Una pareja de lesbianas, una de ellas enferma terminal, podrá casarse en Illinois aunque el matrimonio igualitario aún no está vigente
Una pareja de lesbianas contraerá matrimonio en Illinois siete meses antes de que la ley de matrimonio igualitario entre en vigor. Se trata de Vernita Gray y Patricia Ewert, a quienes un juez del tribunal federal ha ordenado que se facilite una licencia de matrimonio, debido a que Vernita padece una enfermedad terminal que quizás no le permita esperar hasta el 1 de junio, día en que la ley que abre el matrimonio a las parejas del mismo sexo será de aplicación en el estado de Illinois.
El pasado 20 de noviembre, el gobernador de Illinois Pat Quinn promulgaba la ley de matrimonio igualitario, aprobada anteriormente por las cámaras legislativas del estado. La complejidad del proceso, las enrevesadas normas de la Cámara de Representantes de Illinois y lo ajustado de los apoyos hicieron que finalmente se decidiera posponer hasta el 1 de junio de 2014 la entrada en vigor de la ley, al necesitar este plazo menos votos favorables en la cámara baja.
Sin embargo, Vernita Gray y Patricia Ewert, residentes en Chicago, no podían permitirse esperar siete meses más hasta ver formalizado su matrimonio. Vernita Gray padece dos tipos de cáncer cuya gravedad hace que el tiempo le sea precioso. Por ello, el pasado 22 de noviembre, los abogados de Lambda Legal y ACLU (Unión Americana por las Libertades Civiles) hicieron una petición ante el tribunal federal para que se les permitiera unirse en matrimonio bajo una ley ya aprobada aunque no en vigor. Tan solo tres días después, el lunes 25 de noviembre, el juez federal Thomas Durkin ordenó a la Secretaría del condado de Cook, donde se ubica Chicago, que expidiera una licencia de matrimonio a la pareja y que de esta manera se pudiera formalizar su enlace.
El secretario del condado de Cook, David Orr, cumplió inmediatamente con el mandato judicial, haciendo llegar esa misma noche la deseada licencia al domicilio de la pareja. “Como partidario del matrimonio igualitario, me complace que el juez Durkin haya concedido esta exención a Patricia Ewert y Vernita Gray en estos tiempos tan difíciles para ellas”, declaraba Orr. También quiso hacer constar que el fiscal del condado de Cook no se opuso a la petición de la pareja ante el tribunal federal.
Patricia Ewert, por su parte, apenas si encontraba palabras para expresar su alegría: “ha sido una increíblemente maravillosa sorpresa y estamos tan encantadas que apenas nos lo creemos. El juez ha sido un ser humano increíble que ha entendido nuestra lucha. Estoy sorprendida, feliz, encantada». La pareja aún no ha decidido cuando celebrarán una ceremonia. “Ha sucedido todo tan rápido», comentaba Patricia, «Vernita y yo no hemos tenido siquiera la oportunidad de hablar de ello».
La pareja podrá acogerse a los beneficios federales
Vernita tiene 64 años. Su cáncer le fue diagnosticado en 1996, y desde entonces ha luchado contra la enfermedad. Hace cinco años conoció a Patricia, que ahora tiene 65, y se hicieron inseparables. Aunque formalizaron en su día una unión civil, tan solo el matrimonio permitirá que, tras el fallecimiento de Vernita, Patricia obtenga los beneficios federales que se conceden únicamente a las parejas legalmente casadas. A este respecto, John Knight, representante LGTB de ACLU, comentaba que “una de las preocupaciones de Vernita era la posibilidad de cuidar de Pat cuando ella no estuviera. Una vez casadas, financieramente habrá una gran diferencia en la situación de Pat».
Según Camilla Taylor, representante de Lambda Legal, “Vernita tiene una enfermedad terminal y deseaba casarse con la mujer que ama antes de morir, y ahora no tendrá que esperar más. Estas dos mujeres, que han amado y cuidado una de la otra en los momentos buenos y malos, en la salud y en la enfermedad, podrán saber lo que significa estar casadas«.
John Knight también opinaba que “el tribunal ha reconocido que Vernita y Pat no deben ser privadas de la libertad de contraer matrimonio, simplemente por el carácter arbitrario de la fecha de entrada en vigor de la nueva ley. Su amor merece la dignidad del matrimonio ahora y no existe justificación alguna que las obligue a tener que esperar».