El Ministerio de Sanidad incumple el compromiso del PP y rechaza reconocer Enfermedades Infecciosas como especialidad

Se trata de una vieja reivindicación de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiologia Clínica (SEIMC), que agrupa a buena parte de los médicos que atienden, entre otras, a las personas con infección por VIH: que Enfermedades Infecciosas se convierta en especialidad oficial, como ya lo es en la mayoría de países europeos. Una demanda apoyada además por los colectivos que trabajan en el ámbito del VIH, pero que pese a las promesas del PP el borrador del nuevo Real Decreto que regulará los cambios en el sistema MIR no solo no lo contempla, sino que además devalúa la especialidad de Microbiología existente hasta ahora.

Ya en 2009 nos hacíamos eco de esta demanda, en relación al cuidado de los pacientes con VIH/sida. “Los problemas de la potencia y eficacia de los fármacos, su elevada toxicidad, posibilidad de interacciones farmacológicas, tratamiento de los virus multirresistentes, tratamiento en poblaciones especiales, etc., no pueden ser abordados por médicos generalistas que no disponen de una formación específica en esta enfermedad”, explicaba entonces la SEIMC. Por fin, en abril de 2011, la entonces ministra de Sanidad, la socialista Leire Pajín, anunciaba el futuro reconocimiento de la especialidad. La convocatoria de elecciones generales truncó el proceso, que Álvaro Pascual, presidente de la SEIMC, reclamaba en febrero de 2012 que el nuevo Gobierno culminase, «ya que los representantes del Partido Popular con los que nos reunimos antes de las elecciones apoyaron en todo momento el reconocimiento de la especialidad de Enfermedades Infecciosas«.

Pero el Gobierno del PP no ha cumplido el compromiso, al menos por el momento. En el borrador del nuevo Real Decreto Enfermedades Infecciosas queda solo como un «área de capacitación específica», una especie de subespecialización a la que se accede después de terminar otra especialidad y ejercer dos años. Álvaro Pascual ha escrito ahora en El País un artículo al respecto, en el que razona como solo desde el desconocimiento se entiende la negativa. «En España se ha formado en las últimas tres décadas una amplia red de profesionales sanitarios dedicados a la atención de pacientes, investigación y docencia dentro del área de conocimiento de las enfermedades infecciosas. Estos infectólogos se han autoformado, muchos de ellos en centros extranjeros de prestigio, y han conseguido posicionarse científicamente en una alta cualificación entre la sociedad científica a nivel mundial. Por otra parte, ya existen 93 servicios y unidades/secciones de Enfermedades Infecciosas, y todos los jefes de servicio de Enfermedades Infecciosas siguen manifestando al Ministerio su negativa a la creación de un Área de Capacitación Específica ya que no formará especialistas competentes y no podrá existir una libre circulación de especialistas en la Unión Europea, donde la especialidad ya existe en 23 de los 27 países (…) También es importante destacar que, al existir una estructura plenamente desarrollada en todas las comunidades autónomas, la creación de la especialidad no supondría costes adicionales (…) Además se mantendría la excelencia y se continuaría optimizando el consumo de antimicrobianos, que es una partida muy importante del coste farmacéutico español«, explica Pascual.

«El apoyo y dedicación de los infectólogos han ayudado a mejorar la supervivencia de los pacientes con VIH/sida, inmunodeprimidos y trasplantados y también a mejorar la prevención, diagnóstico y tratamiento de infecciones hospitalarias graves por microorganismos resistentes, controlar los brotes infecciosos de la comunidad y las enfermedades infecciosas en los viajeros o en los inmigrantes», añade. Pascual explica además que las enfermedades infecciosas «tienen un perfil transversal, pues las infecciones pueden localizarse en diversos órganos o sistemas, y es la razón por la que todos los conocimientos y habilidades que deben adquirirse para tener la especialidad no pueden con solo uno o quizás dos años de formación como se contempla si se constituye como área de capacitación específica. Para ello se necesitan, tal como propone la UEMS [Unión Europea de Especialistas Médicos], dos años de formación troncal en Medicina Interna y cuatro años de formación específica en Enfermedades Infecciosas. Todo ello nos lleva a la absoluta necesidad de que sea reconocida su especialidad (…) máxime cuando muchos de los profesionales que ahora atienden estos casos finalizarán su actividad profesional en los próximos 10 años. De ahí la necesidad de garantizar el relevo generacional con la formación de nuevos especialistas en Enfermedades Infecciosas de máxima excelencia«.

Además, se devalúa la Microbiología

El borrador de Real Decreto va incluso más allá, al hacer de la especialidad de Microbiología una especialidad troncal de laboratorio junto a Genética Clínica, Inmunología y Análisis Clínicos-Bioquímica Clínica. «Este tronco no tiene sentido alguno en su versión actual«, alega Pascual. «La diversidad de muestras clínicas, la tecnología y las condiciones de bioseguridad necesarias nos asemeja mucho más a los laboratorios de Anatomía Patológica [especialidad que sí se mantiene como no troncal]», explica. «Y una vez más, no estamos solos en esta argumentación. Contamos con un respaldo global por parte de agentes e instituciones. Todos los profesionales (incluidos los residentes), la Comisión Nacional de la Especialidad, las sociedades científicas (SEIMC y SEM), las comunidades autónomas contactadas (de diferentes signos políticos), y otras instituciones, ven justificada la consideración de Microbiología como no troncal. Todos los partidos políticos, incluyendo los anteriores y actuales responsables del Partido Popular en temas sanitarios, han apoyado la reivindicación de SEIMC. Por lo tanto, solo desde el desconocimiento se puede entender la postura inflexible del Ministerio, especialmente cuando el 100% de los directores de unidades docentes de Microbiología en España han expresado por escrito al Ministerio su negativa razonada a formar residentes troncales«, añade.

«Queremos concluir, por tanto, que mantener las Enfermedades Infecciosas como un Área de Capacitación Específica y/o mantener Microbiología dentro del tronco de Laboratorio y Diagnóstico Clínico perjudicará gravemente y de forma irreversible la calidad asistencial en la prevención, diagnóstico precoz y tratamiento de las personas con enfermedades infecciosas en España«, finaliza Pascual.