Acuerdo para aprobar una ley de matrimonio igualitario en la capital federal de Australia
Tras el fracaso de la iniciativa para aprobar el matrimonio entre personas del mismo sexo a nivel federal, los partidarios de la igualdad en Australia trasladan el campo de batalla a sus estados y territorios. Verdes y laboristas han llegado ya a un acuerdo para aprobar el matrimonio igualitario en el Territorio de la Capital Australiana (ACT), en el que se localiza Canberra, la capital federal.
La férrea disciplina de voto entre los liberal-conservadores y la división de los laboristas en el Parlamento federal dieron al traste con la esperanza de que los ciudadanos homosexuales y bisexuales de ese país vieran reconocida su plena igualdad jurídica en el acceso al matrimonio a nivel federal. Con ello la lucha se desplazó hacia los estados y territorios federados, a los que ya nada impide aprobar por su cuenta leyes propias (una situación similar a la existente, por ejemplo, en Estados Unidos).
El pacto sobre el matrimonio igualitario en Canberra forma parte de un amplio acuerdo de cien puntos alcanzado entre Verdes y laboristas que asegura una mayoría de progreso tras el empate entre laboristas y liberales en las recientes elecciones de octubre (con 8 escaños cada uno). El único escaño verde es, por tanto, el que desempata (la Asamblea Legislativa del ACT tiene 17 escaños). Otros acuerdos alcanzados suponen un impulso a las políticas de vivienda pública y a las energías renovables, que antes de 2020 deben suponer el 90% del suministro energético de la capital australiana.
El acuerdo sido celebrado por Australian Marriage Equality. «Si el ACT se convierte en el primer lugar de Australia en permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo, ello le aportará beneficios sociales y económicos y supondrá una inmensa presión sobre los estados y la Commonwealth [el nivel federal] para seguirlo», ha declarado su coordinador nacional, Rodney Croome.
Derrrota en Tasmania, por poco
El acuerdo en Canberra se produce después de que a finales de septiembre, tras un apasionado debate, la cámara alta del Parlamento de Tasmania rechazara por 8 votos contra 6 el proyecto de ley de matrimonio igualitario que ya había sido aprobado por la cámara baja y que contaba con el apoyo del Gobierno laborista del estado.
En la cámara alta del Parlamento de Tasmania los independientes son mayoría, lo que hizo impredecible el resultado hasta el último momento. Finalmente dos votos impidieron a Tasmania convertirse en el primer estado de Australia en permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Otros estados y territorios
Pero hay más candidatos a aprobar leyes de matrimonio igualitario. Los Verdes ya presentaron en febrero un proyecto de ley en Australia Meridional, cuyo jefe de Gobierno laborista le ha dado su apoyo (si bien los diputados laboristas tendrán libertad de voto para decidir).
Los Verdes también han presentado proyectos en Victoria (cuyo Partido Laborista se posicionó a favor del matrimonio igualitario en 2009) y en Australia Occidental, aunque en estos estados su mayoría parlamentaria liberal-conservadora hace muy complicada su aprobación. También en Nueva Gales del Sur se prepara un proyecto, y aunque también aquí gobierna el centro-derecha en este caso parece ya seguro que los diputados liberales dispondrán de libertad de voto, lo que aumenta las posibilidades de éxito. En el Territorio del Norte, finalmente, los laboristas (que también controlan el Gobierno) se han comprometido a dar libertad de voto a sus diputados si se presenta un proyecto de ley en ese sentido.
Llama la atención que en Australia Meridional, estado en el que las posibilidades de triunfo parecen elevadas, el diputado independiente Bob Such haya introducido recientemente un proyecto de ley de uniones civiles abierto a todas las parejas, tanto homosexuales como heterosexuales. Such ha declarado que su propuesta esta dirigida a todas aquellas parejas que busquen una alternativa al matrimonio, afirmando no estar en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo. No obstante, desde Australian Marriage Equality ya han advertido que la propuesta podría constituir una distracción y desviar energías del objetivo más importante: una legislación que introduzca el matrimonio igualitario en este estado del sur de Australia.