Sale del armario el primer político abiertamente gay de Singapur
Vincent Wijeysingha anunció su homosexualidad hace pocos días, convirtiéndose en el primer político abiertamente gay de Singapur. El tesorero del Partido Demócrata singapurense ha anunciado además su intención de luchar por la derogación de la ley que a día de hoy aún penaliza las relaciones homosexuales masculinas. El político salió del armario justo antes de una celebración del Orgullo LGTB en la que participaron más de 20.000 personas, de lejos la más multitudinaria de las que vienen teniendo lugar hasta la fecha desde la primera edición en 2009.
Wijeysingha eligió su perfil en Facebook para anunciar su homosexualidad, justo antes de la celebración del “Pink Dot”, el Orgullo LGTB de la ciudad-estado: “Sí, voy a ir al Pink Dot… y sí, soy gay”. Cabe destacar la valentía detrás de este gesto, desafiando una legislación que en principio podría enviarlo a prisión por “conducta indecente entre hombres”. En efecto, la homosexualidad es un crimen en Singapur, penado por la sección 377-A de su Código Penal con penas de hasta dos años de cárcel, herencia directa de la legislación colonial británica.
Y si bien nadie ha sido enviado a prisión desde 2007 y en la práctica las relaciones homosexuales no se persiguen si tienen lugar en privado, dicha legislación homofóbica ha sido desafiada en los tribunales sin éxito hasta la fecha. El pasado mes de diciembre Gary Lim y Kenneth Chee, pareja desde hacía ya quince años, presentaron una demanda ante la Alta Corte de Singapur con el objetivo de que fuera declarada inconstitucional. Dicho tribunal falló en abril contra la pareja, aduciendo que modificar la ley era responsabilidad del Parlamento.
La valiente decisión de Lim y Chee se produjo tres meses y medio después de que el Tribunal de Apelación de Singapur autorizara la presentación de una primera demanda contra la sección 377-A que en su momento la Alta Corte había desestimado tomar en consideración. Una demanda interpuesta en representación de Tan Eng Hong, detenido tras ser descubierto practicando sexo oral con otro hombre en los baños de un centro comercial (Hong se enfrentaba entonces a una posible pena de dos años de cárcel, aunque luego se decidió acusarlo de un delito no contra la sección 377-A, sino contra la sección 294, que castiga de forma genérica los actos obscenos en lugares públicos, argumento que la Alta Corte utilizó inicialmente para rechazar el caso). En nuestro conocimiento no ha sido hecha pública sentencia sobre este caso.
Desgraciadamente, la derogación de la sección 377-A ha sido ignorada hasta la fecha por el parlamento de Singapur, y el Primer Ministro Lee Hsien Loong ha adoptado la política del avestruz en temas LGTB, declarando desde una falsa equidistancia que “no son cuestiones que podamos zanjar en un sentido u otro, es mejor dejarlas como están, y asumir las discrepancias”.
Sin embargo Wijeysingha no está dispuesto a “dejar las cosas como están“ y se ha mostrado convencido de que la sección 377-A será derogada. En declaraciones a la prensa, el político ha afirmado que los tribunales y los líderes del país pueden esquivar el asunto, “pero la sociedad acabará por adelantarlos en esta cuestión”. Hasta el momento Wijeysingha no ha encontrado problema alguno tras su salida del armario, y de hecho ha sido elogiado desde las filas del Partido de la Acción Popular, la formación conservadora actualmente en el poder. Según el legislador Baey Yam Keng, miembro de dicho partido, el paso de Wijeysingha “ha debido de suponer mucho valor […] Llegará el día en que el Parlamento reabra el debate sobre la descriminalización de la homosexualidad”.
Singapur es una ciudad-estado del sudeste asiático, con una economía capitalista fuertemente desarrollada. Poblada por diferentes grupos étnicos y religiosos, la mayor parte de su población es de origen chino, aunque hay una elevada proporción de malayos e indios. La religión más practicada es el budismo, si bien existen importantes minorías musulmana y cristiana. Es, en cualquier caso, una sociedad globalmente muy conservadora.
Os dejamos, para terminar, con unas imágenes del Pink Dot 2013: