Éxito de la tercera edición de la Fiesta de los Palomos

Éxito de la tercera edición de «Los Palomos», que congregó al doble de personas que en 2012. Una celebración, convertid en uno de los acontecimientos festivos más importantes de Badajoz, que nació -no lo olvidemos- como protesta contra la homofobia, y que el Ayuntamiento de Badajoz se plantea por cierto reubicar ante la masiva afluencia de gente. Fundación Triángulo Extremadura, principal promotora del evento, se muestra dispuesta a discutir medidas que refuercen la seguridad, pero sin que ello suponga la salida del casco antiguo.

Unas 15.000 personas, según cálculos de la Policía Local (el doble que en 2012), se concentraron en la Plaza Alta de Badajoz y en sus inmediaciones. La fiesta contó en esta ocasión con la actuación de la cantante Bebe, que ejerció como madrina de esta tercera edición. A diferencia de los dos años anteriores en esta ocasión no estuvieron presentes los reporteros del programa de televisión El Intermedio, de La Sexta, aunque el Gran Wyoming saludó a los asistentes con un mensaje en vídeo. Como en los años anteriores un público variopinto, llegado de diversos puntos de España, disfrutó de la fiesta en un entorno de reivindicación de la diversidad. «Unos amigos vinieron el año pasado y nos dijeron que no nos la podíamos perder. Tenían razón, el ambiente es fantástico», comentaban por ejemplo Juanfran y Paco, un matrimonio gay que se desplazó desde Madrid.

Un evento que cuenta además con los parabienes de los hosteleros de la ciudad y que parece consolidarse como una fiesta multitudinaria, lo que evidentemente demanda una infraestructura y unos medios que solo las autoridades pueden garantizar. José María Núñez, presidente de Fundación Triángulo, muy satisfecho con la respuesta, ha insistido en que la fiesta necesita del apoyo de la Administración regional y de los empresarios para que sea sostenible: el presupuesto de este año ronda ya los 25.000 euros.

Triángulo no contempla que la fiesta salga del casco antiguo

En este sentido Fundación Triángulo ha salido al paso, a través de un comunicado, de las declaraciones del concejal de Seguridad Alberto Astorga sobre la oportunidad de redefinir la fecha y la ubicación del evento en futuras ediciones tras la asistencia masiva registrada este año. Triángulo se muestra abierta al diálogo y manifiesta su máxima preocupación por la seguridad del evento, pero «no contempla» que la ubicación no sea el casco antiguo de Badajoz, «que se ha mimetizado con la fiesta asumiéndola como propia». “Los Palomos solo tienen sentido en pleno centro de Badajoz, dado que lo contrario le haría perder visibilidad a gays, lesbianas, bisexuales y transexuales, y no podemos olvidar que el sentido de esta celebración festiva es la reivindicación de que en esta ciudad cabemos todos, sea cual sea nuestra orientación o identidad sexual. Que el sentido de la reivindicación sea lúdico no le resta relevancia a la causa que está tras la fiesta, y que conoce todo aquel que se suma a ella, que como se ha comprobado este fin de semana ha sido mucha gente, y de muchos lugares”, ha declarado al respecto José María Núñez.

Fundación Triángulo «confía en poder dialogar, con mas calma, con los responsables municipales sobre todas las opciones posibles para que la celebración siga siendo posible, con la identidad que tiene y no puede perder, respetando la visibilidad LGBT en pleno centro de la ciudad, con la clara intención de contribuir con el mejor resultado posible a que la libertad para amar se convierta en una seña de identidad de Badajoz».

Una fiesta nacida como protesta contra la homofobia

La primera Caravana de Palomos Cojos (La palabra “cojos” desapareció el año pasado a petición de Cocemfe, la confederación de asociaciones de personas con discapacidad física) tuvo lugar en abril de 2011, y a ella acudieron más de 10.000 personas que se concentraron en Badajoz convocadas por El Intermedio como respuesta a las declaraciones de su alcalde, Miguel Celdrán (PP). En una entrevista en la cadena COPE, Celdrán había asegurado en tono jocoso que a los “palomos cojos” -una expresión utilizada para referirse con carácter despectivo a los homosexuales- en Extremadura “los echamos pa otro lao”. Celdrán afirmó después que sus palabras había sido “malinterpretadas”.

Dosmanzanas tuvo en aquella ocasión un papel destacado: la entrada en la que por primera vez recogíamos lo sucedido, que hasta entonces había pasado desapercibido, fue publicada en la plataforma Menéame llegando rápidamente a portada. A partir de ahí otros medios nacionales se hicieron eco, desencadenando la sucesión de acontecimientos que desembocaron en la organización de la primera caravana. La segunda edición de la fiesta tuvo lugar, también con grán éxito, en mayo de 2012.

Os dejamos, para terminar, con un vídeo del diario Hoy que refleja el ambiente festivo que se vivió el sábado en Badajoz: