Muere Don Andrea Gallo, el buen sacerdote italiano que calificó la homosexualidad como «un don de Dios»

Una pena. Esto confirma nuevamente lo que antes decía: la gente buena se va, mientra la mierda se va quedando aquí.

Es una pena que no haya más personas públicas como él. Probablemente con un conocimiento profundo tanto del contexto histórico bíblico como de griego antiguo y/o hebreo que le permitía interpretar las escrituras sin engaños producidos por traducciones dudosas e interesadas y con conocimiento de lo que era la Iglesia auténtica con santos como San Sergio o San Baco patrones de ritos de adelphopoiesis de unión de personas. Engaños que llevan a personas como el individuo del tercer comentario, Juanito, a decir tonterías confundiendo homosexualidad con violación de ángeles dada en el episodio que menciona de Sodoma y Gomorra (cf. The Bible, Christianity, and Homosexuality, Born Eunuchs) e insultando a Dios con su alto nivel de autocomplacencia, ignorancia y petulancia manifiesta en un comentario de estilo «borreguil» sin el menor fundamento.

Con la jerarquía eclesial siempre ocurre lo mismo: se llenan la boca con la palabra ‘respeto’, pero demuestran no conocerlo en cuanto se analizan mínimamente sus palabras.

En efecto, el llamado «plan de Dios» es lo que USTEDES han interpretado y vendido como tal, en muchas ocasiones añadiendo, quitando, recortando, omitiendo…para mayor gloria de un sistema que en muchas ocasiones no tiene nada que ver con lo que aparece en la Biblia. Se trata de una supuesta estructura de «mediación» que en el fondo no es sino una «interferencia». Y a eso se le llama «verdad».

Mientras tanto, sacerdotes como Don Andrea Gallo, que hacen de su vida testimonio fiel a las enseñanzas de Cristo, son dejados al margen y tomados como una manifestación de ‘frikismo’, que da color local pero que no se debe tomar como ejemplo.

La postura de la Iglesia respecto a las uniones homosexuales no solo radica en el más puro prejuicio (cosa que Dios no ha instaurado en su «modelo ejemplar»), sino que tergiversa la naturaleza de una relación amorosa entre dos personas del mismo sexo, demonizándola, desvistiéndola de cualquier rasgo de sinceridad o de entrega mutua, describiéndola como una pura atracción animalizante. Por esa misma regla de tres, lo que sus feligreses hetero hacen los jueves, sábados y viernes por la noche tras pillarse una cogorza en una discoteca cualquiera es muy honroso, porque en el fondo significará que pasarán por caja.

El que la Iglesia se ponga en la boca la palabra «respeto» mientras se dedica a maltratar a esa parte de la sociedad como son los ciudadanos homosexuales, a estigmatizarlos por la mera idea de exteriorizar su afectividad igual que lo pueden hacer los heterosexuales, es una broma de muy mal gusto.

Si todos somos hijos de Dios y él quiere que nos desarrollemos en esta vida para mayor gloria de su creación, es absurdo que Dios condene el amor responsable entre dos personas, sean del mismo sexo o no, del mismo modo que es absurdo que para ustedes una persona solo cuente siempre y cuando se case y tenga hijos con una mujer. Si el fin es la reproducción, entérense que los homosexuales NO ESTAMOS IMPEDIDOS y que aportamos a la sociedad exactamente lo mismo que la ciudadanía heterosexual. Ustedes no saben ver más allá del estereotipo de las plumas y los grititos. Es tan reduccionista como pensar que todos los hetero son como los personajes de Pleasantville.

Y por cierto: la Iglesia bien haría en no meter las narices en el matrimonio homosexual, en tanto que a ustedes no se les ha pedido que casen a nadie en la Iglesia. DEJEN DE METER LAS NARICES EN LOS MATRIMONIOS CIVILES. A ustedes eso no les compete en absoluto. Otra cosa será que disfruten haciéndose las víctimas cuando en realidad son los perseguidores. Tengan al menos la decencia de no instrumentalizar ni manipular la imagen ni las enseñanzas de Cristo para sus propios fines, más cercanos a lo material, al interés político, a la intransigencia, el lavado de cerebro y la religiosidad popular visceral en la que una persona se siente muy cristiana porque saca a pasear un trozo de madera vestido dos veces al año y luego hasta el año siguiente no vuelve. Ya está bien de tanto demonizar a los homosexuales y tanto meter las narices en las vidas de los demás. TODOS los ciudadanos tienen derecho a sentirse desarrollados plenamente, a expresarse afectivamente y a poder aportar a esta sociedad. Y la aportación a la sociedad no se mide por parir hijos como una coneja.

Respeten ustedes primero, que tienen muy poca vergüenza al venir a dar lecciones de todo aquello en lo que nunca han destacado. Y dejen ya de usar a Cristo de parapeto, que si viniera de nuevo al mundo les iba a faltar a ustedes terreno para salir corriendo.

El que un individuo homosexual puede mostrar su afectividad, desarrollarse en sociedad y llevar una vida plena, como los demás, no es ningún privilegio, es un DERECHO, tanto como ciudadano (por la Constitución) como por ese plan divino con el que usted se llena la boca (pues todos somos hijos de Dios y tan especiales unos como otros, y tan queridos por él unos como los demás).Así que ya está bien de distinciones torticeras y reduccionistas para sus cuadrillas de beatorras del Opus Dei y demás hierbas. Si de verdad se creen que adoptar las maneras de esas sectas, aunque les llamen movimientos o como quieran, es su tabla de salvación, más les vale dejarse hundir y renacer de sus cenizas, porque vaya planazo.

Y no, como usted dice «no tenemos la autoridad para atacarles». Son ustedes tan ridículos y tan mentirosos como los clérigos musulmanes, que se llena la boca con la palabra «respeto» y un eterno «nooo..nooo…eso no es así», simplemente para cubrirse las espaldas, pero luego dejan que sus exaltados caigan sobre esas personas como una jauría en celo, y ahí es cuando ustedes se frotan las manos, porque en el fondo lo único que les interesa es que esa gente les siga ciegamente y les pase su pasta, porque creerán que así ustedes los ponen en primera fila de entrada al cielo.

Cuiden de la gente, amen al prójimo y déjense de manipulaciones, que ya hace mucho tiempo que les han pillado el paso. Eso es lo que les duele, que ya les cuesta mucho engañar. Y cada vez más gente, sobre todo la gente joven, se está dando cuenta. Eso no es un signo de la decadencia moral de la sociedad, sino de que han despertado sus conciencias, y han visto que lo que ustedes plantean es una manipulación de la verdad, y que para seguir a Dios no hacen falta tantos intermediarios.

Así que lo dicho: respeten ustedes, y no pidan a una persona que respete una ofensa. Son ustedes como esclavistas, que llaman al negro inferior en su cara y que esperan que esa persona les bese los pies por lo excelentes que son ustedes al tratarlo como un despojo. Y lo peor de todo es que ustedes creen irse a la cama por la noche con la conciencia tranquila. Que equivocados estáis.

Aprended a respetar al prójimo y trabajad porque la ciudadanía llegue a un desarrollo pleno en su vida, en sociedad. Hetero, gay, bi, trans o como sean. Nadie vale más que nadie por con quién se acuesta. Y nadie aporta más a una sociedad por tener o no tener hijos. Si así fuera, la tierra sería una conejera en vez de lo que es, y ustedes serían calificados como indignos de pertenecer a esta sociedad, porque supuestamente tampoco contribuyen a perpetuar la especie, ¿no? ¿o es que pican entre horas? ah, se me olvidaba, que queda muy bien atacar al matrimonio homosexual, a un compromiso entre personas del mismo sexo que se aman libremente, pero queda muy feo que se hable de los casos de pederastia de la Iglesia. Claro, eso no interesa. ¿O a lo mejor es que eso si está en el plan divino? por esas y otras muchas cosas, reflexionen, y empiecen a respetar ustedes, que mucha más falta les hace. Ustedes como siempre, atacando bajo cuerda al colectivo GLTB, diciendo que «la sociedad es muy mal», «no aportan a la sociedad»…. Y UN MOJÓN. Como les quitaran a ustedes los feligreses GLTB de las iglesias se iban a quedar con casi todas las calvas y las canas que tienen en misa todos los domingos. No hay peores ciegos que los que no quieren ver. Y ustedes hace tiempo que se sacaron los ojos.

Conque respetan mucho a los gays. Váyanse un poquito a tomar por donde amargan los pepinos.

Analizando la historia humana, es una evolución de luchas por la libertad y derechos: de tribus, comarcas, feudos, obreros, las mujeres, los esclavos negros, los pobres, los gays, etc. Lideres y victimas satanizados por las mentalidades y ejes de poder. Ahora: Ser gay o herero, exige de todos: respeto mutuo, ningún tipo de abuso o maltrato contra indefensos y evitar escándalos… Todo en el marco de del respeto y reconocimientos de los deberes y derechos de todos, en una democracia que acoge y defiende a todos, mas aun a las minorías étnica y homosexuales… «Dios es amor y el que ama conoce a Dios». Gracias.

Ok, entiendo y sé que miles de personas se balen de cuanto escribimos para justificar sus actos de vandalismo, carentes de todo respeto en contra de ustedes, personalmente sigo creyendo que todos debemos de ser escuchados y valorados como seres humanos, sin importar que tan diferentes podamos pensar. Ustedes como personas tienen derechos y deberes, yo como persona tengo derechos y deberes, eso nos hace mas humanos, más sabios en nuestro actuar.

QUIEN ARRIBA FIRMA «JORGE QUINTERO» Y QUIEN ES EL DUEÑO DEL ANTIGUO CORREO … INFORMA A TODA LOS LECTORES QUE ESTÁN USANDO MI NOMBRE PARA HACER COMENTARIOS EN ESTA PAGINA, AGRADECE A LOS ADMINISTRADORES BORRAR LOS COMENTARIOS.

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