Cientos de miles de personas se manifiestan en París contra el matrimonio igualitario
La manifestación convocada en París para este domingo 13 de enero por los opositores al proyecto de ley de matrimonio igualitario se ha desarrollado sin incidentes remarcables. Cuatro columnas de manifestantes partían de distintos puntos de la ciudad, cada una respondiendo a una convocatoria distinta. Según la Prefectura de Policía parisiense, los contrarios al proyecto de ley han conseguido reunir a 340.000 personas, mientras que los organizadores de la manifestación dan una cifra total de 800.000. La participación supera la que obtuvo la anterior convocatoria, que en París fue secundada por 70.000 personas (200.000 según los organizadores).
Tres de las columnas de manifestantes terminaron su recorrido en el Campo de Marte, a los pies de la Torre Eiffel. La cuarta, convocada por grupos de extrema derecha y la organización ultracatólica Civitas, desembocó en la Plaza de los Inválidos. Los manifestantes portaban globos rosas, blancos y azules, y coreaban consignas como “un padre, una madre, es elemental”, “los papás y las mamás bajan a la calle a defender el matrimonio” o “todos nacidos de un hombre y una mujer».
En las diversas columnas se encontraban representantes de la UMP (Unión por un Movimiento Popular, el partido del expresidente Sarkozy), la UDI (Unión de Demócratas e Independientes, agrupación de partidos de centroderecha), el Frente Nacional o hasta diez obispos católicos. Uno de ellos era el arzobispo de Lyon, Philippe Barbarin, que ofrecía las siguientes declaraciones: “este Parlamento ha decidido cambiar el significado de la palabra matrimonio. Es muy violento para la gente que le cambien el significado de una palabra”. También estuvo presente el arzobispo de París y presidente de la Conferencia Episcopal, André Vingt-Trois, que quiso prestar su apoyo a los manifestantes, afirmando además que esperaba que “los políticos hagan trabajar su imaginación para poner en marcha fórmulas que satisfagan la resolución de situaciones complicadas sin que por ello se transforme el matrimonio”.
El presidente de la UMP, Jean-François Copé, resumía su postura de la siguiente manera: “François Hollande quiere imponer una reforma con fórceps, pisoteando la posibilidad de un debate. Es peligroso ver cómo se impone una reforma así contra todo y contra todos”. Más polémicas han sido las declaraciones de Xavier Bongibault, del movimiento “Plus gay sans mariage” (homosexuales contrarios al matrimonio igualitario), que ha comparado a François Hollande con “un hombre que Alemania conoció muy bien a partir de 1933”, en clara referencia a Hitler, tachando de “lógica homófoba” el que, en su opinión, “el Gobierno pretenda que todos los homosexuales están de acuerdo con esta ley por ser homosexuales”.
El objetivo de los convocantes era igualar la participación que en 1984 obtuvo la manifestación en contra del proyecto de ley de reforma de la enseñanza privada, presentado por el entonces presidente Miterrand. En aquella ocasión lograron reunir un total de entre 850.000 y 1.500.000 de manifestantes, y consiguieron que el proyecto de ley fuera retirado.
Reacción del Gobierno y el Partido Socialista
El secretario general de los socialistas, Harlem Désir, ha declarado que “el Partido Socialista irá hasta el final en esta reforma progresista que los franceses desean (…) el derecho a manifestarse está garantizado en nuestro país, pero debo recordar la completa determinación de los socialistas de inscribir en la ley el derecho de todos los que se aman a casarse y a adoptar.”
Desde el Elíseo, la presidencia de la República ha comunicado lo siguiente: “La manifestación, según imágenes y cifras que deben ser confirmadas, es consistente y expresa una sensibilidad que merece respeto, pero que no modifica la voluntad del Gobierno de que haya un debate en el Parlamento que permita que se vote la ley”.
El proyecto de ley será sometido a votación en la Asamblea Nacional francesa el próximo 29 de enero. Los partidarios del proyecto de ley se manifestarán en París el próximo 27 de enero.
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Acerca del Author
Calibán
...así que despierto y lloro por seguir soñando.
La escasez racional y debilidad mental de los opositores rabiosos a NUESTROS derechos, se ve reflejada en 3 frases que pasarán a la posteridad…
«Es muy violento para la gente que le cambien el significado de una palabra» Philippe Barbarin, arzobispo de Lyon.
«François Hollande quiere imponer una reforma con fórceps, pisoteando la posibilidad de un debate» Jean-François Copé, presidente UMP
«El Gobierno pretenda que todos los homosexuales están de acuerdo con esta ley por ser homosexuales”» Xavier Bongibault, un triste homosexual que se cree el centro del universo y que si él no quiere casarse, que ningún otro gay lo haga porque «yo no estoy de acuerdo»… tan fácil que, si no se quiere casar, que no lo haga y punto. (Catapum, pssss!!)
Dicen los socialistas que no se dejarán amedrentar ante semejante bola de débiluchos mentales asalvajados. Vamos a ver si es cierto este 29 de Enero! Más les vale que así sea!
Una manifestación así de vergonzosa también la tuvimos que sufrir en España cuando se aprobó el matrimonio igualitario. Al final Francia no es ese país tan liberado y avanzado como muchos creíamos, al menos yo hace tiempo que dejé de pensar esto.
Quizá lo que pasa en Francia es lo que pasa en España, excesiva presencia del catolicismo en el país, aunque luego se les llene la boca a los franceses con eso del estado laico.
Yo no quería opinar, pero gracias a un compañero gay que da su punto de vista y que esta en contra de NUESTROS DERECHOS , le guste o no. le digo que si el no se quiere casar pues que no lo haga, muy su vida. pongo un ejemplo si yo no me quiero casar no le voy a prohibir a otro en ´poder hacerlo. se que hay homosexuales de derecha pero nunca me imagine que eran de derecha extremista ya falta poco para que estén de acurdo en pedir cárcel así como van estos homosexuales de derecha extremista.
Por cierto que bonito se ven todas la religiones unidas .no cabe duda , lo único que las une es el odio al diferente , al que no piensa igual y al que ni tiene los mismos gustos. ya ven que nos den la gracias por poder unir todos lo cleros religiosos.
Lamento informar al señor Bongibault que el matrimonio igualitario en Francia no solamente es apoyado por la inmensa mayoría de los gays sino tb por la mayoría de los heteros.
Tranquillité les enfants, el matrimonio igualitario se aprobará en la República Francesa. Lo que si es cierto, es que a François Hollande y compañía les está viniendo «de perlas» este debate para tapar los problemas que realmente tenemos aquí a nivel económico…
Y por concluir, solo dos cosas:
1) Copé puede decir, como diríamos aquí n’importe quoi (cualquier cosa). Ya hubo un debate en el parlamento y el Consejo Constitucional lo dijo muy claro. Debate terminado.
2) Bongibault tiene graves problemas psiquiátricos, y ganas de llamar la atención para hacerse famoso a cualquier precio. Lleva un par de meses que no para de salir a la palestra en todos los medios de comunicación que le invitan, y hace muy bien ese juego tan retrograda homofobo utilizando su propia condición sexual (y sus amaneramientos).
Qué pesadez con las manifestaciones y la manía de inflarlas hasta el absurdo…. Desde la manifa de la Diada hasta la manifa de los presos terroristas todo son exageraciones. Y esto no es una excepción.
Que rabien. A ver si les estalla una vena y cabemos a menos fachas por cabeza.
¿»Una sensibilidad que merece respeto»?
¿Cómo? ¿Por qué merece respeto tal sarta de estupideces?
Cuando aprenderá la gente que las ideas o las sensiblidades NO merecen ningún tipo de respeto.
Por reir un poco… Este video es de la líder de la movilización en contra del «mariage pour tous».
Voilà 😉
http://www.youtube.com/watch?v=gJlSTHOX4WU&feature=share
Encantador el vídeo, felino, para mi, desde ahora es el himno más representativo de la manifestación de ayer en París, no entiendo como es que no se pusieron todos a tararearlo y bailarlo durante el acto…público, se entiende… 🙂
Y ahora ya en serio, lo de ayer da mucho miedo, no recuerdo un acto tan masivo de repudio contra una minoría discriminada en Europa desde los tiempos que todos podéis imaginar. Ya tenemos crisis económica profunda en casi todo el continente (me temo que falta menos de un año para que sea palpable en los países que falta, y sospecho que allí la escalada mucho más fulminantes); la crisis política ya está operando en muchos países, y en los demás se perciben ya los signos de un profundo despego hacia la clase política, y además los arraigados sentimientos de hostilidad a las minorías «diferentes» se expresas de forma cada vez más clara y desinhibida. Ya tenemos todos los ingredientes preparados para que vengan a «salvarnos»…
Hace tiempo, un conocido me comentaba que si los homosexuales tenemos derecho a manifestarnos, también los homófobos deberían tener ese mismo privilegio. Bien, tal argumento es el mayor despropósito desde que Rajoy obtuvo la mayoría absoluta: es como decir que si los «hippies» o «perroflautas», como prefieren hoy llamar los medios neoliberales a aquellos con dos dedos de frente toman la calle en señal de protesta, los nazis deberían hacer lo mismo. No es una cuestión del «todo vale» y «tenemos que respetar las opiniones de cualquiera». Se respetan a las personas, JAMÁS a sus opiniones. Si no hubiéramos rechazado nada, jamás hubiéramos salido de las cavernas.
Las ideolgías válidas deben ser las únicas que tengan derecho a dar su voz. ¿Y qué es válido hoy en día? La libertad, la justicia, el derecho (y el deber) para TODOS sin distinción. La homofobia es una de las peores plagas a las que se ha enfrentado la humanidad de la que encima no existe «cura» si no se cambian los ideales ni se abre la mente. No hay peor ciego que el que no quiere ver, que aunque suene necio hablar con refranes siempre es más ilustrativo.
Es simplemente vergonzoso que la cuna de los derechos humanos, el modelo de constitución y la separación de poderes de cabida a una cabalgata de ideales que no llevan sino a la ignorancia y al comportamiento animal. Sólo espero que no sea más que una mancha de tantas en su historial y el proyecto vea la luz ignorando semejantes chaladuras.
Hace tiempo, un conocido me comentaba que si los homosexuales tenemos derecho a manifestarnos, también los homófobos deberían tener ese mismo privilegio. Bien, tal argumento es el mayor despropósito desde que Rajoy obtuvo la mayoría absoluta: es como decir que si los «hippies» o «perroflautas», como prefieren hoy llamar los medios neoliberales a aquellos con dos dedos de frente toman la calle en señal de protesta, los nazis deberían hacer lo mismo. No es una cuestión del «todo vale» y «tenemos que respetar las opiniones de cualquiera». Se respetan a las personas, JAMÁS a sus opiniones. Si no hubiéramos rechazado nada, jamás hubiéramos salido de las cavernas.
Las ideolgías válidas deben ser las únicas que tengan derecho a dar su voz. ¿Y qué es válido hoy en día? La libertad, la justicia, el derecho (y el deber) para TODOS sin distinción. La homofobia es una de las peores plagas a las que se ha enfrentado la humanidad de la que encima no existe «cura» si no se cambian los ideales ni se abre la mente. No hay peor ciego que el que no quiere ver, que aunque suene necio hablar con refranes siempre es más ilustrativo.
Es simplemente vergonzoso que la cuna de los derechos humanos, el modelo de constitución y la separación de poderes de cabida a una cabalgata de ideales que no llevan sino a la ignorancia y al comportamiento animal. Sólo espero que no sea más que una mancha de tantas en su historial y el proyecto vea la luz ignorando semejantes chaladuras.
A lo mejor a Arlequín no le gusta esto: pero la primera separación de poderes y la primera constitución que así lo refrenda no es la le da Revolución Francesa sino la de la Declaración de Independencia y la Constitución de los U.S.A. unos años anterior, desde luego que éstos beben de las ideas de los Ilustrados Franceses, pero la Historia es la historia. En Europa hubo de correr mucha sangre (la vieja sangre), para que se separaran los poderes de verdad. ¿No hizo Napoleón que el Papa fuera a París a coronarlo? Cierto que Napoleón le quitó la corona al Papa y se autocoronó y luego él mismo coronó a su mujer, pero fue en Notre-Dame y con el Papa y todos los mitrados franceses llenos de joyas. La Iglesia Católica, lista ella, siempre ha sabido pegarse al ganador.
Los franceses son originales hasta para protestar contra el matrimonio gay. Sí, la Iglesia católica apoya las protestas pero el debate en Francia fundamentalmente no es religioso. Reconozcámoslo. Hablamos de un país en el que los presidentes tienen novias o se divorcian y vuelven a casar estando en el cargo… cosas inimaginables en EEUU. Es original porque detrás de la manifestación de ayer está una cómica que no considera la homosexualidad un pecado ni un vicio y un gay contrario al matrimonio gay. Hasta el punto de que Civitas, que sí es un grupo ultra y homófobo, hizo una manifestación por separado.
Que conste que me parecen todos igual de bobos. Al tal Bongibault le ha faltado tiempo para hacer la comparación con Hitler.
Francia es mas avanzada en cuestiones de separación iglesia-estado, pero eso no significa que sean mas ateos, o ya puestos, menos homófobos.
Tampoco es que haga daño y puede ayudar, pero al final todo depende del nivel de la sociedad.
En la muy católica españa, lo que se lleva es la hipocresía del aparentar, del ser católico sin pisar la iglesia y abominar de la misma.
En Francia no se.
Ahora, también puedo decir que sus manifas son fotocopias de las de aquí.
En algunas disimularán mas, y habrá menos curas, pero todo es lo mismo, la misma mierda.
Bongibault solo tiene 20 y nadie con quien casarse , es lógico que se oponga al matrimonio igualitario si eso le da dinero .
Ahora si encuentra a alguien dentro de 10 o 20 años se casara igual que se divorcian los católicos .
Aunque fueran 800.000, o, para redondear al alza, pongamos que fueran un millón de manifestantes, Francia tiene setenta millones de habitantes. Con eso queda todo dicho.
Tanto a heteros como homo, deberían pasar un curso de manejo de ira y otro de paternidad para ver si son aptos para contraer matrimonio o tener hijos.