Llevan a los tribunales la legislación irlandesa que prohíbe el matrimonio entre personas del mismo sexo
La pareja formada por Katherine Zappone y Ann Louise Gilligan han anunciado su intención de llevar a los tribunales de Irlanda la legislación vigente en este país, que excluye a las parejas del mismo sexo del acceso al matrimonio. Las dos mujeres, que se casaron en Canadá en 2003, llevan desde entonces luchando porque su matrimonio sea reconocido en Irlanda.
La pareja recurrió al Alto Tribunal de Irlanda en noviembre de 2004, con el objetivo de que les reconociera el derecho a presentar la declaración de la renta conjunta. Tras ver denegada su petición, recurrieron al Tribunal Supremo en 2007. Ahora han decidido dejar aparcada esta vía para dirigirse de nuevo al Alto Tribunal contra la ley de uniones civiles vigente en el país desde comienzos del año pasado.
Zappone, que además es senadora independiente, ha declarado haberse dado cuenta de que «aunque tuviéramos éxito en nuestro primer caso» las disposiciones de las leyes actuales seguirían en vigor, por lo que resultaba «imperativa» la acción que acaban de llevar a cabo. El Alto Tribunal deberá ahora decidir si la Ley de Registro Civil de 2004, que define matrimonio como unión de hombre y mujer y la Ley de Uniones Civiles, que prohíbe a las parejas que hagan uso de la misma contraer matrimonio, se ajustan a los artículos de la constitución que consagran la igualdad ante la ley.
Introducen ley de «nuevos derechos humanos»
Por otra parte, recientemente hemos sabido también que el gobierno irlandés (formado por una coalición entre los conservadores del Fine Gael y los laboristas) ha presentado un proyecto de ley para ampliar la protección de los derechos humanos que podría tener consecuencias muy positivas para la población LGTB. La definición de «derechos humanos» se cambiará por «derechos humanos nuevos y emergentes» para incluir explícitamente las necesidades de las personas LGTB y se creará la Comisión Irlandesa de Derechos Humanos e Igualdad para garantizar su aplicación.
En opinión de Brian Sheehan, director de la Red de Igualdad de Gays y Lesbianas en Irlanda, la nueva legislación podría facilitar la protección a los menores LGTB en los centros educativos e incluso abrir la puerta al matrimonio igualitario en el país. Algo a lo que, por cierto, ya se ha mostrado a favor el principal partido de la oposición y gobernante durante 61 años, el liberal-conservador Fianna Fáil. El 73% de los irlandeses, según una encuesta de enero de este año, se muestra a favor de que la constitución recoja la igualdad en el acceso al matrimonio.
Cambio de tema. El presidente del Tribunal Supremo de España, Carlos Dívar, está en el centro de un escándalo por corrupción. Realizó unos veinte viajes a Marbella y pagó con dinero público cenas, en sábado por la noche en restaurantes de lujo, que, según él, eran por motivos laborales. A pesar de ser parte de su trabajo se ha negado a revelar el nombre de la persona que le acompañaba en esas cenas.
En estos momentos todo el mundo conoce quién es ese acompañante y algunos periodistas escriben frases como «cenas románticas», «misterioso acompañante», etc. Muy listo no es Dívar cuando le concedió a ese acompañante ¡la cruz al mérito policial! solo por acompañarle, el compañero de cenas de lujo es su jefe de escoltas.
Si traigo esto aquí es porque este tipo es ultraconservador y ha escrito artículos en la revista de la «Hermandad del Valle de los Caídos» (que sería equivalente a una hermandad de la tumba de Hitler en Alemania) esto:
http://www.hermandaddelvalle.org/article.php?sid=3812
Además fue uno de los firmantes de la carta de bienvenida a Joseph Ratzinger por su visita a España que tuvo lugar en noviembre de 2010, en la que se criticaba al “relativismo” como “fuente inspiradora de iniciativas contrarias al derecho a la vida, a la familia y a los derechos de los padres como primeros responsables de la educación de sus hijos“.
Ya véis, irlanda, país tan supuestamente católico.
Esto demuestra una vez mas que una cosa es lo que predique el chamán de turno y otra, lo que piensen sus fieles.
Aunque tengo la sospecha de que los casos de maltratos de la iglesia irlandesa hacia menores también ha influido lo suyo en que la sociedad irlandesa se aleje de ellos.
http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/06/07/madrid/1339076542_969312.html
Si las demás comunidades autónomas no lo ofrecen, Madrid tampoco. La presidenta regional, Esperanza Aguirre, ha anunciado esta mañana que va a retirar de su cartera de servicios sanitaria todo lo que no aplique el Estado en el resto de comunidades. Ha puesto dos ejemplos de servicios por los que habrá que pagar: el cambio de sexo y la vacuna del neumococo. También dejará de financiar los tratamientos contra el tabaquismo.
Vamos los Paddies carajo!