Alto cargo de la UEFA asiste a recepción LGTB de Eurocopa 2012
Patrick Gasser, que dirige la sección de la UEFA sobre fútbol y responsabilidad social, asistió este martes a una recepción LGTB en Donetsk (Ucrania), donde hizo énfasis en el compromiso de su organización en la lucha contra la homofobia. La recepción fue organizada por la activista lesbiana Claire Dimyon, y contó con la asistencia de seguidores de las selecciones de fútbol de España, Francia, Portugal y Austria. El objetivo consistía en brindar por el Día del Orgullo LGTB y el de la Independencia de Ucrania, que se celebra también el 28 de junio.
Gasser declaró estar allí “para confirmar el compromiso de la UEFA [la Unión de Asociaciones de Fútbol Europeas y organismo organizador de la Eurocopa 2012] en la lucha contra toda forma de discriminación, contra la homofobia y el racismo”, y se mostró “encantado de participar en una celebración especial del Orgullo”. Por su parte, Dimyon quiso enviar un “mensaje de amor, esperanza y apoyo” a todas las personas LGTB de Ucrania -especialmente a aquellos que no hablan inglés o no disponen de una conexión a internet- para dejarles claro que no están solos. También quiso recordar los ataques sufridos hace un mes por los organizadores del Orgullo de Kiev, Svyatoslav Sheremet y Taras Karasiychuk. Dimyon ha pasado las últimas semanas visitando activistas LGTB y haciendo visible la bandera del arco iris en partidos y eventos de la Eurocopa, “bajo la protección de seguidores de los Paises Bajos, Suecia, Francia y España”.
Lo cierto es que los activistas LGTB tienen una ardua tarea por delante en Ucrania, país que ocupa uno de los últimos lugares en Europa en materia de derechos LGTB, y donde la situación no solo no mejora, sino que ha empeorado notablemente en los últimos meses: los diputados ucranios han dado su visto bueno a la tramitación de una proposición de ley que pretende prohibir la llamada “propaganda homosexual”.
Recientemente, además, el copresidente del consejo de organizaciones LGTB ucranias, Andriy Maimulakhin, denunció que una coalición de ultranacionalistas radicales, organizaciones cristianas y los llamados “cosacos” prorrusos había lanzado una auténtica campaña homófoba sin precedentes en el país. Ante esta situación Amnistía Internacional llegó a desaconsejar a gays y minorías étnicas viajar al país con motivo de la Eurocopa. Según declaró Max Tucker, representante de dicha organización, tal y como están las cosas “los aficionados que visiten la Eurocopa 2012 están bajo amenaza” no solo de ultranacionalistas y hooligans sino también “de una fuerza policial criminal“.