Nigeria castigará el matrimonio entre homosexuales (y cualquier otro tipo de unión) y perseguirá a las personas que los apoyen

Vuelta de tuerca a la homofobia de estado en Nigeria, cuya Cámara de Representantes ha aprobado finalmente una nueva ley que castiga con penas de cárcel no solo las relaciones homosexuales (que ya son delito en el país africano) sino a cualquier persona de la que se sepa que mantiene una relación afectiva con alguien de su mismo sexo. Las penas más duras, de 14 de años, están reservadas a todo aquel que se atreva a celebrar una ceremonia de unión. Solo falta, para que la ley entre en vigor, que la sancione el presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan.

A falta de conocer los detalles de la versión aprobada este 30 de mayo, la nueva ley castigaría, en primer lugar, a todas aquellas personas que estén casados, formen una unión civil o tengan una relación de convivencia en pareja entre personas del mismo sexo. La ley, y es importante tenerlo en cuenta, no solo afectaría a los nacionales del país africano. También lo haría a turistas, trabajadores de embajadas o consulados no sujetos a inmunidad diplomática y personas que realicen tareas humanitarias: todos ellos podrían ser objeto de persecución penal bajo la nueva legislación. La ley castigaría también a cualquier persona que de forma directa o indirecta preste su apoyo a dichas uniones e impediría la existencia de organizaciones LGTB o que den soporte a los derechos LGTB.

La legislación ya había pasado en diciembre de 2011 el filtro del Senado nigeriano, y en marzo de 2012 recibió la condena expresa del Parlamento Europeo. Una condena que no parece haber importado a los parlamentarios nigerianos, que continuaron la tramitación de la nueva legislación, aprobada en segunda lectura en la Cámara de Representantes en noviembre, enviada después a un último comité y finalmente aprobada en tercera lectura este jueves. Cabe destacar que durante todo este tiempo la ley ha contado con el apoyo unánime de los legisladores nigerianos, ya que tanto los que apoyan al Gobierno como los de la oposición han coincidido en considerar la unión entre dos personas del mismo sexo “ajena a la cultura nigeriana” y “repulsiva”, entre otros calificativos.

Llueve sobre mojado…

Se da la circunstancia de que Nigeria ya es un país extremadamente hostil hacia las personas LGTB, que castigaba las relaciones homosexuales con penas que pueden llegar hasta los 14 años de cárcel (en el sur cristiano) o incluso hasta la muerte (en los estados del norte en los que se aplica la ley islámica). La criminalización de las uniones entre personas del mismo sexo, que ya se ha intentado en un par de ocasiones (en enero de 2009 llegó a ser aprobada por la Cámara de Representantes pero finalmente el proceso legislativo no llegó a culminar) vendría por tanto a endurecer todavía más una situación que ya es de por sí muy dramática.

En dosmanzanas hemos recogido buenos ejemplos de ello. En enero de este año tres hombres que habían sido descubiertos manteniendo relaciones homosexuales fueron desnudados, maniatados y paseados para su escarnio público, y posteriormente golpeados (afortunadamente habrían podido salvar sus vidas). Semanas más tarde, la presidenta de la liga nigeriana de fútbol femenino, Dilichukwu Onyedinma, anunciaba que las jugadoras lesbianas serían excluidas de los equipos de fútbol y de la selección nacional.