Brutal agresión lesbófoba en Estados Unidos

Terrible agresión homófoba la que ha sufrido en Lincoln (Nebraska) una mujer lesbiana que fue atacada en su propia casa por tres enmascarados que la maniataron, le hicieron diversos cortes en la piel en forma de insultos lesbófobos y finalmente prendieron fuego a su casa. Cientos de personas han expresado su indignación participando en una vigilia en la que encendieron velas y se solidarizaron con la víctima.

La agresión resulta tan extremadamente violenta que cuesta creer que haya ocurrido en un país como Estados Unidos. Siempre según la versión de la víctima, cuya identidad permanece en el anonimato, tres hombres enmascarados irrumpieron en su casa este domingo. La maniataron y le provocaron cortes por todo el cuerpo, algunos de ellos en forma de insultos lesbófobos como «dyke», término vulgar usado tradicionalmente en inglés para referirse a una mujer lesbiana de forma despectiva. No contentos con eso, los agresores arrojaron gasolina en el suelo de su vivienda, a la que prendieron fuego. La mujer, desnuda y sangrando, puedo arrastrarse y escapar de la vivienda en llamas. Los agresores no han sido detenidos, al menos por el momento.

La agresión ha conmocionado la ciudad y ha desatado una ola de solidaridad materializada en una vigilia con velas a la que acudieron cientos de personas. Se da la circunstancia de que Lincoln ha vivido recientemente su propio debate sobre los derechos LGTB: la corporación municipal ha aprobado una normativa contra la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género en el acceso a la vivienda y el empleo, pero grupos homófobos han reunido ya suficientes firmas para llevar la medida a referéndum.

Cárcel e indemnización en otras dos agresiones homófobas

Precisamente estos días hemos conocido dos noticias positivas que tienen que ver con otras dos agresiones homófobas. Por un lado, tres jóvenes han sido condenados a cinco años de prisión por la brutal agresión cometida sobre otro joven gay, Brandon White, en Atlanta (Georgia), que además grabaron en vídeo y difundieron online como si de una heroicidad se tratase.

Por otro, un instituto de Chillicothe (Ohio) ha llegado a un acuerdo legal con Zach King, un adolescente gay de 15 años que fue agredido por otro compañero, agresión que también fue grabada y colgada en internet. Sufrió conmoción cerebral y pérdida de varios dientes. El agresor, también menor de edad, fue condenado a pasar 90 días en un centro de detención juvenil. King demandó además al instituto, con el asesoramiento de ACLU (American Civil Liberties Union). Finalmente el centro y el alumno han llegado a un acuerdo por el que el chico será indemnizado con 30.000 dólares. El centro queda a cambio liberado de su responsabilidad pero se compromete a reforzar de ahora en adelante sus políticas contra el acoso homofóbico.