La presidenta de Malawi da marcha atrás y no despenalizará la homosexualidad
Malas noticias desde África: la presidenta de Malawi, Joyce Banda, ha dado marcha atrás en su intención expresa de derogar las leyes que persiguen la homosexualidad en el país. La decisión se debe, según ella, a la opinión contraria de la población.
Joyce Banda, elegida vicepresidenta en 2009, ascendió a la presidencia de Malawi el pasado 7 de abril, tras el fallecimiento del anterior presidente, Bingu wa Mutharika. La nueva presidenta se comprometió, en su primer debate sobre el estado de la nación, a hacer efectivo lo que ya en diciembre adelantó el ministro de Justicia, Ephraim Chiume, que se refería a las leyes que persiguen la homosexualidad como parte de una lista de leyes que su país tenía previsto revisar de acuerdo al estado de la “opinión pública”.
Un estado de opinión que, según la presidenta, no es el más favorable para acabar con la criminalización de la actividad sexual entre personas del mismo sexo: “Los malauíes no están ahora mismo preparados para enfrentarse a eso”, se justificó Banda en Nueva York, tras hablar ante las Naciones Unidas. “Como líder, no tengo el derecho a influir en los sentimientos de la gente”, explicó, para reconocer que “Malawi y la mayoría de los países africanos quizá están como estaban Estados Unidos o el Reino Unido hace 100 años”.
Según Banda, la comunidad internacional debería “permitir a cada país seguir su camino” y “debatir libremente” sin presiones, en referencia precisamente al Reino Unido, cuyo Gobierno anunció la retirada de la ayuda económica a aquellos países que mantengan políticas de carácter homófobo; y a Estados Unidos, cuya secretaria de Estado, Hillary Clinton, anunció en un histórico discurso ante Naciones Unidas que su país redoblaría los esfuerzos para luchar contra la persecución y la discriminación de las personas por su orientación sexual o su identidad de género en cualquier lugar del mundo.
Recordamos que Malawi estuvo en la primera plana de la actualidad LGTB internacional en 2010 debido al humillante juicio a Steven Monjenza y Tiwonge Chimbalanga, una pareja que fue acusada de actos “contra natura e indecencia grave”. Una historia que en su momento seguimos con detalle y que acabó con la concesión del perdón presidencial tras una fuerte presión internacional, si bien la pareja no soportó la presión y acabo rompiendo su relación. Meses después, el pequeño país africano incluso endureció su legislación homófoba para castigar la homosexualidad femenina, que hasta entonces no era considerada delito.
Si no se pudiera influir en la gente desde el liderazgo, entonces las leyes que le han permitido a ella, una mujer, participar activamente en la vida política no hubieran existido nunca.
SINVERGÜENZA !!!
Señora, las leyes son para TODOS, no para unos pocos que impongan «su» ley sobre los demás. A ver si hacemos más y nos dejamos de pantomimas. Que como muy acertadamente escribió el comentario nº 1, sin cambios en las leyes usted estaría en casa con la pata quebrada.