Las agrupaciones juveniles de los principales partidos políticos neozelandeses apoyan el matrimonio igualitario
Las juventudes de todos los partidos con representación en el Parlamento de Nueva Zelanda han mostrado su apoyo al proyecto de ley que se espera introduzca el matrimonio igualitario en el país. Los representantes de todas ellas (incluidos de NZ First, formación que votará en contra de la reforma legal) se reunieron el lunes frente al Parlamento neozelandés para manifestar su apoyo expreso a la iniciativa.
Se trata de un gesto muy significativo, que refleja el consenso entre la juventud neozelandesa respecto al matrimonio igualitario. Se espera que la propuesta de ley sea votada en segunda lectura este miércoles en el Parlamento, donde cuenta con serias posibilidades de ser aprobada. Según Conrad Reyners, portavoz de la Campaña por la Igualdad Matrimonial, este apoyo desde todas las agrupaciones juveniles carece de precedentes. «Está bastante claro que los jóvenes de Nueva Zelanda apoyan la justicia, apoyan el amor, están en contra de la discriminación, y quieren que la legislación de Nueva Zelanda trate a todos los neozelandeses por igual», ha declarado. Se trata además de un apoyo más allá de lo meramente simbólico, y en algunos casos los jóvenes habrían conseguido cambiar el sentido del voto de los diputados de sus partidos, como en los casos del Partido Nacional y de ACT.
Apenas un día antes de la votación, parece probable que el Parlamento de Wellington introduzca el matrimonio igualitario, después de haber aprobado a finales de agosto por 80 votos a favor y 40 en contra el proyecto en primera lectura, y de que el comité parlamentario encargado de su discusión le diera su visto bueno a finales de febrero. Conviene no ser optimistas antes de tiempo, en cualquier caso: la votación en primera lectura puede resultar engañosa. Según entonces expresaron, muchos parlamentarios votaron a favor para permitir que la iniciativa se discutiera, sin tener decidido su voto final. El proyecto pasó entonces a ser debatido por una comisión que debía decidir si recomendar o no su aprobación, y que finalmente se inclinó por el “sí”, siempre y cuando se asegurase que las confesiones religiosas no pudieran ser obligadas a celebrar matrimonios entre personas del mismo sexo contra su voluntad (puedes descargar el informe de la comisión, que incluye el texto propuesto, pinchando aquí).
La propuesta, que partió de la diputada laborista Louisa Wall, fue una de la seleccionadas el año pasado para ser votadas en conciencia, y de hecho es previsible que la votación final no se corresponda exactamente con las líneas divisorias entre los partidos. El proyecto cuenta con el apoyo expreso del primer ministro John Key, del Partido Nacional (centro-derecha), pero es probable que muchos de sus diputados voten en contra. Previsiblemente, los 14 diputados del Partido Verde y una parte significativa de los 34 diputados laboristas votarían a favor (solo tres de ellos votaron en contra en primera lectura). El líder laborista, David Shearer, ya anunció en enero su apoyo al matrimonio igualitario y a la adopción homoparental, declarando que la ley de uniones civiles, vigente desde 2005, ya no es suficiente. Todo dependerá de la posición de otras fuerzas minoritarias y sobre todo del número de diputados del Partido Nacional (59 de los 121 diputados) que decidan finalmente emular al primer ministro y sumarse. En primera lectura, 30 de ellos votaron a favor de continuar el debate.
Una circunstancia a tener en cuenta es el hecho de que las encuestas arrojan que el apoyo al matrimonio igualitario es mayoritario entre la población. Otro posible indicador de por dónde pueden ir los tiros es el hecho de que de las casi 20.000 alegaciones al proyecto recibidas por el comité que expresaban una posición determinada, 10.487 estaban a favor frente a 8.148 en contra.