Colorado: el proyecto de ley de uniones civiles supera su primera barrera
Por 3 votos a 2, el Comité Judicial del Senado de Colorado ha dado su visto bueno al proyecto de ley de uniones civiles entre personas del mismo sexo, que inicia con buen pie su andadura parlamentaria. La iniciativa tiene todas las de ganar gracias al control demócrata de ambas cámaras y al apoyo al gobernador, John Hickenlooper.
Hasta las elecciones de noviembre de 2012 los demócratas solo controlaban el Senado, cámara que ya aprobó en marzo de 2011 un avanzado proyecto de ley de uniones civiles que la entonces mayoría republicana en la Cámara de Representantes del estado bloqueó días después. Como informábamos recientemente, una nueva versión del proyecto cuenta ahora con grandes posibilidades de salir adelante. Los senadores Pat Steadman y Lucía Guzmán lo introdujeron hace dos semanas en el Senado estatal. Tras su previsible aprobación será discutido por la Cámara de Representantes, ahora en manos demócratas, y cuyo nuevo speaker es por cierto Mark Ferrandino, un demócrata abiertamente gay. El gobernador Hickenlooper, por su parte, ha prometido firmarlo en cuanto llegue a su mesa.
Por lo pronto el proyecto ha pasado este miércoles su primera barrera, al recibir el visto bueno del Comité Judicial del Senado, que ha escuchado las alegaciones de partidarios y detractores. Entre los oponentes están organizaciones como CitizenLink, en la órbita del poderoso lobby ultraconservador Focus on the Family. Una portavoz de este grupo ha argumentado que las uniones civiles pueden ser un paso previo a la aprobación del matrimonio igualitario, como por ejemplo ha sucedido antes en estados como Vermont, New Hampshire o Connecticut.
En Colorado, sin embargo, la apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo requeriría una modificacion de la enmienda constitucional que lo prohíbe, aprobada en 2006 en referéndum con un 56% del voto. Una posibilidad que no resulta descabellada a medio plazo, sobre todo tras lo sucedido en noviembre en Maine, Maryland o Washington, que aprobaron el matrimonio igualitario en referéndum, o en Minnesota, donde se rechazó precisamente una enmienda constitucional que perseguía su prohibición. Otra posibilidad se abriría con un fallo favorable del Tribunal Supremo de Estados Unidos a la apelación contra el veto al matrimonio igualitario en California que extendiera ese derecho a otros estados. De una forma u otra, según Pat Steadman, uno de los senadores promotores de la ley de uniones civiles, la prohibición del matrimonio igualitario en el estado “no resistirá el paso del tiempo”.