Instituto católico de California despide a profesor tras conocerse su matrimonio con un hombre
Ken Bencomo ha sido despedido de su trabajo en el instituto católico St. Lucy’s de Glendora después de que su matrimonio con Christopher Persky, su compañero sentimental, fuera reseñado en una publicación especializada en temas jurídicos como uno de los primeros en celebrarse después de que el matrimonio igualitario volviera a ser posible en California.
Ken llevaba como profesor en la misma escuela 17 años y su contrato había sido renovado en mayo. Tenía un papel muy activo en la vida del instituto, donde a su función como profesor añadía la de coordinador del anuario y profesor de baile. Su orientación sexual y su relación con Christopher era notoria entre la comunidad educativa, pero tras conocerse la noticia de su matrimonio fue despedido por la hermana Helen Dziuk, adjunta a la dirección del centro.
Ken Bencomo ha hecho público su despido y actualmente negocia su readmisión en el instituto a través de su abogado, Patrick McGarrigle, quien confía en no tener que acudir a los juzgados. Entretanto, una antigua alumna ha puesto en marcha una acción en change.org a favor de la reincorporación de Ken a su puesto que ya va por las casi 17.000 firmas y en la cual, firmantes anónimos y antiguos alumnos de Ken no han cesado de dejar mensajes de cariño y en defensa de su valía tanto personal como profesional.
Ken Bencomo pasa a engrosar la lista de profesores despedidos de centros de enseñanza católicos, no sólo en Estados Unidos, donde podemos recordar el caso de Carla Hale, por mencionar sólo uno de ellos, sino también en España, donde podemos citar el caso de José Albes.
Los responsables del instituto católico de califormia, deberían ser consecuentes con lo que creen. Curas y obispos amancabados y pedófilos en lugares de responsabilidad de la diócesis.
Demostración de que l@s católic@s están en contra de que tod@s tengamos los mismos derechos. Si yo fuera responsable de un centro de enseñanza laico e impidiera a l@s católic@s acceder, ¿qué me llamarían?
#2
Dirían que se trata de una violación de la libertad religiosa, exactamente igual que si protestas por el despido del que habla el post.
También es una amenaza a la libertad religiosa si protestas por que un funeral de estado se oficie según los ritos de la supuesta religión mayoritaria; aunque los seguidores de esa religión mayoritaria también verían como un atentado a la libertad religiosa que en un país donde fuese mayoritario un credo rival se hiciese exactamente lo mismo con sus fieles allá donde son una exigua minoría.
La libetad religiosa, vista desde los creyentes, es algo muy curioso, porque es inmediatamente violada si la sociedad no se sujeta en todo a sus criterios morales y a sus costumbres propias. Sin embargo, todo concesión a un determinado credo es vista como una violación de la libertad religiosa por parte de los seguidores de los demás credos.
Resulta paradójico, pero en el fondo, sólo es posible la libertad religiosa allá donde todos los creyentes de todos los credos están sometidos a unas normas civiles laicas. Pero aquí hay consenso, todos los «verdaderos creyentes» consideran el laicismo como una violación de la libertad religiosa, y todos coinciden ver como único espacio respetuoso para la libertad religiosa aquel gobernado de conformidad a los valores que su credo defiende. El «verdadero creyente» sólo considera protegida su libertad religiosa en aquellos espacios donde los creyentes de los credos ribales, a lo sumo, son tolerados como herejes, paganos o infieles. Muchos mejor si son legalmente discriminados.
Yo estoy por apostar que en una sociedad «verdaderamente religiosa», jamás sería posible la libertad de credo…
Esto lo vienen haciendo por todo el mundo, es increíble que se les permita, acá en Alemania despidieron a una mujer porque se divorcio, ella les metió un juicio y lo ganó. Que arrogancia de esta religión deberían de meter a la cárcel por su corrupción.