El presidente de Uruguay promulga la ley de matrimonio igualitario

Ya es oficial. La ley de matrimonio igualitario, recientemente aprobada por el Congreso de Uruguay, ha sido promulgada por el presidente de la República, José Mújica, que la firmó el pasado viernes 3 de mayo aunque la noticia no ha sido conocida hasta este lunes. Las bodas entre personas del mismo sexo podrán empezar a celebrarse a partir del 3 de agosto. Puedes descargar el texto de la histórica ley pinchando aquí.

La Cámara de Representantes de Uruguay aprobó el 10 de abril la ley que abre el matrimonio a las parejas del mismo sexo con el voto de 71 de 92 diputados presentes. El proyecto ya había recibido el visto bueno de la Cámara en diciembre, pero se ha tuvo que volver a votar después de que el Senado lo aprobara pero introdujera algunas modificaciones menores. En condiciones normales el texto debía haberse promulgado en un plazo de 10 días, pero finalmente el plazo se alargó para proceder a eliminar algunos errores de redacción presentes en el texto recibido del Senado. Por fin, este 3 de mayo el presidente José Mújica sancionaba el texto definitivo, vigente a partir de 90 días después de su promulgación. De esta forma Uruguay se convierte en el segundo país de América Latina en disponer de una ley de matrimonio igualitario.

Se ha tratado de un proceso largo: hace ya dos años que se daba prácticamente por segura la aprobación final. Uruguay, no lo olvidemos, ya elaboró en 2007 una ley de uniones concubinarias, y en 2009 aprobó una ley de adopción abierta a todas las parejas con independencia de su orientación sexual y una ley de identidad de género. El trámite parlamentario se vio sin embargo retrasado en varias ocasiones, hasta el punto de que la justicia uruguaya tomó la delantera y reconoció ya hace meses la validez de un matrimonio celebrado en España entre un ciudadano uruguayo y un español.

El tramo final del proceso tampoco estuvo exento de sobresaltos. En diciembre, tras la primera votación en la Cámara de Representantes, saltaba la decepción cuando una mayoría de senadores del Frente Amplio -la coalición de izquierda que gobierna Uruguay- cedía a la presión de los opositores al matrimonio igualitario y decidía retrasar la votación. Pero tal y como se prometió entonces este retomaba su andadura parlamentaria en marzo. La ley fue respaldada por el Frente Amplio, pero también recibió votos procedentes de los opositores Partido Nacional y del Partido Colorado. De poco sirvieron los ataques de la jerarquía católica, y en concreto del arzobispo de Montevideo, Nicolás Cotugno, que aprovechó su homilía de la misa del Domingo de Resurrección para pedir a los legisladores uruguayos que rechazaran el proyecto. También la Conferencia Episcopal del Uruguay se pronunció mediante la publicación de un comunicado que reproducía los argumentos que el nuevo papa, el argentino Jorge Bergoglio, utilizó en su momento para oponerse a la aprobación de una ley similar en Argentina.

Avance del matrimonio igualitario en América Latina

Uruguay fue el duodécimo país en aprobar el matrimonio igualitario a nivel nacional (tras Holanda, Bélgica, España, Canadá, Sudáfrica, Noruega, Suecia, Islandia, Portugal, Argentina y Dinamarca y antes que Nueva Zelanda y Francia). La nueva ley convierte además a América Latina en una de las regiones más avanzadas del mundo por lo que al reconocimiento del matrimonio igualitario se refiere. Además de en la vecina Argentina, también ha sido aprobado, recordemos, en México Distrito Federal (y su validez es extensiva a todo México, según reconoció en su momento la Suprema Corte de Justicia de ese país. La misma corte que en diciembre amparó a tres parejas del mismo sexo del estado de Oaxaca a quienes el Registro Civil denegó la solicitud de contraer matrimonio, una decisión que parece haber actuado como espita para nuevas solicitudes de matrimonio en otros estados). También en Brasil hay ya hay numerosas parejas del mismo sexo casadas en base a decisiones judiciales, que hacen ya posible el matrimonio igualitario en doce estados y en el Distrito Federal.