Illinois reinicia la tramitación del proyecto de ley de matrimonio igualitario

Primero, la mala noticia: finalmente, la Asamblea General de Illinois no aprobó el proyecto de ley de matrimonio igualitario haciendo uso de la «sesión de rescate» previa a la conformación de la nueva legislatura salida de las urnas en noviembre. Ahora, la buena: sus promotores ya lo han presentado en la nueva legislatura, y las probabilidades de que salga adelante parecen elevadas.

Como detallamos en anteriores entradas, en las últimas semanas se había especulado con la posibilidad de que las dos cámaras salientes -Cámara de Representantes y Senado- que conforman la Asamblea General de Illinois, discutieran durante su última sesión el proyecto de matrimonio igualitario que se presentó hace un año (se trataba de una de las denominadas “lame-duck sessions” o sesiones “de rescate” características del funcionamiento legislativo estadounidense, en las que se aprovecha para cerrar asuntos pendientes). El proyecto contaba con el apoyo de diversas confesiones religiosas minoritarias y del propio presidente Barack Obama, muy vinculado a Illinois, estado en el que ha desarrollado buena parte de su carrera política. Hasta Pat Brady, presidente del Partido Republicano en Illinois, se pronunció “a título personal” a favor de la medida, argumentando además que la postura verdaderamente conservadora es apoyar que las parejas del mismo sexo puedan contraer matrimonio. Enfrente, la iglesia católica: el arzobispo de Chicago, cardenal Francis George, dirigió en Año Nuevo una carta abierta a los católicos del estado de Illinois para que ejercieran presión ante sus legisladores con el objetivo de frustrar la iniciativa.

Lo cierto es que el Comité Ejecutivo del Senado estatal llegó a dar el visto bueno a la propuesta por 8 votos contra 5, pero finalmente los legisladores no quisieron forzar la máquina y prefirieron dejar la decisión a la nueva legislatura. En principio, ello no debe suponer un problema. Tras las elecciones del 6 de noviembre, los demócratas consiguieron una mayoría aún más fuerte que la que tenían previamente en las dos cámaras del estado, en un contexto político y social mucho más favorable al matrimonio igualitario, con los tres representantes abiertamente homosexuales renovando su escaño (Kelly Cassidy, Greg Harris y Deborah Mell) e incluso uniéndoseles un cuarto (Sam Yingling).

Por lo pronto, recién inaugurada este miércoles la nueva legislatura, Greg Harris (en la Cámara de Representantes) y Heather Steans (en el Senado) ya ha reintroducido el proyecto. Los colectivos LGTB, ya superada la presión vivida estas últimas semanas, se muestran optimistas sobre la posibilidad de que el proyecto se apruebe en un corto plazo. Nadie duda además de que en caso de ser aprobado el gobernador Pat Quinn lo apoyará: hace ya varios meses que Quinn expresó públicamente su deseo de que en Illinois haya matrimonio igualitario.

En Colorado se reintroduce el proyecto de uniones civiles

El miércoles también fue un día importante para los derechos LGTB en Colorado, un estado en el que a día de hoy la aprobación de una ley de matrimonio igualitario parece lejana (sería necesario para ello derogar la enmienda a la Constitución del estado aprobada en 2006 por el 56% de los votantes) pero en el que los demócratas se hicieron en noviembre con el control de las dos cámaras del estado. Hasta entonces solo controlaban el Senado, cámara que aprobó en marzo de 2011 una avanzada ley de uniones civiles que la entonces mayoría republicana en la Cámara de Representantes del estado bloqueó en bloqueó días después.

Ahora una nueva versión del proyecto cuenta con grandes posibilidades de salir adelante. Por lo pronto los senadores Pat Steadman y Lucía Guzmán lo introdujeron este miércoles en el Senado estatal. Tras su más que previsible aprobación será discutido por la Cámara de Representantes, ahora en manos demócratas, y cuyo nuevo speaker es por cierto Mark Ferrandino, un demócrata abiertamente gay.