La justicia de Irlanda del Norte determina que prohibir adoptar a las parejas del mismo sexo es discriminatorio
La Alta Corte de Belfast ha dictaminado que la prohibición de adoptar conjuntamente a las parejas del mismo sexo vigente en Irlanda del Norte es discriminatoria contra las parejas unidas civilmente y viola su derecho a formar una familia. El ministro de Salud de ese territorio ya ha anunciado su intención de recurrir la sentencia.
De los territorios que componen el Reino Unido (un estado plurinacional bajo una misma corona) Irlanda del Norte es, con diferencia, el que más atrasado está por lo que a los derechos LGTB se refiere. La ley de uniones civiles entre personas del mismo sexo vigente en Inglaterra, Gales y Escocia es válida allí, pero a diferencia de ellas Irlanda del Norte no permite a las parejas del mismo sexo adoptar.
Una discriminación que ya fue denunciada hace un año por la Comisión de Derechos Humanos de Irlanda del Norte, un organismo público independiente, que finalmente decidió recurrir a la justicia. Ahora la Alta Corte de Belfast le ha dado la razón en una sentencia saludada por los defensores de los derechos LGTB, que ven como Irlanda del Norte se iguala en este aspecto al resto del Reino Unido. O así puede ser cuando culmine el proceso, porque el ministro de Salud, el unionista Edwin Poots, ya ha anunciado su intención de recurrir la sentencia.
No se trata de la única regulación discriminatoria vigente en Irlanda del Norte, que por ejemplo sigue sin permitir a los gays donar sangre (a diferencia, también, de Inglaterra, Gales y Escocia, que decidieron hace un año levantar la prohibición). También fue Edwin Poots, por cierto, el que lo defendió.
Curiosamente, hace pocos más de dos semanas la Asamblea de Irlanda de Norte rechazaba, por 50 votos contra 45, una moción a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo presentada por el Sinn Féin y los Verdes. La propuesta contó con el apoyo unánime de los nacionalistas que representan a la población católica, mientras que la gran mayoría de los unionistas (los partidarios de mantener Irlanda del Norte en el Reino Unido) se opuso. Todo apunta a que Irlanda del Norte, desgraciadamente, mantendrá también la prohibición del matrimonio igualitario pese a que tanto Escocia por un lado como Inglaterra y Gales por otro han puesto ya en marcha procesos parlamentarios de aprobación del mismo.