», afirma el periodista Emilio de Benito, especialista en temas sanitarios y LGTB.
Ceremonia de la confusión
Lo cierto es que a día de hoy nadie sabe qué se recortara. Reina la ceremonia de la confusión, y cada día un responsable político del PP (Luis de Guindos, Cristóbal Montoro, Esperanza Aguirre, María Dolores de Cospedal…) se pronuncia de forma distinta sobre el futuro de nuestro Sistema Nacional de Salud. Por otra parte, los recortes en Sanidad deberían ser pactados con las Comunidades Autónomas, que son las que tienen competencias en la materia (el próximo Consejo Interterritorial de Salud, en el que se podrían pactar ciertas medidas, se celebrará el 18 de abril). Por lo que a la cirugía de reasignación se refiere, además, ni siquiera forma parte de la Cartera de Servicios Comunes del Sistema Nacional de Salud, sino que cada comunidad decide si la financia o no y en qué condiciones (sea en centros de su propia comunidad o derivando a centros de referencia de otras comunidades).
En cualquier caso, más allá del lamentable espectáculo de improvisación y frivolidad que los responsables políticos están ofreciendo sobre el tema, sobre todo si se tiene en cuenta lo ridículo del ahorro que supondría la supresión de esta prestación (solo unas pocas decenas de personas se acogen a ella cada año), resulta obsceno que se juegue de esta forma con un colectivo, el de las personas transexuales, que se encuentran en una situación especialmente precaria y vulnerable. Es por ello que desde dosmanzanas os invitamos a sumaros a la petición que el artista y activiista Shangay Lily ha promovido en la plataforma actuable para que se mantenga esta prestación.
Esta noticia demuestra que los recortes que está haciendo el PP tienen todo el tufo ideológico de la derecha más rancia, reaccionaria y antidemocrática. Recortamos servicios sociales, laborales y sanitarios a quienes no piensan como nosotros o a quienes nosotros consideramos no dignos de recibir ayudas o asistencia médica. ¡Toma ya! Con la excusa de la crisis, el PP está haciendo su agosto para castigar a transexuales, mujeres -y de ellas muchas lesbianas- que acuden a la inseminación o a abortar, o sea, de nuestro LGTB, ya están perjudicando -de momento- a la L y a la T. Si no se lo impedimos, luego vendrán la G y la B. Tiempo al tiempo.
Considerar algo «no esencial» la reasignacion de sexo demuestra una gran ignorancia, si no fuera esencial no habría tantos suicidios entre estas personas. Tremenda falacia la del presidente del SECPRE, los cirujanos tendrán que estar para todo aquel que lo necesite, sea del grupo y condición que sea.
Conversación escuchada ayer:
A: ¡Claro! Y ahora me tocará pagar a mí un cambio de sexo. ¡Si quieres un cambio de sexo, págatelo tú!
B: Es lo que tiene el Estado social.
Conversación entre dos hombres que piensan haberse hecho a sí mismos pero que en realidad son tan pobres y tan trabajadores como el resto.
No entiendo luego cómo pueden pensar que un gobierno les va a encontrar trabajo, si en realidad la culpa de tener un trabajo precario no es probablemente una situación de explotación, de desigualdad, sino un error en sus propias decisiones. – Pensarán ellos -.
A mí me parece esencial que la Seguridad Social cubra las operaciones de reasignación de sexo. Es esencial para una persona transexual. Básico. Les va la vida en ello.
Políticamente es hasta brillante pedir algo que nadie se habría imaginado en otra época. De ahí que la gente ande tan escandalizada.
Ahora que hay poco dinero, los cirujanos tenemos que estar para toda la población y no para un grupo concreto.
Como dicen por arriba, ¡vaya falacia! ¿Qué pasa con todos los enfermos con enfermedades raras que requieren mayor atención? (¿Qué incidencia tienen en la población?) ¿Dejamos a los enfermos crónicos morir porque suponen mucho gasto para el sistema?
¿No se le puede dar la vuelta al razonamiento y pensar (como se apunta) que precisamente porque es una cirugía poco demandada, el coste no será alto?
Ha costado mucho trabajo que cale la idea de que un hijo puede ser LGB y feliz.
¿Cuándo vamos a empezar a pensar en los transexuales? (Y no lo veo con compasión, lo veo como exigencia.)
Supongo, por supuesto, que el criterio es exclusivamente presupuestario y sanitario, ¿verdad?
Es asquerosa la fijación de Intereconomía con los LGBT, os dejo la imagen de la portada de La gaceta:
http://img.kiosko.net/2012/04/10/es/la_gaceta.750.jpg
¡Qué manía tienen con repetir la mentira de que los servicios públicos son gratuitos y el ‘café gratis para todos’!
(Me refiero a la portada de La Gaceta)
¿Qué café y gratis dónde? ¡Que no! ¡Que los pagamos entre todos y en beneficio propio! ¡Como si no les encantase a nuestros políticos manejar con su criterio esas partidas que provienen de los impuestos!
Que los servicios públicos ni tienen por qué estar gestionados por voluntarios, ni son gratis, ni tenemos que agradecer a ningún político que gestione ese dinero, ni que se construya un hospital, ni que se abra un colegio… Sí, ‘se abra’ y ‘se construya’ en impersonal. Porque es nuestro dinero.
¡A ver cuándo se muere de una vez la idea en nuestras cabezas de la política de autor! ¡Que no nos están regalando nada!
¿De qué ‘progresividad’ me hablan? ¡Repago!
Es necesario ir todos a una con las personas transexuales.
Son, por desgracia, el eslabón más débil del colectivo LGTB. No es raro que se atrevan con ellos los primeros. Luego irán a los otros, a menos que desde ya nos pongamos firmes.
Recordemos, «Primero fueron a por los judíos…» (cito de memoria, perdón si equivoco el orden)
Puestos a recortar, ¿por qué no eliminan el tabaco?
Contradictorio dixit.